Si bien el cantón de Zug se ha erigido como uno de los criptovalles más importantes del mundo, los bancos tradicionales de Suiza no han querido prestar sus servicios a las startups de criptomonedas del país. Sin embargo, el director financiero del cantón, Heinz Tännler, ha establecido que esta situación podría cambiar en los próximos meses.
En conversaciones con el diario Financial Times, Tännler afirmó que se encuentran en conversaciones con políticos y reguladores suizos con miras a remover los actuales obstáculos en los meses venideros. De esta manera, las compañías vinculadas a criptomonedas podrán beneficiarse de los servicios provistos por los bancos tal como cualquier otra empresa.
Esperamos clarificar las relaciones para fines de año a más tardar. El tiempo presiona –otras jurisdicciones como Malta y Singapur están muy activas y haciendo un gran esfuerzo por atraer a estas compañías. La falta de acceso a servicios bancarios es una significativa desventaja comparativa (…) Hemos presionados a ciertas instituciones nacionales para resolver este problema de manera rápida y efectiva, pero por ahora todo parece ir bien.
Heinz Tännler
Jefe de la Dirección Financiera de Zug
El criptovalle de Zug aloja al menos 200 compañías enfocadas en blockchain, incluidas Shapeshift, Xapo y la Fundación Ethereum. Empresas de la talla de Bitmain y Bitfinex se han planteado expandir y hasta mudar sus operaciones a la localidad debido al apoyo gubernamental hacia las startups. Hasta el mayor banco ruso, el Sberbank, se ha propuesto comerciar criptomonedas en Suiza para eludir las restricciones regulatoria de su país.
A pesar de este aparente clima favorable, los bancos, probablemente en un esfuerzo por mantener su hegemonía en el negocio financiero, más aún en uno de los países que ha sido bastión de actividades bancarias de todo tipo, se han negado a prestar servicio a las startups de criptomonedas, argumentando problemas en las reglas para el manejo de clientes y supuesto lavado de dinero. Por esta razón, muchas de estas compañías establecidas en Suiza han acudido a bancos en Liechtenstein para sus operaciones. Esta es de las desventajas observadas por Tännler y también por Alain Kunz, CEO de la startup suiza de servicios de blockchain, Coinlab Capital:
Puedes hacer mucho con criptomonedas, pero no puedes pagar rentas ni salarios (…) Por un lado, el gobierno declara a Suiza una criptonación y quiere convertirse en un centro de negocios para la tecnología blockchain. Por el otro lado, los bancos hacen la vida difícil para blockchain y para que las startups de criptomonedas obtengan relaciones bancarias –esencialmente matando el negocio emergente.
Heinz Tännler
Jefe de la Dirección Financiera de Zug
Suiza no es el único país en que los bancos han decidido no ofrecer sus servicios a startups vinculadas a criptomonedas. Este mismo año, tanto en Chile como en Brasil distintos bancos decidieron congelar las cuentas bancarias de las casas de cambio de los respectivos países. En ambos casos, el fallo del sistema judicial fue ordenar la reapertura de las cuentas por parte de los bancos.
Con todo, en la mayoría de los países, los obstáculos para el florecimiento del ecosistema de las criptomonedas no solo han sido puestos por los bancos sino por los mismos gobiernos. No es el caso de Suiza, donde hasta las regulaciones para las ICO han buscado ser favorables. Y si bien Tännler apoya el desarrollo del ecosistema de las criptomonedas, reconoce que este debe darse apegado a las leyes:
Claro, las compañías de blockchain deben estar adheridas a las reglas contra lavado de dinero y demás normas. Puedo entender que los bancos tengan cuidado con respecto a (las reglas de) Conoce a tu Cliente y anti-lavado de dinero. Pero los expertos reconocen que los peligros de lavado de dinero son más bajos que en otros sectores de la industria financiera.
Heinz Tännler
Jefe de la Dirección Financiera de Zug
Tännler afirma que las compañías del ecosistema de blockchain deben recibir servicios bancarios como cualquier otra compañía. Y espera que con el apoyo de las instituciones financieras y la debida presión política, esta situación cambie en los próximos meses para que las compañías dejen de acudir a otros países en busca de estos servicios.