Un documento emitido por investigadores australianos sugiere que cerca de la mitad de todas las transacciones de bitcoin están relacionadas de alguna manera con actividades ilegales.
Titulado «Sexo, drogas y bitcoin: ¿cuánta actividad ilegal es financiada a través de criptomonedas?», en él los investigadores Sean Foley, Jonathan R. Karlsen y Tālis J. Putniņšu, de la Universidad de Sídney y la Universidad Tecnológica de Sídney, utilizaron técnicas de análisis forense-financiero sobre bitcoin para descubrir con qué objetivos se utiliza la criptomoneda. Según explican, 25% de los usuarios y el 44% de las transacciones totales están asociadas con actividades penadas por la ley, como comprar armas y estupefacientes, mientras que el resto de los usuarios comercializan la criptomoneda o la mantienen sin movilizar para proteger así sus ahorros.
Descubrimos que muchas cuentas de usuarios y muchas transacciones bitcoin están relacionadas con actividad ilegal. Por ejemplo, cerca de un cuarto de todos los usuarios (25%) y cerca de la mitad de las transacciones de bitcoin (44%) están asociados con actividad ilegal. Además, aproximadamente 20% de el valor total en dólares de las transacciones y cerca de la mitad de ahorros en bitcoin se han asociado con actividad ilegal a lo largo del tiempo.
Investigadores
A su vez, destacan que Bitcoin resultó ser un complemento ideal para comprar y vender artículos ilegales en la Internet profunda, pues al considerársele ‘anónimo’, la criptomoneda habría hecho por la Darknet lo que PayPal hizo por eBay: ser un método de pago confiable y conveniente. Junto con el navegador TOR, desarrollado por la Marina estadounidense, se puede acceder a la web profunda y realizar actividades ilegales.
Sin embargo, uno de los investigadores se refirió en buenos términos a la tecnología blockchain en cuanto al rol que esta puede cumplir en el desarrollo de múltiples industrias. Tālis J. Putniņš, profesor de la Universidad Tecnológica de Sídney, aseguró:
Las actividades ilegales ponen en riesgo la adopción de esta tecnología y limitan su potencial de beneficiar a la sociedad […] El objetivo de nuestra investigación es contribuir a que los reguladores comprendan el reto al que se enfrentan para supervisar y regular bitcoin a medida que se populariza su adopción, como por ejemplo con la creación de futuros financieros basados en la criptomoneda […] Los usuarios involucrados en actividades ilegales son muy activos en la compra, venta y comercio de bitcoin, mientras que los usuarios que se mantienen en la legalidad tienden a comprar y ahorrar la criptomoneda.
Investigadores
Para comenzar su estudio, los investigadores decidieron comenzar por rastrear el comportamiento criptofinanciero de aquellos sospechosos que han sido capturados por el FBI y otras fuerzas de la ley.
Un comentario añadido por Putniņš confirma que Bitcoin es perfectamente rastreable a pesar de su alegado anonimato, pues los investigadores analizaron tanto los sitios de intercambio como las direcciones blockchain de los sospechosos, además de rastrear algunas compras y ventas en la web profunda, para así lograr elaborar un perfil de los usuarios involucrados en actividades ilegales y lograr identificarlos claramente.
El investigador asegura que estas técnicas podrán ser utilizadas por las autoridades para realizar investigaciones sobre delitos en el ciberespacio, incluyendo el análisis de otras blockchain también.
Un caso afamado de rastreo de transacciones bitcoin llevó a descubrir el paradero de casi la totalidad de los fondos robados a la casa de cambio MtGox. Durante el año pasado, empresas de informática forense determinaron que estos fondos se hallaban en la casa de cambio BTC-e, la cual fue clausurada momentáneamente por las autoridades.
Pese a todo, existen otros estudios que aseguran que bitcoin es más bien poco utilizado en este tipo de actividades. En cualquier caso, es importante recordar que las criptomonedas, tanto como el dinero fíat, son sólo una herramienta, que puede ser utilizada por cualquier persona con cualquier fin, sea este positivo o negativo. Depende de cada legislación regular sus usos para minimizar las actividades delictivas que se llevan a cabo con cualquier moneda.