-
Una corrección a la baja sería saludable para que el oro continúe su tendencia alcista.
-
Condiciones macroeconómicas favorecen al precio del oro y de bitcoin.
El precio del oro ha tenido una gran subida en 2024. Según métricas de análisis técnico interpretadas por especialistas de ‘The Kobeissi Letter’, esto ha llevado al oro a un nivel “extremo” que se ha visto pocas veces en la historia del comercio de este metal precioso.
Los mencionados analistas explican que el precio del oro se encuentra un 15% por encima de su media móvil de 200 días. Esta brecha es la más amplia que el oro ha alcanzado en los últimos 4 años y desde la década de 1980 hasta el día de hoy, solo se ha visto algo similar en 8 oportunidades.
La media móvil de 200 periodos es un indicador técnico utilizado en análisis de series temporales que ayuda a identificar la dirección general del precio. Su perspectiva a largo plazo permite suavizar las fluctuaciones de precios diarias y facilita a los traders ver patrones más claros en el comportamiento del activo.
Días atrás, el mismo grupo de analistas había comentado en un boletín que “el oro se negocia como si estuviéramos en una crisis”. En ese momento, su precio ya había alcanzado los USD 2.660 por onza.
Ante panoramas similares a los que muestra el oro al día de hoy, los especialistas indican que su reacción ha sido la de mantenerse lateral en los meses siguientes, con subidas que promedian, como máximo, un 5%. No obstante, The Kobeissi Letter advierte que este activo podría estar sobreexigido en el mercado al corto plazo por lo que podría esperarse alguna corrección a la baja.
¿Qué ha traído al oro hasta este punto?
El oro fue y sigue siendo considerado como un refugio de valor ante escenarios de inestabilidad o crisis económica. El contexto mundial actual parece estar empujando a los inversionistas a echar mano del oro para resguardar su patrimonio.
Por un lado, está la reducción de 50 puntos básicos que anunció la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) el pasado 18 de septiembre a las tasas de interés.
A pesar de que las medidas tomadas por la Fed tienen como objetivo incentivar la actividad económica (algo que suele propiciar el movimiento de dinero desde activos refugio hacia activos de riesgo) el oro sigue en alza. Esto podría interpretarse como una confirmación de que el mercado, en general, está esperando una recesión.
Por otro lado, está el conflicto bélico entre Israel e Irán, que semana tras semana parece ir escalando y está causando revuelo en los mercados.
A esta situación se suma la intención de Turquía de unirse a los BRICS. Vale la pena resaltar la relevancia de Turquía siendo el país que tiene el control del canal del Bósforo, principal vía marítima para el transporte de petróleo desde el medio oriente hacia Europa.
Por si fuera poco, también está el hecho de que los niveles de deuda en Estados Unidos están desenfrenados. Para enero de 2024, la deuda era 34,7 billones de dólares. Es decir, el 124% del PIB del país. Ninguna nación tercermundista podría conllevar un país sin crisis con tal nivel de deuda.
De cerrar sobre los 2.600 dólares este 2024, el oro tendría su mejor año desde 1979. En ese entonces, tuvo un rendimiento del 126%. Curiosamente, en el ámbito geopolítico y económico, aquel año guarda ciertos paralelismos con 2024.
Para 1979, la inflación en Estados Unidos llegó a las 2 cifras, rondando el 13% de inflación acumulada anual. Entre las medidas tomadas por Paul Volcker, quien era presidente de la FED para ese entonces, se encontró la subida de las tasas de interés hasta un 10%. El doble de lo que se tiene hoy.
Adicionalmente, la revolución iraní, que llevó al derrocamiento de Mohammad Reza Pahleví (apoyado por Estados Unidos) causó revuelo en Medio Oriente, lo que terminó por afectar los suministros de petróleo y causó aún más daños a la economía.
El revuelo geopolítico y económico parece, por ahora, caldo de cultivo para una recesión y el precio del oro es una muestra de ello.
Bitcoin: ¿oro digital o activo de riesgo?
Para muchos en el ecosistema de Bitcoin, esta moneda digital ha sido una herramienta para resguardar valor y en múltiples ocasiones se le ha comparado con el oro. Sin embargo, también hay quienes argumentan que BTC es un activo de riesgo, especialmente por la volatilidad en su mercado.
Observemos el siguiente gráfico para extraer una conclusión definitiva:
Más allá de la volatilidad que puede tener, mirando el gráfico histórico de precios de bitcoin desde sus inicios hasta la actualidad queda en evidencia que, en el largo plazo sí ha servido como activo de refugio y reserva de valor.