“Solana estaría formando un patrón alcista inusual”, dice analista

Un trader y analista del mercado de criptomonedas sugiere que solana (SOL) podría experimentar pronto una caída importante que será el preludio de una tendencia alcista.

De acuerdo con el analista, que se identifica como «The Alchemist Trader» en la comunidad de TradingView, SOL está “en una zona crítica de decisión”, pues cotiza cerca del punto de control (POC), considerado el nivel de volumen más alto dentro del rango reciente. Este punto actúa como una barrera técnica clave y, de no ser superado con fuerza, podría derivar en un retroceso adicional.

La resistencia que enfrenta SOL en este momento es significativa. Está compuesta por dos elementos clave: el máximo del área de valor, que es donde antes se realizaron muchas operaciones y suele actuar como un techo, y el retroceso de Fibonacci de 0,618, una medida técnica que señala puntos donde el precio puede detenerse o revertirse.

Estos dos niveles han sido históricamente zonas donde el precio tiende a bajar, por lo que podrían provocar una caída temporal. Esta baja formaría parte de una figura inusual, llamada “patrón armónico alcista”, en la que el precio desciende en un tramo final antes de rebotar y subir con más fuerza.

El patrón técnico identificado por el analista se alinea con una posible caída hasta los 95 dólares. Este retroceso, aunque bajista en el corto plazo, no invalidaría el movimiento alcista en general, dice The Alchemist Trader. Al contrario, puede considerarse un paso necesario dentro de una configuración alcista de mayor plazo, señaló el especialista.

La culminación de este patrón serviría como punto de partida para un impulso que, de confirmarse, podría llevar el precio a la zona de los 200 dólares o más, afirma el autor de la comunidad de TradingView.

En esta gráfica se aprecia claramente la proyección del analista para el precio de SOL en el corto plazo:

Este tipo de patrones armónicos son poco comunes, pero potentes cuando se completan correctamente, recuerda el especialista. En este caso, los indicios de una “estructura piadosa” implican que un rebote fuerte puede surgir luego de corrección, generando así un cambio de tendencia significativo.

Mientras tanto, SOL continúa operando dentro de un rango delimitado por niveles históricos de marcos temporales altos, por lo que el mercado deberá mantenerse a la expectativa, dice el analista. Para él, una ruptura con volumen por encima del máximo del área de valor invalidaría el patrón armónico y señalaría una posible continuación inmediata del alza.

Solana está en la palestra

En paralelo a este análisis técnico, SOL está siendo observada de cerca por razones regulatorias. La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) ya está revisando ocho solicitudes para lanzar ETF basados en esa criptomoneda. Estos instrumentos permitirían a inversionistas tradicionales acceder a exposición al precio del activo desde plataformas bursátiles convencionales, sin necesidad de custodiar directamente solana.

Actualmente, los emisores de ETF están respondiendo comentarios de la SEC mediante la modificación de sus formularios S-1. Este proceso podría concluir antes del 31 de julio, pese a que la fecha límite oficial es el 10 de octubre. La intención del regulador sería acelerar la aprobación, lo que abriría las puertas al primer ETF al contado de un activo digital que no sea bitcoin (BTC) o ether (ETH).

En este contexto, las expectativas de aprobación han sido reflejadas en plataformas como Polymarket. Los usuarios de esta casa de apuestas basadas en criptomonedas le asignan una probabilidad del 91% a la aprobación de un ETF de SOL durante 2025, y del 68% antes de que finalice julio.

Esa inminente aprobación de los ETF de SOL hace que esta criptomoneda esté en la espera de un “verano” que podría llevar al precio del activo, actualmente sobre los USD 154, a cifras más altas. Esto de acuerdo con el más reciente análisis de la firma VettaFi Research, recogido por CriptoNoticias.

El avance en materia de productos financieros regulados incluye también el lanzamiento reciente del ETF “REX Osprey Sol Staking” (SSK), que comenzó a cotizar en la Bolsa de Opciones de Chicago (CBOE) el 2 de julio. Este fondo permite a los inversionistas obtener rendimientos por staking además de la exposición directa al precio de SOL.

En sus primeras horas de operación, SSK captó 20 millones de dólares, situándose entre el 1% superior de los lanzamientos más exitosos, de acuerdo con datos de Bloomberg Intelligence. El desempeño temprano de este ETF sugiere un alto interés institucional y representa un hito para los productos que incorporan ingresos pasivos dentro del mercado regulado.

Un comportamiento inflacionario

Sin embargo, la expansión del suministro de SOL durante 2025 ha generado un entorno complejo. En seis meses, la cantidad de monedas en circulación aumentó de 480 millones a más de 530 millones. Esta expansión de más del 15% interanual ejerce presión inflacionaria sobre el precio, dificultando la consolidación de movimientos alcistas.

En la siguiente gráfica se aprecia el incremento de la emisión de SOL en los últimos 6 meses.

Hay que tomar en cuenta que, desde su máximo histórico de 260 dólares, alcanzado en noviembre de 2024, la cotización de SOL ha caído un 40%. Esto podría explicarse en parte por esta presión de oferta, pues a pesar de los repuntes puntuales, el crecimiento sostenido se ha visto limitado por una demanda que no termina de absorber el nuevo suministro.

Este contexto es relevante para evaluar cualquier configuración técnica, debido a que el potencial alcista debe medirse frente a los fundamentos macroeconómicos y estructurales del activo.

En ese sentido, aunque el análisis técnico de The Alchemist Trader sugiere un camino hacia los 200 dólares, el mercado deberá absorber tanto las nuevas emisiones como las expectativas en torno a los ETF para validar dicha trayectoria.

Solana se encuentra en una encrucijada tanto técnica como estructural. El patrón armónico sugiere una corrección seguida por un fuerte repunte, pero el entorno regulatorio, la presión inflacionaria y los movimientos del mercado institucional serán factores clave para definir su rumbo en la segunda mitad de 2025.