Hechos clave:
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El crecimiento del turismo y las inversiones han sido impulsadas por Bitcoin.
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Un fracaso es que la población y los comercios todavía prefieren el dólar como pago.
Hace tan solo un año la Asamblea Legislativa de El Salvador fue el centro de todas las miradas de los bitcoiners del mundo, tras la aprobación de la llamada Ley Bitcoin, impulsada por el presidente de esa nación centroamericana, Nayib Bukele.
Luego de una extensa jornada de debates, cerca de la medianoche del 8 de junio del año pasado, El Salvador se convirtió en el primer país del mundo que dio curso legal a la primera criptomoneda.
La legislación aprobada establece, entre otras cosas, que bitcoin podrá ser utilizado «en cualquier transacción y a cualquier título que las personas naturales o jurídicas, públicas o privadas, requieran realizar», tal como lo informó CriptoNoticias en ese momento.
Ahora, después de un año, el gobierno de Bukele sigue enfocado en darle mayor protagonismo a bitcoin en el día a día de los salvadoreños. Una de sus apuestas más fuertes ha sido la de adquirir bitcoins, siendo la más reciente la del pasado mayo.
En esta última oportunidad se compraron 500 bitcoins a una tasa promedio de USD 30.744, lo que equivale a una inversión de poco más de USD 15 millones. El Salvador ya tendría más de 2.301 bitcoins acumulados.
Sin embargo, la única manera de saber la cantidad de BTC que compraron es porque Bukele lo notifica a través de Twitter. Este es uno de los cuestionamientos que hace el desarrollador y bitcoiner salvadoreño, Nelson «Ishikawa» Garay, al ser consultado por CriptoNoticias.
En palabras de Garay, no hay acceso a datos públicos sobre las compras de bitcoin hechas por el gobierno, no hay manera de confirmarlo oficialmente. Tampoco es posible saber si han vendido los bitcoins.
Las sombras de la adopción de bitcoin
Con el proceso de aprobación de la Ley Bitcoin, en junio del año pasado el gobierno salvadoreño comenzó a desplegar otras políticas que giran en torno a bitcoin, una de ellas fue el lanzamiento de un monedero estatal llamado Chivo Wallet.
Esta herramienta no genera pago de tarifas o comisiones por las transacciones que los usuarios realicen. Incluye el envío o recepción de remesas, hacer o recibir pagos, conversión de bitcoin a dólares o viceversa. Tampoco se les cobra comisiones a los comercios. No obstante, CriptoNoticias después de una evaluación llegó a la conclusión que en algunos casos se presentan problemas en su uso, dando lugar a que se generen incentivos para no usar este monedero.
En este aspecto, Garay comentó que Chivo Wallet tuvo entre 3,4 millones y 4 millones de descargas y esto fue motivado por el bono de USD 30 en bitcoin que otorgó el gobierno.
Aunque para el desarrollador «esas cifras no concuerdan con la realidad, se esperaría que muchas personas lo utilicen para adquirir bienes y servicios, pero no es así. Muy pocos comercios han decidido aceptar bitcoin».
La experiencia de los comerciantes salvadoreños con la herramienta llamada Chivo Comercio, que fue diseñada para sector comercial, ha sido «muy mala» a juicio de Garay, debido a que «presenta problemas en su funcionamiento y eso ha hecho que los negocios eviten recibir bitcoin».
Al respecto, una encuesta de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal), confirma la perspectiva de Garay. Para el 91,7% de los empresarios de diversos sectores de la economía, ha sido indiferente la entrada en vigor de bitcoin como moneda de curso legal. Mientras que el 4,7% de los consultados aseguró que bitcoin le ha generado complicaciones a su negocio o ha provocado que tengan menos ventas.
En esa misma tónica, una encuesta de la Universidad Francisco Gavidia (UFG), realizada el pasado mayo, arrojó que, de diez salvadoreños, seis están en contra de la decisión del gobierno de Bukele de usar bitcoin como una segunda moneda nacional.
Un 62,3% dijo no estar de acuerdo con el uso de bitcoin, mientras que el 23,7% de los encuestados sí apoyan la decisión y el 11,2% aún duda de si fue una decisión correcta o no.
En base a estos datos, Garay cree que uno de los mayores problemas ha sido la educación sobre bitcoin. Señalando que no hay planes educativos diseñados por el Gobierno para instruir a la población sobre bitcoin.
En ese sentido, quienes han llevado la iniciativa educativa son ONGs, entusiastas de bitcoin que se dedican a la educación y también empresas privadas, las cuales, aunque están teniendo un impacto mínimo hacen que bitcoin tenga un poco repercusión en la población, dijo Garay.
El desarrollador citó entre los principales planes de empresas privadas al programa «Escuela de Bitcoin», patrocinada por el exchange Paxful; y a la ONG «Mi Primer Bitcoin», asegurando que están teniendo un «impacto importante en todo el país». Habló además de la iniciativa en la que está involucrado el propio Garay, con educación de alto nivel, llamada «Torogoz Dev», donde enseñan sobre el desarrollo, programación de bitcoin y Lightning.
FMI con la mirada sobre El Salvador
Entre las repercusiones de la Ley Bitcoin vale citar que organismos financieros como el Fondo Monetario Internacional (FMI) han asegurado que la llegada de bitcoin a El Salvador «implica graves riesgos para la integridad financiera y del mercado, la estabilidad financiera y la protección del consumidor».
Las preocupaciones del organismo multilateral se enfocan en el aumento del déficit fiscal y de la deuda pública, hecho reportado por CriptoNoticias.
Incluso, el pasado febrero la calificadora de riesgos estadounidense, Fitch Ratings, bajó la calificación crediticia a largo plazo, conocida como Issuer Default Rating (IDR) de El Salvador. Esto implica que existían altas probabilidades de no estar en capacidad de pagar sus compromisos financieros.
Una Ciudad Bitcoin y unos bonos que no terminan de ser emitidos
La Ley Bitcoin trajo consigo más planes a El Salvador. El mandatario salvadoreño Nayib Bukele anunció el pasado noviembre la construcción de la Ciudad Bitcoin. Esta sería la primera urbe financiera del mundo que basará su economía en la primera criptomoneda.
Para financiar la realización de la ciudad, el Gobierno escogió la opción de emitir un bono estatal de USD 1.000 millones. De ahí se destinaría un 50% a las obras de infraestructura energética y minería de bitcoin en la Ciudad Bitcoin, mientras que el otro 50% se utilizará para la compra de más bitcoin.
Pero el lanzamiento del bono se ha suspendido en reiteradas oportunidades desde marzo de este año, mes en el que el gobierno tenía planificada su activación. En un principio se retrasó por el conflicto entre Rusia y Ucrania. Más recientemente, el ministro de hacienda, Alejandro Zelaya, indicó que no lo habían emitido porque no existían las condiciones favorables en el mercado para su lanzamiento y esperan que el activo digital suba de precio.
Hasta ahora se desconoce cuándo será la fecha en la que emitan los bonos, al parecer habrá que esperar a inicie un rally alcista de bitcoin. El Gobierno tampoco ha dado detalles sobre el marco regulatorio previsto para la emisión de los bonos.
Bitcoin ha beneficiado al turismo y a las inversiones
Uno de los aspectos más positivos que ha dejado la Ley Bitcoin está relacionado con el turismo. El Ministerio de Turismo del país centroamericano ha hecho anuncios indicando que se superaron las expectativas en torno al impacto económico y de visitantes que atraería Bitcoin para el sector turismo en El Salvador.
De acuerdo con la información, se esperaba la llegada de 1,1 millones de turistas, pero la cifra alcanzó los 1,4 millones entre noviembre y diciembre de 2021. De hecho, más de 40 inversionistas de bitcoin han ido a El Salvador con intenciones de invertir en el turismo en ese país, en noviembre del año pasado.
Para Garay esto está relacionado con que El Salvador ha logrado lanzar su marca país de manera exitosa. A su juicio, la nación centroamericana nunca hubiera alcanzado los niveles de publicidad y popularidad que tiene en este momento de no ser por bitcoin.
«Bitcoin nos dio la oportunidad de estar en boca todo el mundo, para ello se ha combinado la figura de Bukele y bitcoin. Mucha gente quiere y está viniendo al país, especialmente a la playa El Zonte donde nació Bitcoin Beach», destacó de manera positiva Garay.
El Salvador está atrayendo a inversionistas extranjeros, especialmente del área de las criptomonedas. Exchanges, proveedores de monederos digitales, procesadores de pago y custodios de bitcoin han arribado al país centroamericano.
Por ejemplo, el fondo de inversiones El Zonte Capital (EZCAP), creado por los periodistas Max Keiser y Stacy Herbert y enfocado en la hiperbitcoinización de El Salvador, recibió una contribución considerable de parte del exchange Bitfinex.
En ese aspecto, para Garay si bien han llegado inversiones extranjeras del sector bitcoin, no ha sido la cantidad que esperaba ni el gobierno ni la población. Aunque el Gobierno de El Salvador también lanzó un programa, basado en bitcoin, con el objetivo de otorgar financiamiento a las pequeñas y medianas empresas del país.
Las micro y pequeñas empresas con fondos en bitcoin, pueden acceder a préstamos para cubrir sus necesidades de liquidez o impulsar nuevos proyectos que requieran inversión.
Por otro lado, el gobierno salvadoreño ha logrado mantener a raya la inflación. El pasado mayo se dio a conocer que la inflación se desaceleró entre los meses de marzo y abril, pasó de 6,7% a 6,5%. Situando a El Salvador como la tercera economía con menor índice de inflación interanual de Centroamérica para el mes de abril.
Este resultado sirvió como una clara respuesta de Bukele a los organismos financieros que vaticinaban el fracaso de su política monetaria enfocada en bitcoin, como se menciona anteriormente en este informe.
Gracias a las ganancias que le dejó la subida del precio de bitcoin al fideicomiso FIDEBITCOIN en octubre de 2021, se construyó un hospital veterinario público, llamado Chivo Pets.
La instalación médica para mascotas, tiene 12 consultorios y dan aproximadamente 384 consultas diarias. El centro médico está dividido por estaciones, la hospitalización de gatos o perros y tiene cuatro quirófanos.
Con todos los datos e informaciones que han surgido a lo largo de un año, se podría considerar que es muy pronto para medir por completo el impacto de bitcoin en El Salvador. Garay cree que el futuro será positivo para El Salvador, aunque prefiere ser conservador.