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El presidente parece estar receptivo a la idea de expandir una reserva más allá de BTC.
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Esto podría deslegitimar los esfuerzos para promover a bitcoin como activo de reserva.
Un reporte del medio estadounidense NY Post de este jueves 16 de enero señala que el gobierno entrante de Donald Trump estaría considerando priorizar a otras criptomonedas antes que bitcoin (BTC) para crear su reserva estratégica.
Fuentes dijeron al medio que se está discutiendo la idea de una reserva estratégica que priorice criptomonedas creadas en Estados Unidos, como lo son solana (SOL), USD Coin (USDC) y ripple (XRP).
En las últimas semanas, Trump se ha reunido con los fundadores de estas monedas. Según las fuentes, es receptivo a la idea de expandir la reserva más allá de BTC. Esto plantea preocupaciones de que podría deslegitimar los esfuerzos para promover a bitcoin, que es el activo que inicialmente se quería priorizar en la reserva estratégica.
La reserva estratégica de bitcoin es una de las grandes promesas de Trump para el ecosistema, anunciada por primera vez en julio de 2024. La reserva contaría inicialmente con 200.000 BTC, la mayor parte incautado, y estaría bajo control y administración del secretario del Tesoro. Sin embargo, hace un par de días un fiscal solicitó a la justicia de EE. UU. que devolviera a las víctimas el 80% de los BTC incautados al hacker de Bitfinex. Esto significa que es posible que EE. UU. no cuente con todo ese bitcoin para sus reservas si se materializa la orden.
La creación de esta reserva puede darse por dos vías: una, mediante el proceso legislativo, y otra, por vía exprés, mediante una Orden Ejecutiva. De esta última vía ya existe un borrador que se hizo llegar al equipo de Trump y que establece la creación exclusiva de una reserva de bitcoin, como informó CriptoNoticias.
Buscando un puesto
La consideración de Trump de expandir la reserva y priorizar altcoins en lugar de bitcoin se presenta en un momento en que los fundadores de proyectos y ejecutivos de la industria de Bitcoin se “pelean” por un puesto en el consejo asesor del gobierno de Trump.
Trump ha recibido en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, a figuras destacadas del sector de las criptomonedas. Entre ellas están Kris Marszalek, CEO de Crypto.com, Brad Garlinghouse, CEO de Ripple, y Jeremy Allaire, CEO de Circle, empresa que donó 1 millón de USDC al comité inaugural de Trump.
Estas reuniones y el interés mostrado por Trump en otros activos digitales aparte de bitcoin sugieren un cambio potencial en la política de criptomonedas del próximo gobierno.
Esto podría influir en el mercado, la legislación y la percepción pública de las criptomonedas en Estados Unidos. La diversificación de la reserva estratégica hacia otras criptomonedas estadounidenses podría ser vista como un apoyo a la innovación local en el sector, pero al mismo tiempo, podría enfrentar resistencia de quienes creen en la supremacía de bitcoin como el principal activo digital del mercado.
La decisión sobre la composición de la reserva estratégica podría tener ramificaciones a largo plazo para el mercado de criptomonedas, no solo en Estados Unidos sino globalmente, ya que Estados Unidos es un actor clave en la regulación y adopción de estas tecnologías.