FTX intentó manipular el mercado de bitcoin, según confesiones de Caroline Ellison

Nuevos detalles sobre los hechos que llevaron al colapso de FTX salieron a la luz en el marco del juicio al exdirector ejecutivo del exchange de criptomonedas, Sam Bankman-Fried (alias SBF), que comenzó hace una semana.  

La información se conoció a través de las declaraciones de Caroline Ellison, ex CEO de la filial del exchange Alameda Research y exnovia de Bankman-Fried, quien se presentó como testigo estrella en el estrado, revelando datos sobre los esfuerzos que hicieron para manipular el mercado de criptomonedas. 

En su testimonio, Ellison contó cómo, en medio de la desesperación, se hicieron planes para comprar criptomonedas como forma de influir en su precio del mercado.  

En ese sentido, se usaron los fondos en bitcoin de los clientes de FTX para tratar de mantener la liquidez del negocio, haciendo grandes operaciones con BTC para influir en su valor en el mercado internacional.  

Se trata de una serie de prácticas deshonestas que se conocen como pump & dump. Estas operaciones de compraventa sirvieron para manipular de cierta manera la cotización de la moneda digital. 

Sobre este tema, algunas de las notas que Ellison guardó indican que Bankman-Fried tenían un plan de venta de fondos en BTC, para tratar de mantener su valor por debajo de los USD 20.000 por unidad. Un rango de precio en el cual llegó a estar la moneda digital en medio del criptoinvierno de 2022. 

Habló asimismo sobre los grandes pagos (sobornos) que Alameda realizó en 2021 para descongelar USD 1.000 millones que había mantenido en cuentas comerciales en intercambios chinos.  

Supuestamente también se le ordenó otorgar préstamos a los ejecutivos de FTX y comprar monedas digitales para respaldar sus valores, incluso cuando eso llevó a Alameda a perder más dinero. 

«Cosas por las que Sam está enloqueciendo»

Como parte de las pruebas que la fiscalía presentó contra SBF, se hallan algunos escritos de Ellison listados en clave. Bajo el título «Cosas por las que Sam está enloqueciendo» había una lista que enumeraba objetivos y preocupaciones del exdirectivo de FTX. 

En la lista se citaba el esfuerzo porque los reguladores tomaran medidas drásticas contra Binance, el principal competidor de FTX, a fin de captar una mayor cuota del mercado y conseguir más dinero. Esto se vio como una de las vías para compensar el déficit financiero en el que estaban cayendo las dos empresas. 

El hecho explica por qué, en su momento de mayor popularidad, Sam Bankman-Fried pedía la regulación del sector. El empresario estaba de acuerdo con eliminar las plataformas de finanzas descentralizadas (DeFi), pues sostenía que solo a través de servicios centralizados y regulados era posible evitar estafas y mantener seguros los fondos de los usuarios.  

Los escritos de Ellison sobre SBF mencionan también su preocupación por la mala prensa que podría derivarse del vínculo entre FTX y Alameda. 

Bankman-Fried trató de cultivar una imagen de sí mismo como un fundador inteligente y excéntrico, y quería que FTX se percibiera como un intercambio seguro, confiable y altamente regulado, además de atractivo por tener sede en el extranjero, dijo Ellison. Utilizó Twitter como una fuente “muy importante” para ayudar a mantener esa narrativa. 

Según la exdirectiva de Alameda, el enfoque de Bankman-Fried era «muy proactivo«, cultivando relaciones con los periodistas e invirtiendo en publicaciones como Semafor y The Block, un medio enfocado en criptomonedas.

Se habló incluso de la opción de cubrir el hueco que estaba causando el tomar dinero de los clientes, con un financiamiento del príncipe saudí Mohammed Bin Salman. Adicionalmente se pensó en pedir prestado más capital a BlockFi (una plataforma de préstamos en bitcoins que también quebró).

Aparentemente eran estas las metas reales que se perseguían cuando FTX financiaba campañas políticas, invertía en costosas promociones y hacía lobby ante los reguladores. Esto era lo que se veía en los medios, mientras el equipo alrededor de SBF usaba el dinero de las personas que confiaban en la plataforma para cubrir las deudas y financiar su lujoso estilo de vida. 

Se usaron más de USD 10.000 millones de los clientes de FTX

Con las confesiones realizadas hasta este 11 de octubre, la joven de 28 años admitió haber cometido el delito de fraude electrónico, aceptando que se usó el dinero que depositaban los usuarios en FTX para compensar las deudas de Alameda Research.  

«Él fue quien instaló los sistemas que permitieron tomar ese dinero para pagar nuestros préstamos», confesó Ellison. Acusó así a SBF de ser el artífice detrás de la pérdida de más de USD 10.000 millones pertenecientes a los usuarios del exchange. 

El dinero se tomó para poder reembolsar dinero a los prestamistas de Alameda. Ello debido a que había un enorme agujero en el balance de la empresa, cuya caída en picada se aceleró después de que el mercado de bitcoin comenzará a experimentar una prolongada fase bajista que se extendió a lo largo de 2022.   

Al principio, se pudo devolver parte del dinero, explicó Ellison, pero luego las cosas se fueron complicando. Aparentemente consultó repetidamente con Bankman-Fried sobre las finanzas, pues los análisis mostraban lo riesgoso de seguir tomando préstamos que podrían requerir reembolso en cualquier momento.  

Ellison aceptó que, a petición de Bankman-Fried, había engañado a los prestamistas, entregando balances “alternativos” para ocultar el verdadero estado financiero de la empresa.   

En octubre de 2022, el balance interno real mostraba pasivos por el orden de los USD 15.600 millones de dólares, mientras que las cifras que presentaron a prestamistas, entre ellos Genesis Global Trading (GGC), indicaban poco menos de USD 8.000 millones. «Eso hizo que pareciera que teníamos muchos activos para cubrir nuestros préstamos a plazo abierto». 

Más de 115 años de prisión, si lo declaran culpable

Con toda esta historia, las declaraciones de la exnovia de Bankman-Fried han sido las más reveladoras en el juicio. Es la primera vez que la joven comenta abiertamente sobre los hechos que llevaron al colapso de FTX. Lo hace cumpliendo un acuerdo mediante el cual podría ganar indulgencia, pues se enfrenta a más de 110 años de prisión. 

Los testimonios de Ellison continuarán este 12 de octubre por tercer día consecutivo. La joven se declaró culpable en diciembre pasado de los cargos de fraude electrónico, dos cargos de conspiración para cometer fraude electrónico, conspiración para cometer fraude de productos básicos, conspiración para cometer fraude de valores y conspiración para cometer lavado de dinero.  

Parte del acuerdo de culpabilidad que firmó, implica cooperar con el caso de la fiscalía en contra de Bankman-Fried. Lo mismo hicieron otros miembros del círculo cercano de SBF: Gary Wang y Nishad Singh, dos altos ejecutivos que también se declararon culpables y están cooperando con el gobierno.   

Por su parte, Bankman-Fried se declaró no culpable de siete cargos penales que se le imputan en el actual juicio, entre los cuales se incluye fraude electrónico, fraude de valores, conspiración para cometer fraude y lavado de dinero para ocultar las ganancias de fraude electrónico contra los clientes.   

En total, el Departamento de Justicia de EE. UU. presentó 13 cargos penales en su contra; otros 6 cargos serán tratados en un segundo juicio que se realizará en marzo de 2024. Si es declarado culpable SBF podría enfrentarse a lo que equivaldría a una cadena perpetua.  

SBF dice que nunca quiso estafar a clientes e inversionistas. No obstante, lo que está ocurriendo en el juicio que se está llevando a cabo en Nueva York no ha sido muy favorable para su defensa.  

El caso de FTX es un ejemplo claro de cómo las prácticas deshonestas y de alto riesgo de algunos malos actores del ecosistema afectan la industria de criptomonedas, provocando pérdidas multimillonarias y perjudicando la vida de miles de personas.