-
Según análisis de Hashrate Index, Texas es el principal destino de los mineros que salen de China.
-
Los mineros también contemplan 3 países de Suramérica: Argentina, Paraguay y Venezuela.
Una investigación de la firma Hashrate Index, dedicada al análisis de la red y la industria minera de Bitcoin, estima que entre el 30 y 40 por ciento del poder de procesamiento o hash rate de la blockchain se trasladará desde China a Estados Unidos en lo que resta de este año.
El informe de Hashrate Index publicado a fines de junio analiza las consecuencias de la represión que el gobierno chino ha desatado contra los mineros de Bitcoin en los últimos meses. En ese sentido, recuerda que un millón de computadoras mineras están ahora varadas en China, mientras los propietarios evalúan todos los problemas logísticos que implica el traslado de sus equipos.
En medio de las dudas, muchos mineros están viendo hacia América del Norte. De ahí que los analistas anticipen que más de 40 EH de la red sería administrados por grupos de minería con sede en EE. UU. para fines de 2021.Se trata de un reajuste significativo, tomando en cuenta que China concentra 65% del hash rate y la tasa de hash de Estados Unidos apenas supera el 7%.
Pero el gran país del norte no es el único que recibirá la migración china, porque los mineros de Bitcoin están evaluando otras zonas geográficas. Las siguientes áreas están en la lista en consideración: Canadá en Norteamérica; Kazajistán, Kirguistán, Rusia, Uzbekistán y Mongolia, en Asia; Ucrania e Islandia en Europa; y Argentina, Paraguay y Venezuela, en América del Sur.
En este contexto, la toma decisiones sobre el destino a elegir no está resultando nada fácil, y se sabe que el asentamiento en un nuevo espacio geográfico será algo complicado.
La competencia por los recursos y el espacio de almacenamiento, así como la falta de confianza entre los nuevos y los antiguos participantes del mercado, crea barreras para la coordinación y las operaciones comerciales.
Informe Hashrate Index.
Sobre este tema, los analistas de Hashrate Index coinciden con los investigadores de Galaxy Digital al calificar a este proceso migratorio como un cuello de botella para la red de Bitcoin. Toman en cuenta las repercusiones, ya notorias en la cadena de bloques, que experimenta una importante caída en su poder de procesamiento o hash rate desde que comenzó la represión en China.
En resumen, el informe muestra el dilema y señala cuáles son las principales preguntas que se hacen los mineros, entre las cuales se hallan ¿a dónde ir? y ¿cómo trasladar las máquinas?
Texas luce como uno de los principales destinos
De acuerdo al informe, a pesar de que aún es difícil predecir dónde se asentarán los mineros, Estados Unidos parece ser el principal destino elegido. Aunque se espera que los operadores se diseminen por toda la geografía, consideran que este país podría dotarles de un estado de derecho fuerte, con mejores protecciones legales en comparación con China.
Al respecto, citan la más reciente cumbre celebrada por Bitmain, empresa líder en la fabricación de equipos para minería de Bitcoin. «La discusión principal giró en torno a dónde los mineros desplazados podrían encontrar electricidad barata y espacio ASIC (…) Buscan en Estados Unidos una combinación de energía hidroeléctrica, gas natural, carbón, eólica y solar», dice el estudio.
Al parecer, el único estado que ofrece condiciones semejantes a las que estos mineros tenían en provincias como Sichuan y Xinjiang es Texas, al suroeste de Estados Unidos.
La energía renovable representó aproximadamente el 30% de la combinación energética de Texas en 2020, y se espera que esta cifra aumente a aproximadamente el 40% para 2023. Texas también alberga uno de los entornos regulatorios más favorables de los Estados Unidos para Bitcoin.
Informe Hashrate Index.
La mira puesta en países de la extinta Unión Soviética
De cada uno de los países en la lista de los mineros, ya mencionados más arriba, se están analizando sus condiciones energéticas y sus legislaciones. Se sabe incluso que muchos de ellos son tan hostiles como China hacia la minería de criptomonedas.
Kazajistán, Kirguistán, Rusia, Uzbekistán y Ucrania son vecinos ubicados en Asia incluidos en el grupo en evaluación. Todos forman parte de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), una organización supranacional compuesta por diez de las quince exrepúblicas soviéticas.
Estas naciones ofrecen la ventaja de su cercanía con China (lo que facilita la logística de traslado de equipos) y su clima frío que facilita el mantenimiento de los equipos. Estas ventajas contrastan con dinámicas regulatorias que no son muy favorables.
Entre este grupo de naciones resalta Rusia, donde al igual que en China se reconoce a Bitcoin como propiedad, pero se prohíbe su uso como método de pago. Este país concentra el 6,9% del hash rate.
En enero de 2021 entró en vigencia la Ley de Activos Financieros Digitales, que permite a los rusos establecer empresas mineras. La ley exige que el hardware de minería sea propiedad de una entidad extranjera. El software del grupo de minería y cualquier cambio de divisas igualmente deben ser administrados por una entidad foránea.
Rusia tiene abundancia de energía hidroeléctrica barata en la región de Siberia. Por ello, se ve como una solución rápida para reconectar el hash rate inactivo.
Al sur de Rusia está Kazajistán, país que ya ha recibido a algunos mineros. El fabricante de equipos Canaan anunció que había trasladado parte de su flota a esta zona, al igual que BIT Mining Limited, del pool BTC.com. La nación ya tiene su centro minero de Bitcoin (con 6% de la tasa de hash) y promete energía de carbón barata para sus operaciones.
A pesar de ello, el informe indica que las regulaciones podrían ser un problema, ya que Kazajstán requiere mucho papeleo para las importaciones y esto dificultaría a los mineros chinos presentar una solicitud ante los funcionarios para probar el origen de sus máquinas.
El país parece estarse preparando para la entrada de mineros, pues recientemente se aprobó una nueva ley que aumenta el costo de la electricidad para quienes desarrollen la actividad en este territorio. La nueva legislación entrará en vigor el 1 de enero de 2022.
Las otras zonas de Asia que recibirán parte de la migración son Kirguistán y Uzbekistán, junto a Mongolia, según dice el estudio. En ellas también hay ventajas y desventajas.
Este año, Uzbekistán legalizó el comercio y la minería de bitcoins e incluso hizo que el activo estuviera libre de impuestos (…) mientras en Kirguistán está legalmente reconocido como un producto básico que se puede comerciar y extraer, pero no es legal usarlo a nivel nacional como medio de pago.
Informe Hashrate Index
Tres países de Suramérica están en la lista
Tomando en cuenta los desafíos regulatorios que pudieran surgir en los países vecinos, algunos mineros estudian la posibilidad de salir del continente asiático. Los investigadores de Hashrate Index indican que, después de Estados Unidos, los mineros analizan las características de Islandia y Canadá, con entornos jurídicos favorables.
Destacan asimismo las condiciones países suramericanos como Paraguay, Argentina y Venezuela. De estos tres últimos resaltan las ventajas de Paraguay, donde se espera que en algún momento se apruebe un proyecto de ley pendiente y existe abundancia de recursos hidroeléctricos, siendo una región muy atractiva para la minería. Lo mismo dicen de Argentina, pero se observa la escasa legislación que ofrecen al sector.
En cuanto a Venezuela, se tiene en cuenta el hecho de que la minería de Bitcoin es legal, aunque el país carece de un entorno jurídico formal que aborde las criptomonedas. Desde diciembre pasado está pendiente la fijación de tarifas eléctricas para los mineros.
Los riesgos de salir de Asia: cómo trasladar los equipos
De acuerdo al análisis, aún cuando muchos mineros quedarán en regiones cercanas a China, todas las señales parecen llevar a la mayoría de ellos fuera de Asia, con EE. UU. a la cabeza de la lista.
No obstante, a pesar de que muchos de estos países ofrecen condiciones aceptables para operar, mudarse al hemisferio occidental implica abordar algunos problemas logísticos. Se incluyen así en la ecuación los gastos de envío y el costo de construir una nueva granja desde cero.
Los cálculos indican que aproximadamente 15.955 toneladas de equipos residen en China (cerca de 1 millón de máquinas). Su traslado vía marítima podría consumir unos USD 8,2 millones, sin sumar los gastos de envío a puerto de los equipos desde de las provincias chinas, ubicadas en el centro y oeste del país, lejanas al mar.
«Más allá de los costos de envío y la logística, todavía hay una multitud de otras variables engañosas que podrían afectar este proceso», acota el informe. «Por ejemplo, muchas de estas máquinas mineras no cumplen con los estándares occidentales: algunas usan transistores de aluminio en lugar de cobre, que no son legales en los Estados Unidos».
Vienen luego otros problemas. Entre ellos, la búsqueda y pago de bienes raíces, la adquisición de estructuras de soporte para las máquinas o espacio de rack, y la administración de las instalaciones. Se estima que la construcción de una granja en Norteamérica requiera la inversión mínima de unos USD 120.000.
Aún con todos estos obstáculos, los analistas concluyen que, al final, el proceso será favorable para la red de Bitcoin. Auguran que como consecuencia de la migración el sector se enfrentará a una mayor regulación, pero la blockchain estará más descentralizada.
La migración será complicada. Surgirán problemas imprevistos, las tendencias cambiarán y pasará al menos un año, si no más, antes de que se asiente el polvo. Pero una vez que las cosas se solucionen, la dispersión de los mineros probablemente será una bendición para la red a largo plazo, ya que el hash rate se distribuirá aún más en varias jurisdicciones.
Hashrate Index.