Hechos clave:
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Las altas tarifas en Ethereum fueron una constante a lo largo de todo 2021.
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Las soluciones de segunda capa se perfilan como la opción favorita para lograr la escalabilidad.
Ethereum tuvo un año intenso. Algunos sucesos ocurridos en 2021 beneficiaron a sus usuarios e inversionistas, mientras que otros provocaron dolores de cabeza a quienes necesitaron operar en esta red de propósito general especializada en contratos inteligentes.
El equipo desarrollador de la Fundación Ethereum avanza para llegar a la tan esperada fusión (merge, en inglés), cuando la cadena de bloques actual se unirá con la versión 2.0 de la red. Mientras tanto, otras cosas siguen ocurriendo en el ecosistema etherean.
En esta ocasión, CriptoNoticias presenta un balance anual en el que se reviven 10 hechos que marcaron el 2021 de Ethereum. Se incluyen avances tecnológicos, cuestiones de precio y mercados, y las modas y tendencias que se destacaron en el año que acaba de terminar.
1. Año de máximos históricos para las finanzas descentralizadas
Sin duda, 2020 quedó en la historia como el año de la DeFi-manía. Fue en aquel entonces cuando las finanzas descentralizadas (DeFi, por sus siglas en inglés) y más precisamente el yield farming (o rendimiento agrícola) captaron toda la atención.
Pero, si observamos las cifras, vemos que 2021 fue un año mucho mejor para la industria de las DeFi, en cuanto a adopción y valor depositado en las plataformas. Así lo muestra el sitio web de estadísticas DeFiPulse.
A inicios de noviembre de 2021, USD 110 mil millones estaban en contratos inteligentes de finanzas descentralizadas. Eso es una cifra cuatro veces superior a los USD 25 mil millones de finales de 2020.
Alguien podría objetar, con cierta razón, que la subida del precio de las criptomonedas —más precisamente de Ethereum— es responsable de este incremento de valor en las DeFi. En parte, es cierto. Pero si se analiza la cifra no en dólares sino en ether (ETH), la criptomoneda nativa de Ethereum, se ve que 2021 también fue un año de máximos históricos (aunque estos se alcanzaron en abril con 11 millones de ETH depositados).
2021 también fue año de récords para los hackeos en las DeFi. En agosto, se produjo el robo más grande de la historia a una plataforma de finanzas descentralizadas. La seguridad de PolyNetwork fue vulnerada y el atacante se hizo con la suma de USD 600 millones en diversos tokens de las blockchains de Ethereum, Polygon y Binance Smart Chain.
El suceso tuvo un final que puede considerarse feliz. El responsable del ataque —apodado Mr. White Hat— devolvió las criptomonedas y tokens sustraídos. Aparentemente, se trató de un hacker «de sombrero blanco», es decir, que actúa con el objetivo de detectar problemas de seguridad y luego ayuda a solucionarlos.
2. Las finanzas tradicionales ponen los ojos en Ethereum
Ethereum, al igual que muchas otras criptomonedas, se presenta como una alternativa descentralizada al sistema financiero. Eso no impide que inversionistas bursátiles miren a las blockchains con deseo. No quieren quedarse afuera y solicitan la posibilidad de acceder a los criptoactivos desde sus brókeres tradicionales y casas de bolsa.
Esto ha llevado al desarrollo de numerosos productos financieros, como los ETF y otros fondos cotizados que tienen a Ethereum como protagonista. Se destacan entre estos productos los fondos de la empresa Grayscale, que operan de manera extrabursátil.
La Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (también conocida por sus siglas en inglés, SEC) recibió numerosas solicitudes de aprobación de un ETF de Ethereum (tanto de futuros como al contado). Hasta el momento, ninguna tuvo el visto bueno del regulador, que ya ha aprobado ciertos fondos de bitcoin (BTC).
Aunque Wall Street es la capital financiera mundial, en otros países Ethereum también está presente. Canadá, por ejemplo, aprobó el primer ETF de ether a principios de este año, el CI Galaxy Ethereum.
CI Financial, la empresa responsable del ETF señaló en aquella ocasión, tal como reseñó CriptoNoticias:
Con estos fondos, estamos reduciendo los puntos de fricción a los que tradicionalmente se han enfrentado los inversionistas al comprar y mantener criptomonedas. El ETF de CI Galaxy Ethereum es una adición importante a esa línea, ya que esta clase de activos emergentes gana cada vez más interés y validación.
Kurt MacAlpine, director ejecutivo de CI Financial
También Latinoamérica tiene sus productos bursátiles relacionados con Ethereum. Es el caso del ETF de ether lanzado en Brasil por la compañía QR Capital, que fue aprobado en julio de este año.
Varios bancos pusieron sus ojos en Ethereum para comenzar a ofrecer productos relacionados con esta cadena de bloques. Es el caso del BBVA que, un par de semanas atrás anunció que incorporaría servicios de compraventa y custodia de ether para sus clientes en Suiza.
Brasil lleva la delantera en cuanto a adopción bancaria de ETH en Latinoamérica. En septiembre, el banco BTG Pactual confirmó que permitiría efectuar trading de ether y bitcoin desde su plataforma Mynt, a quienes tuvieran una cuenta registrada en dicha institución.
Algunos meses atrás, en abril, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) comenzó una investigación para el lanzamiento de bonos digitales en la cadena de bloques de Ethereum. Se prevé que las negociaciones sean supervisadas por gigantes financieros como Goldman Sachs, Banco Santander y Société Générale.
Casos como los aquí mencionados ponen en evidencia un cambio de paradigma en la relación entre las criptomonedas y el sistema financiero tradicional. Los grandes bancos ya no ven a los criptoactivos como competidores sino como productos financieros de los que pueden obtener un rédito económico.
Esto trae como consecuencia una mayor intervención estatal y regulaciones sobre la industria. Guste o no, es una realidad que no puede ser ignorada y cada actor del ecosistema (usuarios, bitcoiners, ethereans, empresarios, etcétera) deberá tomar las previsiones necesarias para actuar en consecuencia conforme a sus objetivos, intereses, posibilidades o convicciones.
3. Staking de Ethereum 2.0 creció 500% en 2021
Desde el 1 de enero de 2021 hasta el momento de redacción de este artículo, la cantidad de validadores de Ethereum 2.0 se incrementó casi un 500%. El número pasó de 48.000 a 275.000. en un año.
Estos son entidades (que pueden ser personas, pools o usuarios institucionales) que depositaron al menos 32 ETH en el contrato inteligente correspondiente.
En total, la cantidad de ethers bloqueados supera los 8 millones. Tal número representa el 7,3% del suministro total de dicha criptomoneda.
Tal como CriptoNoticias reportó días atrás, la mayoría de estos validadores (más del 60%) son entidades desconocidas. Puede suponerse que se trata de validadores independientes (es decir, que no son parte de un pool de staking).
También está abierta la posibilidad de que unas pocas entidades controlen gran número de estos validadores. Muchos consideran que una situación así sería riesgosa para la descentralización que se pretende en Ethereum.
Los validadores de Ethereum 2.0 recién podrán retirar sus monedas en staking cuando se produzca la tan esperada fusión. En ese momento, la contabilidad de Etherum 1.0 «se meterá» dentro de la Beacon Chain (blockchain de Ethereum 2.0) y se abandonará definitivamente la minería para pasar a un algoritmo de prueba de participación (PoS).
4. Berlin, el primer hard-fork de Ethereum en 2021
La red Ethereum tuvo dos actualizaciones importantes en 2021, que se produjeron mediante bifurcaciones duras (hard-forks) de la cadena. La primera de ellas, Berlin, aconteció el 14 de abril, a la altura del bloque 12.244.000.
Con Berlin se activaron cuatro propuestas de mejora en Ethereum (EIP, por sus siglas en inglés).
- La EIP-2565: cambió el algoritmo con el que se calcula el costo de las tarifas.
- La EIP-2929: también relacionada con las tarifas, las incrementa para ciertas operaciones. El objetivo es brindar mayor seguridad y proteger la red contra potenciales ataques de denegación de servicio (DDOS).
- La EIP-2718: facilita la creación de nuevos tipos de transacciones.
- La EIP-2930: agrega un tipo de transacción con una lista de acceso, una lista de direcciones y claves de almacenamiento.
En conjunto, con estas modificaciones, se pretendió hacer una red más rápida, segura y barata. Como se verá más adelante en este texto, el último punto no se consiguió (o al menos no instantáneamente) y se sigue trabajando con el fin de reducir las tarifas que se pagan en Ethereum.
5. El precio de ETH recompensó a los holders en 2021
En el mercado de criptomonedas, bitcoin ha sido históricamente el líder que guía a la manada y 2021 no fue la excepción.
La moneda creada por Satoshi Nakamoto alcanzó nuevos máximos históricos este año y ETH fue tras ella. El gráfico de precios de ETH que se presenta a continuación permite apreciar su marcada tendencia alcista a lo largo de los últimos 12 meses:
En enero, cada ether cotizaba a USD 736, en el promedio de los diferentes exchanges. Tan solo 5 meses más tarde, el precio de la moneda alcanza su primer pico importante del año, al llegar a los USD 4.134.
Luego, junto con la caída general de todo el mercado de las criptomonedas, ETH llegó a cotizar cerca de los USD 1.600 en junio y julio.
Superada esa corrección, la segunda criptomoneda con mayor capitalización de mercado prosiguió su rumbo alcista y alcanzó el 16 de noviembre el que, hasta ahora, es su máximo histórico: USD 4.891.
En la última semana de 2020 el precio del activo digital rondó los USD 3.700 y los USD USD 4.200.
Las predicciones para el año que viene son variadas. Según muchos analistas —por ejemplo, Willy Woo— el mercado de las criptomonedas, con BTC a la cabeza, seguiría en tendencia alcista al menos durante los primeros meses de 2022. Si tal situación se cumple, entonces probablemente ETH lo acompañe y quizás puedan verse nuevos precios máximos.
Pero también hay quienes no son tan optimistas y prevén una caída generalizada de precios. Posibles nuevos aislamientos por las variantes de la COVID-19 y otros factores macroeconómicos a escala global tendrían la suficiente fuerza para poner en rojo los precios de los criptoactivos.
Al cierre de 2020 e inicios de 2021, ambos rumbos son posibles y no hay una señal clara que indique a dónde se dirigen los precios de las criptomonedas en general y de ether en particular.
6. Los habitantes de Ethereum: NFT, juegos play-to-earn, perros shiba inu y metaversos
Cualquier persona que lleve algunos años metida en el mundo de las criptomonedas sabe que constantemente aparecen nuevas modas y tendencias que capturan toda la atención. En 2021, varias de estas novedades eligieron a Ethereum como la blockchain favorita en la cual desarrollarse.
NFT-manía
La NFT-manía se desató en 2021. Los tokens no fungibles (más conocidos por sus siglas en inglés, NFT), a diferencia de las criptomonedas, no son equivalentes entre sí. Es decir, cada uno es distinguible, único.
Esta característica hace que puedan utilizarse para demostrar la posesión de un objeto que puede ser digital (por ejemplo, una imagen) o del mundo real (por ejemplo, una vivienda). En el año que acaba de terminar, muchos artistas decidieron utilizarlos para comerciar sus obras.
En marzo, el collage digital «Los primeros 5.000 días» del artista plástico Beeple, fue vendido por la casa de subastas Christie’s en casi USD 70 millones.
Fue también en 2021 cuando marketplaces de NFT cobraron fuerza. El mercado descentralizado OpenSea creció de modo considerable y ofrece decenas de miles de tokens coleccionables.
El mayor exchange de criptomonedas por volumen de comercio, Binance, no quiso quedarse atrás y lanzó también su propia sección de NFT dentro de su plataforma.
A lo largo de todo el año, CriptoNoticias reportó cómo clubes deportivos, músicos, artistas plásticos, empresas gastronómicas y un largo etcétera, se sumaron a la NFT-manía y lanzaron sus propios tokens.
Juegos play-to-earn
Relacionado con esto, otra de las industrias que tuvo un boom en 2021 fue la de los videojuegos en blockchains.
Los juegos para ganar criptomonedas (o play-to-earn), si bien existen desde hace varios años, fueron furor el año pasado. Todo comenzó cuando empezaron a circular testimonios de personas en partes del mundo tan lejanas como Filipinas o Venezuela, que lograban ganar una buena cantidad de dinero, precisamente con el juego Axie Infinity.
El boca a boca (o tuit a tuit) fue corriendo y cada vez más personas se introdujeron en este y otros juegos play-to-earn, lo que desató un FOMO generalizado. Tal como lo indica el Glosario de Criptonoticias, esta es la sigla en inglés de «miedo a quedarse afuera», es decir, de perderse una oportunidad importante.
El precio de AXS (token de gobernanza de Axie Infinity) inició el año en USD 0,54 y llegó a un máximo de USD 165 el pasado 6 de noviembre.
En torno a este juego se desarrolló todo un ecosistema de negocios que incluye una relación informal de empleador-empleado, mediante el sistema de becas.
También surgieron otros juegos play-to-earn, aunque no lograron la masividad de Axie Infinity y muchos parecen estar en tendencia a su desaparición, como es el caso de Plant Vs. Undead, que corre sobre la Binance Smart Chain.
Shiba Inu
En medio de la NFT-manía y el furor de los videojuegos, un nuevo habitante del universo etherean empezó a hacer oír su voz (o, mejor dicho, su ladrido): Shiba Inu.
Aunque existía desde hace varios meses, fue en mayo cuando esta memecoin (desarrollada como un token ERC-20) empezó a cobrar relevancia, tras ser listada en el exchange Binance, que explicó en aquel entonces:
Shiba Inu es un experimento sobre una comunidad descentralizada y otra moneda meme similar a dogecoin. SHIB es el token nativo de Shiba Inu y será el primer token en ser listado y utilizado como incentivo de ShibaSwap, un exchange descentralizado.
Binance, exchange de criptomonedas.
Esta criptomoneda llegó a posicionarse dentro del top 10 del mercado, y su incremento de precio fue reportado en varios boletines de CriptoNoticias. Sus defensores alegan que los desarrolladores tienen grandes planes de expansión y sus detractores argumentan que se trata solo de una memecoin o una shitcoin, sin valor intrínseco.
Metaversos
La tendencia en boga en el mundo de las criptomonedas son los metaversos, universos virtuales tokenizados.
Aunque, con Decentraland a la cabeza, los metaversos en blockchains llevan ya varios años de existencia, fue el cambio de nombre de «Facebook» a «Meta» lo que les dio el impulso que necesitaba este mercado.
Así, comenzaron a florecer nuevos metaversos, muchos de ellos temáticos y especializados en una determinada área: los deportes, la cultura callejera, la música, los juegos, etcétera.
De acuerdo con lo reportado por CriptoNoticias, 50 mil personas ya están dentro de los metaversos. Indica la compañía de inversiones Grayscale:
El valor histórico invertido en las ventas de artículos en la web 3.0, como terrenos, bienes y servicios virtuales, ha superado los USD 200 millones. Al eliminar las empresas centralizadas de la web 2.0 que históricamente han controlado estos espacios en línea, los mundos virtuales se han beneficiado de una rápida innovación y ganancias en publicidad.
Grayscale, compañía de inversiones.
Con el impulso inicial brindado por la empresa Meta, la industria en torno a los metaversos da indicios de que seguirá creciendo en 2022. De todos modos, podría presentar problemas de escalabilidad si no se crean recursos computacionales que permitan sustentar estos universos virtuales.
Un reciente reporte del fabricante de hardware Intel muestra que «los metaversos requerirán multiplicar por 1.000 la potencia informática actual». Explica Raja Koduri, directivo de la mencionada empresa: «nuestra estructura informática, de almacenamiento y de red actual simplemente no es suficiente».
7. Un año de pesadillas para las tarifas en Ethereum
Las tendencias que llegaron a Ethereum, que fueron nombradas en el punto anterior, trajeron consigo un enorme caudal de usuarios. El problema es que la red no estaba preparada para recibirlos y se vivió un 2021 de congestiones, demoras y elevadas tarifas para poder operar.
Como reseñó CriptoNoticias días atrás, 2021 fue un año de pesadillas para las tarifas en Ethereum. Estas llegaron a un promedio diario de USD 70 en mayo. Al momento de redacción de este artículo, la cifra está en USD 38.
Semejantes montos convierten a Ethereum en una red que, según algunos, es elitista. Deja a muchos afuera. Además, la experiencia de usuario debido a las frecuentes demoras no es la mejor.
A inicios de diciembre, este medio reportó que numerosos usuarios y desarrolladores «huyen» de Ethereum hacia otras cadenas de bloques para tener una mejor experiencia de usuario al operar en aplicaciones descentralizadas. Binance Smart Chain, Polygon, Solana, Avalanche y Terra han sido algunas de las cadenas de bloques que se beneficiaron del éxodo.
También la red Tron cobró protagonismo, sobre todo para el envío y recepción de Tether USD (USDT), la principal stablecoin según su capitalización de mercado. En junio de 2021, el exchange Bitfinex informó que procesaba 4 veces más transacciones de USDT en Tron que en Ethereum.
8. El hard-fork London y la EIP-1559: esperanza para Ethereum
El segundo hard-fork producido en Ethereum en 2021 fue London. Se dio el 5 de agosto a la altura del bloque 12.965.000.
Esta bifurcación trajo consigo la tan esperada propuesta de mejora EIP-1559. Desde entonces, Ethereum cuenta con un nuevo mecanismo de tarifas. Ahora, se les paga a los mineros una tarifa base (que es quemada) y se añade una propina (que es recibida por quien mina el bloque).
Estaba muy expandida la idea de que, a partir de que se activara la EIP-1559, se reducirían las tarifas en Ethereum. Esto, si bien está pensando así, es un beneficio del que se disfrutaría en el largo plazo.
Grande fue la decepción de varias personas al ver que las tarifas no se reducían tras el hard fork London.
Lo que sí es perceptible en Ethereum desde que se implementó la EIP-1559 es el decrecimiento del ritmo de emisión.
A diferencia de Bitcoin, en Ethereum no existe un circulante máximo de ETH. Esto, en el largo plazo podría traer consecuencias negativas para el precio de la criptomoneda, debido a su constante inflación.
Con la EIP-1559, como ya se ha dicho, una parte de las tarifas es quemada. Se espera que, en el largo plazo, Ethereum sea deflacionario. Por ahora, ya pueden verse algunos bloques aislados en los que los ETH quemados superan a los ETH emitidos.
9. Cambio de estrategia: la escalabilidad de Ethereum se dará en capa 2.
Ahora, ya nadie espera que la EIP-1559 o alguna nueva propuesta de mejora solucione instantáneamente el problema de la congestión en Ethereum. Está mayormente aceptada la idea de que la escalabilidad se dará por fuera de la red principal.
Es este el motivo por el que se le da una gran importancia al desarrollo de soluciones de segunda capa como son los rollups. Estas implementaciones «envuelven» varias transacciones de Ethereum (pueden ser envíos de ETH, de tokens, o firmas de contratos inteligentes) y las ejecutan por fuera de la cadena principal. De este modo, no se sufre la congestión de la red ni se le deben pagar elevadas tarifas a los mineros.
El propio Vitalik Buterin, creador de Ethereum, piensa en un futuro «rollupcéntrico». En un reciente texto de su autoría, reseñado por CriptoNoticias, el desarrollador asegura ser consciente de que estas soluciones de escalabilidad tienden a la centralización. De todas formas, asegura que esto no será un problema si la capa principal de Ethereum se mantiene fuerte y descentralizada, con numerosos nodos distribuidos.
Además de los rollups, las cadenas laterales (o sidechains) de Ethereum se desarrollan y ganan terreno en cuanto a adopción. Entre ellas se destaca Polygon (anteriormente llamada Matic). Esta es una bifurcación de Ethereum con su propia contabilidad. Su moneda nativa no es ETH sino Matic.
El equipo desarrollador —oriundo de la India— presenta una narrativa amigable con Ethereum. No busca ser una competencia para la red principal sino un aporte a su escalabilidad. Es por esto que han conseguido atraer a varias plataformas tradicionalmente desarrolladas solo en Ethereum, como Aave, OpenSea, PoolTogether y, más recientemente, Uniswap.
10. El fin de la minería en Ethereum se acerca… o eso dicen
Todo avanza hacia la completa implementación de Ethereum 2.0. Entre otros cambios, traerá consigo el abandono de la prueba de trabajo (minería) para dar lugar a la prueba de participación (staking).
En la comunidad de Ethereum se vive una constante sensación de inminencia sobre la llegada de la nueva versión de la red. Pero, lo cierto, es que ya se ha retrasado numerosas veces su lanzamiento definitivo.
Uno de los que cree que la minería se abandonará en 2022 es el empresario Ryan Sean Adams, CEO de la firma de inversiones Mythos Capital. Según declaró en noviembre, le tomaría entre 5 y 8 meses a Ethereum pasar por completo a su versión 2.0.
Pero hay indicios de que posiblemente no todo vaya a ocurrir tan rápido. A inicios de diciembre volvió a retrasarse la bomba de dificultad en Ethereum, lo que es evidencia de que hay minería para rato.
La bomba de dificultad es un mecanismo que dificulta la minería de ETH, conduciendo a la Ice Age (era de hielo), período en el cuál no habrá actividad minera, proceso previo a la fusión entre la blockchain actual y la Beacon Chain.
Vitalik Buterin, según informó CriptoNoticias a inicios de diciembre, dio a conocer que Ethereum 2.0 se demoraría al menos un año más. En una hoja de ruta publicada por el desarrollador ruso-canadiense, se dio a conocer que, para producirse la tan esperada fusión, todavía quedan varias etapas y módulos por terminar.
Un año colmado de noticias sobre Ethereum
Como queda en evidencia en estas líneas, Ethereum dio que hablar en 2021 y CriptoNoticias así lo ha reportado detalladamente. Cuestiones tecnológicas, de mercado, de negocios e incluso de entretenimiento tuvieron a Ethereum como protagonista.
El año que hoy comienza, sin duda, también estará colmado de novedades sobre esta y otras cadenas de bloques, criptomonedas, tokens y desarrollos relacionados. Te invitamos a acompañarnos un año más y a seguir informándote con nosotros en 2022.
¡Feliz año nuevo!