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Acusan a la empresa por recopilar datos de usuarios menores de 13 años y venderlos a terceros.
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Una demanda similar obligó a que la empresa matriz de TikTok pagara USD 5,7 millones en 2019.
TikTok y su empresa matriz ByteDance enfrentan una demanda de un antiguo regulador británico, por supuestamente recopilar ilegalmente millones de datos privados de sus jóvenes usuarios. Al extraer la información y compartirla con terceros desconocidos con fines de lucro, la aplicación de video, viola el Reglamento general de protección de datos de la Unión Europea (RGPD), según un sitio web creado en apoyo al reclamo legal.
La demanda fue lanzada por Anne Longfield, ex Comisionada de Niños para Inglaterra, quien se enfoca en la falta de transparencia que TikTok ofrece sobre la cantidad de datos que recopila y el destino de estos datos. Si tiene éxito, el caso podría costar miles de millones de dólares a la empresa.
Según la demanda, la plataforma recopila datos como números de teléfono, ubicación de dispositivos y videos cargados, así como datos biométricos o de reconocimiento facial, entre otros. Se alega que la empresa utiliza esta información para generar ingresos publicitarios, infringiendo varios artículos del RGPD.
La aplicación TikTok actualmente tiene más de 800 millones de usuarios mensuales activos y fue descargada en más de dos mil millones de ocasiones en 2020. Su audiencia se caracteriza por ser una de las más jóvenes que tiene presencia en todas las plataformas de redes sociales existentes. «Más de 3,5 millones de niños solo en el Reino Unido pueden haber tenido su información privada recopilada ilegalmente mientras usaban TikTok, y millones más en el Espacio Económico Europeo», señala el sitio web que sigue el progreso legal.
El reclamo sigue los pasos de una demanda similar que TikTok enfrentó ante la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos en 2019. En ese momento, la empresa fue multada por casi 6 millones de dólares por recopilar datos de niños y jóvenes, sin consentimiento.
La privacidad en TikTok y redes sociales como derecho, no como privilegio
Las redes sociales han alterado significativamente la forma en que se recopila, almacena y comunica la información. WhatsApp, por ejemplo, recientemente planteó interrogantes sobre el uso y la protección de la información personal y reveló la necesidad de concebir el derecho a la privacidad como sinónimo de protección de datos.
Como informó CriptoNoticias a principios de año, WhatsApp exigía que los usuarios aceptaran compartir sus datos privados al integrarse con los productos de la empresa Facebook. Aunque los cambios no incluían el territorio de la Unión Europea y el Reino Unido, millones de usuarios decidieron proteger su información privada y migrar hacia otras plataformas que ofrecían mayor privacidad.
Las redes sociales, el control político, las aplicaciones de rastreo del covid-19 han mantenido a la privacidad bajo amenaza, tal como sucedió durante todo el 2020. Durante este tiempo, la famosa aplicación Zoom también generó preocupaciones para un grupo cada vez más grande de ciudadanos del mundo conscientes de los peligros a los que están expuestos los datos personales en el ciberespacio. Incluso, una investigación alertó que TikTok estaría espiando a usuarios del sistema operativo iOS a través del acceso al portapapeles, una acción que podría mantenerse hasta la fecha.