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El entorno de las criptomonedas está repleto de proyectos que murieron y no resucitarán.
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Los fantasmas y vampiros saldrán de sus tumbas, mientras recordamos a los muertos del mundo bitcoin.
Es hora de Halloween o «noche de brujas», así que hoy es normal que salgan los fantasmas y vampiros desde el cementerio de los proyectos basados en criptomonedas, donde también abundan los calderos de estafas.
La historia de Bitcoin y en general del mundo de las criptomonedas está cargado de momentos escabrosos. No se trata solo de volatilidad, sino también de otros acontecimientos que se convirtieron en la pesadilla de millones de usuarios.
Siendo así, ¿qué mejor día que el más terrorífico del año para recordar a toda esa clase de esperpentos que alguna vez lucieron un disfraz de criptomoneda? Muchos de ellos eran proyectos de humo ocultos bajo lindas fachadas a los que hoy podemos observar sin sentir pánico y demostrar nuestra valentía, como dignos aficionados a Halloween.
El terrorífico mundo de las estafas con criptomonedas
Los estafadores nunca se toman un descanso, y por años se han encargado de crear escenas que aterran a quienes creen en sus propuestas. Incluso, muchos han insistido en demostrar que los verdaderos monstruos pueden ser aquellos que no salen de los cuentos o películas de horror, sino los que prefieren lucir como cualquier otra persona, aunque ocultan intenciones oscuras.
Las estafas que han existido en el ecosistema de bitcoin demuestran que el terror no es un asunto fantástico, ni sobrenatural, sino que existe en el mundo real y se alimenta de él. Los creadores de BitConnect, OneCoin y MtGox, así lo han demostrado.
Tenebroso ponzi BitConnect: un recorrido de pánico y destrucción
BitConnect fue lanzado en 2016 como una criptomoneda que podía ser exclusivamente comercializada a través de una plataforma de inversión y préstamos que tenía el mismo nombre. En 2018 cerró su sitio después que los reguladores de valores advirtieron a los inversionistas sobre el supuesto fraude proveniente de la empresa, como lo informó CriptoNoticias en aquel momento.
Como se sabe, no es la única estafa que ha existido en la industria de las criptomonedas, pero podría decirse que es una de las que más se ha hablado. Con su nombre se creó un esquema piramidal en el que se usaba el dinero que ingresaba, proveniente de los nuevos inversionistas, para otorgar beneficios a los participantes más antiguos.
El proyecto engañó a miles de personas de diversas partes del mundo para que invirtieran, ofreciendo rendimientos irreales en los préstamos a través de su token nativo. La plataforma recaudó aproximadamente USD 2.500 millones antes de cerrar en enero de 2018 cuando la estafa salió a la luz, dejando en la ruina a todos aquellos que habían invertido en él.
Posteriormente, decenas de acusaciones han girado en contra del proyecto, así como de sus creadores y promotores. Incluso, el FBI llegó a crear un programa para encontrar víctimas de BitConnect, con el objetivo de profundizar en la investigación, mientras sigue tras la pista de las personas involucradas en la estafa.
MtGox: la peste negra de la historia de bitcoin
Cuando Mt. Gox quebró en 2014, era el intercambio de bitcoin más grande del mundo, con 850.000 BTC en custodia de miles de sus usuarios.
La empresa, que llegó a canalizar hasta el 70% de las transacciones que se hacían en la red en ese momento, se vio obligada a declararse en bancarrota, tras afirmar que había perdido cientos de miles de bitcoins debido a un evento de piratería. En ese momento el precio de bitcoin era de USD 380 por unidad, lo cual equivalía a unos USD 480 millones. Pero ahora son unos 49.300 millones de dólares al precio de la criptomoneda hoy, según el índice de precios de CriptoNoticias.
El 24 de febrero de 2014 Mt. Gox suspendió todas sus operaciones y el sitio web fue desconectado. En esa misma fecha, un documento de gestión de sucesos internos (supuestamente filtrado) revelaba que, tras un robo que pasó inadvertido durante años, el exchange se volvió insolvente para sus 127.000 acreedores.
Mt. Gox fue construido como un sitio web dedicado al juego de cartas coleccionables The Magic, por el programador Jed McCaleb en 2006 y vendido en 2011 al francés radicado en Japón Mark Karpeles, quien fue apresado por las autoridades de ese país el 1 de agosto de 2015. Se le acusó de malversación de fondos, bajo la sospecha de haber falsificado los datos de su cuenta en el sistema de transacciones de la empresa, además de rellenar artificialmente su saldo en efectivo por un millón de dólares.
Posteriormente el francés fue declarado inocente, toda vez que el 14 de marzo los cargos de malversación fueron desestimados, aunque la Corte determinó que debía cumplir dos años y medio de prisión por manipulación de los registros contables de la empresa en 2013.
A lo largo de todos estos años, desde el cierre de la plataforma, las víctimas de Mt. Gox han permanecido en una dura y larga batalla con la esperanza de ser retribuidos por un plan de compensación que todavía no se cumple.
Onecoin: un aterrador disfraz de criptomoneda
Dicen que los superhéroes usan sus poderes para ponerlos al servicio de la humanidad, mientras que los villanos hacen exactamente lo contrario y, por eso, todo en el mundo es una lucha constante entre el bien y el mal. Así que una mujer con un encanto y poder de convencimiento tan potente, pudo haber construido un proyecto para el beneficio de muchos, sin embargo, prefirió engañarlos a todos.
Ruja Ignatova, mejor conocida como la “cripto reina”, fue el personaje que estuvo detrás del esquema piramidal conocido como OneCoin. Ella prometió riquezas a miles de personas a cambio de que invirtieran en lo que catalogó como una revolucionaria criptomoneda, pero un día ella desapareció sin dejar rastro.
La criptomoneda falsa de Ruja Ignatova, desde 2014 logró convencer a millones de personas con la promesa de que era capaz de competir con Bitcoin e incluso superarla. Con ello, llegó enganchar a inversionistas de 175 países. Todos creyeron en su promesa de riqueza.
OneCoin prometía a las personas que sus vidas cambiarían desde el momento en el que compraban los supuestos paquetes educativos que ofrecían sus promotores. El producto Tycoon, por ejemplo, podía llegar a costar 5.000 euros (USD 5.936). Familiares y amigos hacían colectas, juntaban sus ahorros, vendían algunas propiedades con la idea de invertir.
Recibían a cambio unas supuestas criptomonedas recién minadas y siete archivos PDF, aparentemente plagiados de documentos significativos del mundo de las finanzas. Quien luego visitara el sitio web de la empresa notaba que el precio de la criptomoneda falsa había subido. Sin embargo, nadie investigaba, ni preguntaba. Las personas no sabían que no podían hacer nada con esas monedas.
Hoy el FBI sigue buscando a la desaparecida Ruja Ignatova, aunque en marzo del año 2019 fue arrestado Konstantin Ignatov, hermano de la cripto reina, quien asumió el puesto de líder de OneCoin tras la desaparición de la mujer.
Entre tanto, las víctimas de OneCoin se siguen preguntando si algún día la llamada reina de las criptomonedas será presentada ante la justicia.
Cementerio de proyectos y fantasmas que conspiran contra bitcoin
Satoshi Nakamoto inventó a Bitcoin y luego fue capaz de desprenderse de ello para beneficio de los humanos. Él demostró que la tecnología con buen propósito es más grande que una persona. Pero, también es cierto que desde que surgió la pionera de las criptomonedas, existen personas en el mundo que buscan solo beneficios personales.
¿Qué es lo que hace que los villanos se transformen en lo que son? Quizás deberíamos preguntárselo a antihéroes del mundo real como Peter Kürten, conocido como el vampiro de la ciudad alemana de Düsseldorf. En 1931 fue ejecutado tras ser acusado de abusar, torturar, asesinar y beber la sangre de un buen número de víctimas.
En todo caso, no todos los villanos tienen el mismo nivel de maldad y en muchos casos los eventos desafortunados se conjugan, afectando a miles de personas. Puede que muchas de ellas no estuvieran planificadas por alguien en específico, pero así tenían que suceder, como si se tratara de parte de las escenas de grabación de la saga de terror Destino final, que, por cierto, no pueden faltar en cualquier maratón de Halloween.
En el mundo de las criptomonedas también se han combinado los eventos desafortunados que han llevado al cementerio a varios proyectos como QuadrigaCX, Silk Road y mucho más en lo que se conoció como el cripto invierno.
Quadriga: la calabaza malvada del mundo de las criptomonedas
Cuando Gerald Cotten murió repentinamente el 9 de diciembre de 2018, también se llevó a la tumba las llaves para acceder a las carteras frías donde almacenaban los fondos del exchange de criptomonedas que lideraba, QuadrigaCX. Con ello, más de 100.000 usuarios quedaron en el limbo.
Este hecho generó grandes sospechas, en especial porque el deceso de Cotten no fue notificado hasta más de un mes después de que ocurriera.
Según una declaración jurada presentada por la viuda de Cotten, la firma tenía una deuda de 190 millones de dólares estadounidenses con 115.000 usuarios en dinero fíat y criptomonedas.
Posteriormente, los investigadores que llevaban el caso identificaron seis direcciones de carteras frías de QuadrigaCX, pero encontraron que estas estaban sin saldo. Y, más tarde, revelaron que Cotten transfirió fondos de los usuarios a sus cuentas personales.
Esos fondos luego se intercambiaron en distintas casas de cambio y, en algunos casos, se utilizaron como garantía para una cuenta de negociación de margen establecida por Cotten.
Había quedado claro entonces que Gerald Cotten había hecho un fraude a través del exchange QuadrigaCX. Un reporte de una Comisión de Valores de Ontario (OSC) reveló que, en realidad, Cotten perdió los fondos por «conductas fraudulentas» y no porque los fondos habían quedado atrapados en carteras frías.
Fue entonces cuando se supo que QuadrigaCX no tenía oficinas, empleados, ni cuentas bancarias. Básicamente, era una banda de un solo hombre dirigida en su totalidad por Cotten, dondequiera que él, y su computadora portátil, estuvieran, que generalmente era su hogar en Fall River, Nueva Escocia.
Usó algunos contratistas externos para manejar parte del trabajo adicional, incluido el procesamiento de pagos. La computadora portátil en la que realizó todo el negocio estaba encriptada y nadie más tenía la contraseña, ni la clave de recuperación.
La declaración jurada que hizo al tribunal Jennifer Robertson, la viuda de Cotten, incluyó evidencia de que el CEO de QuadrigaCX había dejado de atender cientos de giros bancarios de los que surgían reclamos. Esas disputas bancarias eran señales de que la empresa enfrentaba una severa crisis de liquidez, con usuarios frustrados que enfrentaron retrasos y dificultades para acceder a sus fondos.
El cripto invierno: el ataque de los muertos vivientes
El colapso de los precios de bitcoin y las altcoins que se produjo a finales de 2017, y se mantuvo durante todo el año 2018, dio comienzo a una tendencia bajista en el mercado de las criptomonedas. Ese período, que se conoce como el «cripto invierno», trajo consigo el colapso simultáneo de alrededor de 2.000 proyectos de criptomonedas.
El cripto invierno puede interpretarse entonces como el detonante de una especie de pandemia que se esparció en la industria. Durante esta etapa, fallecieron miles de proyectos que deambulaban por el ecosistema sin bases sólidas y que, por esa razón, no resistieron el impacto que recibieron de la dura etapa marcada por el pánico generalizado de los inversionistas.
La fase no tuvo nada que envidiar a la saga de Resident Evil, por los proyectos que emergieron del mundo de las criptomonedas convertidos en zombis y monstruos. Fue una etapa en la que sobrevivieron los más fuertes.
Esta Era helada, tuvo una antesala que se conoció como la fiebre de las Ofertas Iniciales de Moneda (ICO) que fue una forma de recaudar mucho dinero del público mediante la venta de tokens que solo eran promesas para proporcionar acceso a algún servicio más adelante. Sin importar lo que ofrecieran o en qué estaban basados, la gente compraba estos tokens con gran avaricia. Según datos publicados por CriptoNoticias en 2019, los emisores de ICO retuvieron USD 24 millardos en tokens entre 2017 y 2018.
Muchos malos proyectos y malos actores se aprovecharon del momento. Pero cuando se supo que los reguladores estaban dando vueltas a este modelo de financiación, los precios en todo el mercado se hundieron y no se recuperaron durante mucho tiempo. Ese fue el comienzo del cripto invierno.
Entonces, los proyectos que no estaban bien respaldados, o bien administrados, desaparecieron de la fría nieve virtual, mientras que los de mayor calidad y mejor financiados, lograron superar el cripto invierno.
Hay sitios web como Coinospy y Deadcoins que rastrean proyectos de criptomonedas fallecidos que flotan en este espacio muerto. Por lo tanto, a estos espacios los podemos considerar como los cementerios en el que yacen miles de Frankensteins que alguna vez vivieron en el mundo bitcoin, donde la mayoría de ellos no pasaron de los dos años de vida.
Solo en Coinospy hay más de 2.000 «tumbas» y con un pequeño recorrido es posible notar que muchos buscaron confundir a los inversionistas usando el nombre el nombre de la pionera de las criptomonedas. Entre ellas, BitcoinX, BitCoin Crown, Bitcoin Private o Bitcoin Interest.
Silk Road: pesadilla en el inframundo de la dark web
Silk Road fue un sitio web fundado en enero de 2011, que funcionó como un mercado de productos ilícitos en la dark web. Pero más allá de ello tuvo una estrecha relación con bitcoin, no solo porque fue el primer mercado en aceptar a la primera de las criptomonedas como medio de pago, sino porque, además, fue la referencia que dictó el precio del criptoactivo durante un tiempo.
Creado por el estadounidense Ross William Ulbrich, Silk Roak solo funcionó por dos años, aunque lo hizo con éxito dada la combinación de bitcoin para pagos y Tor para la navegación anónima. Una fórmula que catapultó al sitio, que tanto llamó la atención en Internet.
No era para menos, pues estaba claro que su éxito radicaba en que era un mercado con cualidades escasas en el planeta. A través de él, había una manera de adquirir productos y servicios de manera privada, y con resistencia a la censura, o al menos eso era lo que se creía en ese momento.
En 2013 el sitio fue cerrado como resultado de una investigación del FBI y la DEA. Como parte del procedimiento se efectuó la incautación de cientos de miles de BTC que circulaban en Silk Road.
En 2015, Ulbrich fue condenado a dos cadenas perpetuas y cuarenta años en prisión, tras un juicio plagado de irregularidades.
Este año Ross tuvo la oportunidad de dirigirse al público que asistió a la Conferencia Bitcoin 2021, y en ese momento comentó sus sospechas de que Bitcoin no estaría donde está si no fuera por Silk Road.
Sin embargo, también reconoció que, al crear el sitio, hizo las cosas más difíciles para la industria. Esto porque fue en buena medida gracias a Silk Road que Bitcoin ganó su reputación como moneda para usos criminales, prejuicio que aún se mantiene en el pensamiento colectivo.
No hay manera de saber si las cosas hubieran sido distintas, pero quiero decir que, en la medida en que haya hecho las cosas más difíciles para nosotros, lo lamento (…) Estaba tratando de ayudarnos a avanzar hacia un mundo más libre y equitativo. Pero todos sabemos que el camino al infierno está pavimentado de buenas intenciones. Y ahora estoy aquí. Estoy en el infierno. Quiero que entiendan lo que significa perder tu libertad.
Ross Ulbricht, creador de Silk Road.
Así como Silk Road ha dejado huellas en Bitcoin, también es cierto que la creación del sitio ha estampado una marca en el mundo. Se trata de un surco imborrable que hace que la humanidad se pregunte dónde están los verdaderos villanos. ¿Son los que están encerrados en una celda hasta morir? ¿O los que manipularon las evidencias para encerrar a alguien con la idea de dar un castigo ejemplar?
Silk Road encierra una historia profunda y perversa que involucró robos por parte de los agentes que participaron en la investigación. Shaun Bridges, quien trabajó para el Servicio Secreto de Estados Unidos como un experto en informática forense, se declaró culpable de lavado de dinero y obstrucción de la justicia. También admitió haber trasladado bitcoins de Silk Road a cuentas propias.
Por su parte, Carl Force, un agente líder encubierto de la investigación, fue acusado de crear identidades ficticias para extorsionar y negociar con Ulbricht. El agente que, en ese momento trabajaba para la DEA, transfirió más de 235.000 dólares a una cuenta en Panamá para ocultar el dinero que obtuvo al extorsionar al creador de Silk Road.
Bonus extra
China, de paraíso de las criptomonedas a desierto embrujado de mineros de bitcoin
China fue alguna vez el rey de la minería de Bitcoin. El país asiático tenía la industria más grande de mineros digitales de todo el mundo y, por lo tanto, allí se concentraba al menos las tres cuartas partes del poder computacional que se generaba a nivel global para la extracción de criptomonedas.
Sin embargo, todo cambió en mayo de este año cuando el gobierno chino se enfrascó en detener a la industria de la minería de bitcoin. Así que ya para julio había detenido gran parte de las operaciones, con ocho de sus provincias prohibiendo la actividad.
Así que el país que alguna vez fue conocido como el paraíso para la minería de Bitcoin, gracias a sus represas hidroeléctricas y a la capacidad de su red de distribución de energía, de pronto pasó a ser un lugar de donde los mineros emigraron hacia otros países.
¿Y a dónde fueron estos mineros?, pues ahora Estados Unidos concentra más de un tercio de la minería de Bitcoin en el mundo, desplazando a China como territorio que centralizaba esta actividad.
Kazajstán y Rusia también se han convertido en lugares populares, aportando el 18% y el 11% del poder computacional que se genera en el mundo para la minería de Bitcoin.
En definitiva, mientras crece el poder de cómputo en otros países, más evidencia queda de que China fue una de las naciones más potentes para el mundo de las criptomonedas. Pero ahora ha cedido terreno, no solo porque ha perdido a todos los mineros que alguna vez se refugiaron en su territorio, sino porque además lo ha hecho toda empresa vinculada a los activos digitales, que ahora están prohibidos en el país.
China, además, entre su nueva normativa anuncia el inicio de una cacería de brujas contra los bitcoiners radicados en su territorio. Entonces queda la duda de si en realidad Halloween es una celebración basada en lo fantástico o si, por el contrario, la vida real es demasiado parecida a la fiesta norteamericana que se ha extendido por todo el mundo.