-
Los habitantes de la región usan bitcoin y stablecoins por inflación e inestabilidad.
-
Algunos priorizan agendas tradicionales, relegando la innovación financiera a un segundo plano.
El llamado es urgente, y así lo sugirió el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien entiende que quienes ignoren a bitcoin (BTC) se quedarán atrás en la nueva economía global. “Lo que muchos no entienden es que Bitcoin no solo es una herramienta económica, sino también una forma de soberanía financiera”, dijo en enero, en los días previos a la toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
Bukele cree que con Trump en la presidencia de Estados Unidos los beneficios con bitcoin tomarán impulso. Según sus cálculos, con una reserva de bitcoin por parte de Estados Unidos, es posible que el precio de la moneda digital se eleve a tal punto que se vuelva inalcanzable para algunos.
Según sus declaraciones, Nayib Bukele parece estar preparado para llevar la adopción de bitcoin en El Salvador al siguiente nivel, a pesar de la incertidumbre que rodea los recientes cambios a la ley que regula a esta moneda digital en el país.
Más allá de las expectativas sobre lo que ocurrirá en esta nación pionera, surge una pregunta ineludible: ¿están los presidentes de América Latina listos para aprovechar el potencial transformador de bitcoin, o continuarán dejando pasar la oportunidad de liderar una revolución financiera? La respuesta no solo delineará el futuro económico de la región, sino que podría llegar demasiado tarde para quienes duden en actuar, mientras países como El Salvador ya marcan el rumbo.
Así que, teniendo claro que la modernización financiera no puede esperar, es hora de que los líderes dejen atrás los prejuicios y abracen la herramienta que podría devolverle la soberanía a millones. El reloj de la era digital ya está en marcha.
¿Abordar el tren de bitcoin o dejarlo pasar?
Lo cierto es que, como se ha visto en los últimos días, varios presidentes de Latinoamérica parecen atrapados en un laberinto de desconocimiento y desinterés sobre bitcoin. Y, quizás por ese mismo factor, es que generan escándalos relacionados con proyectos de criptomonedas.
Mientras tanto, los ciudadanos adoptan activos digitales como bitcoin y stablecoins —impulsados por la inflación galopante, la inestabilidad económica y la búsqueda de alternativas al sistema financiero tradicional. Sus preferencias resaltan el hecho de que los líderes de la región se tambalean entre el mutismo, regulaciones fallidas y controversias que erosionan su credibilidad. Bitcoin, lejos de ser una simple curiosidad tecnológica, se ha convertido en una asignatura pendiente que los mandatarios de América Latina no logran aprobar.
Milei, en Argentina, luce perdido
La mayoría de los presidentes de Latinoamérica no saben sobre Bitcoin; muestra de ello fue lo que dijo el gobernante de Argentina, Javier Milei, mientras, se encuentra atrapado en un escándalo tras promocionar al proyecto LIBRA. Esta misma semana admitió que no sabe nada sobre activos digitales. Esto, pese a que en el pasado parecía entenderlo muy bien.
Aunque Milei no ha rechazado abiertamente a Bitcoin, su vinculación con iniciativas cuestionables revela una falta de claridad sobre cómo integrar esta tecnología en su ambiciosa agenda económica. La promesa de libertad financiera que tanto defiende parece desdibujarse en medio de la controversia.
Bitcoin también es una tarea para Claudia Sheinbaum, la presidenta de México, quien no ha expresado nada sobre la invención de Satoshi Nakamoto, pero sí dio señales sobre cómo entiende al ecosistema de las criptomonedas. Por su mutismo sobre el tema, queda claro que BTC no asoma en su agenda económica.
Lecciones aprendidas en El Salvador con bitcoin
- La adopción de Bitcoin puede estimular la innovación y la inversión, especialmente en países con alta inflación y dependencia de remesas.
- La regulación inteligente es crucial para proteger a los consumidores, sin desestimular a la industria.
- La educación masiva, como «Mi Primer Bitcoin,» es esencial para la adopción sostenible, asegurando que los ciudadanos usen BTC de manera informada y segura.
¿Por qué los presidentes no adoptan bitcoin?
- Temores económicos: la volatilidad de bitcoin, como se vio en El Salvador con pérdidas del 60% en fondos del Tesoro en 2022, genera preocupación sobre la estabilidad económica.
- Presión de intereses tradicionales: los bancos y las instituciones financieras tradicionales ven a Bitcoin como una amenaza, ejerciendo influencia para mantener el status quo.
- Falta de comprensión: muchos líderes no entienden los beneficios a largo plazo, como la inclusión financiera para millones de personas sin acceso a bancos, especialmente en países con alta inflación como Venezuela y Argentina.
- Preocupaciones regulatorias: el riesgo de lavado de dinero y otras actividades ilegales sin regulación adecuada es un obstáculo, como se ha visto en debates en Panamá y otros países.
Un mosaico de los desencuentros con bitcoin entre líderes latinos
Entretanto, México superó a Argentina en la adopción de bitcoin y otros activos digitales, según el último informe de la firma Chainalysis. La nación azteca continúa ascendiendo en el ranking global de adopción de criptomonedas, consolidándose como el tercer país de América Latina con mayor uso de activos digitales, relegando a Argentina al cuarto lugar. Este auge, impulsado por una combinación de remesas, inflación persistente y una creciente desconfianza en el peso, evidencia una desconexión clara: los políticos mexicanos parecen desfasados de las necesidades y realidades de su población, que encuentra en las criptomonedas una alternativa tangible frente a la incertidumbre económica.
En Colombia, el presidente Petro está envuelto en escándalos
Durante su campaña presidencial, Gustavo Petro destacaba a bitcoin como una herramienta de innovación económica, pero tras asumir la presidencia en agosto de 2022, la moneda digital desapareció de su discurso y agenda. Al mismo tiempo, en ese país cafetalero, la adopción de activos digitales crece de manera silenciosa, impulsada por ciudadanos que buscan protegerse de la inflación y la devaluación del peso.
Este auge de adopción refleja una tendencia regional ya que Latinoamérica representa el 9% de las transacciones globales de criptomonedas, con países como Brasil, México, Venezuela y Argentina entre los 20 con mayor adopción, según Chainalysis. Sin embargo, el gobierno colombiano no ha acompañado este movimiento con políticas claras, dejando a la industria en un limbo normativo.
El vacío regulatorio ha generado tanto oportunidades como riesgos, evidenciados en el aumento de estafas con criptomonedas, que en 2024 dejaron pérdidas superiores a los 100 millones de dólares en la región, afectando a cientos de colombianos. En este contexto, el presidente Petro enfrenta un escándalo por supuestos vínculos con Daily Corp, un proyecto de criptomoneda acusado de ser un esquema Ponzi que colapsó tras prometer ganancias exorbitantes, dejando a miles de inversionistas en la ruina
Aunque no hay evidencia directa de su involucramiento, el caso subraya la urgencia de un marco legal, demanda compartida por la Superintendencia Financiera y el Ministerio de Hacienda, mientras el proyecto de ley para regular las criptomonedas sigue sin avanzar en el país.
En Venezuela fracasó la CBDC Petro
En Venezuela, con una de las regulaciones más avanzadas del mundo, en los últimos años se ha demostrado que, quienes están en el poder, no entienden el potencial de Bitcoin, ya que se inclinaron por el desarrollo de una CBDC llamada Petro, justo en un momento en el que la adopción de bitcoin estaba en pleno auge en el país.
El Petro, la criptomoneda estatal lanzada con bombos y platillos en 2018, desapareció del panorama venezolano, dejando tras de sí un experimento fallido en medio de la crisis económica. En contraste, bitcoin sigue emergiendo como una alternativa adoptada por muchos venezolanos para sortear las dificultades económicas.
En Honduras hay un rechazo oficial a Bitcoin
El gobierno de Honduras, por su parte, ha optado por un rechazo categórico hacia las criptomonedas. La Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS) prohibió en 2024 a las instituciones financieras operar con bitcoin, mientras que el gobierno expropió terrenos en Roatán destinados al desarrollo de su Bitcoin City, un ambicioso proyecto que tiene a bitcoin como moneda de curso legal y unidad de cuenta.
Estas medidas reflejan un bloqueo oficial que contrasta con el creciente interés por bitcoin que muestran los habitantes de la isla de Roatán. Este patrón —innovación impulsada desde abajo y resistencia desde las élites— se repite a lo largo de América Latina, con la notable excepción de El Salvador, donde la apuesta por bitcoin, iniciada en 2021, comienza a rendir frutos tangibles en inversión extranjera y adopción masiva.
Ignorar a bitcoin puede ser fatal
En definitiva, está claro que el panorama regional es un mosaico de desencuentros entre gobiernos y ciudadanos. Los líderes carecen de una comprensión técnica y estratégica de Bitcoin, lo que los lleva a subestimarlo o a temerle.
Algunos, como Milei o Petro, han coqueteado con las criptomonedas por conveniencia, solo para quedar atrapados en escándalos. Otros, como Sheinbaum o Lula da Silva en Brasil, prefieren el statu quo o proyectos centralizados que no amenacen su control. El resultado es un rezago regional en un fenómeno global imparable, una brecha creciente entre las calles y los palacios de gobierno. Todo esto refleja una confianza pública minada por regulaciones ineficaces y controversias.
Bitcoin no es una solución mágica. Sus riesgos son innegables. Pero ignorarlo o demonizarlo no es la respuesta. Por lo tanto, los presidentes de Latinoamérica tienen una tarea urgente: entender esta tecnología, regularla con inteligencia y aprovechar su potencial para empoderar a sus ciudadanos y fortalecer sus economías. Eso es algo sobre lo que ya está avanzando Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
En un continente marcado por la desigualdad y la desconfianza en las instituciones, Bitcoin podría ser un puente hacia el cambio. Sin embargo, mientras los mandatarios sigan suspendiendo esta materia, la región seguirá perdiendo el tren de una revolución digital que no espera a nadie.
Descargo de responsabilidad: Los puntos de vista y opiniones expresadas en este artículo pertenecen a su autor y no necesariamente reflejan aquellas de CriptoNoticias. La opinión del autor es a título informativo y en ninguna circunstancia constituye una recomendación de inversión ni asesoría financiera.