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La fiscalía paraguaya emitió la imputación este miércoles 13 de noviembre.
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La abogada María Sol Arrúa alega que los vecinos son afectados todos los días.
Las 24 horas, los 7 días de la semana, los vecinos del barrio de Santa Lucía, en la localidad de Villarica, Paraguay, deben soportar el sonido de los mineros de Bitcoin que, a toda máquina, procesan la red a nombre de Bitfarms, una de las grandes compañías del sector emergente.
Desde hace seis meses, la comunidad se organizó y elevó la denuncia ante las autoridades del país. Pero sin mayor respuesta. No fue sino hasta este miércoles 13 de noviembre que la Fiscalía citó a los demandantes y tomó la decisión de imputar penalmente a Bitfarms.
En declaraciones a CriptoNoticias, la abogada María Sol Arrúa dijo que la fiscalía decidió imputar a la empresa minera por el delito de polución sonora, tipificado en el artículo 198 del Código Penal.
Señaló Arrúa que el Ministerio Público pudo probar que la compañía incurría en el delito tras sobrepasar los límites de decibeles permitidos, que son de 65db, y que alcanzaron los 77 db por las operaciones mineras.
En videos compartidos con la Redacción de CriptoNoticias, se aprecia claramente el sonido característico de las máquinas ASIC para minar Bitcoin, retumbando en los alrededores de la zona residencial de Santa Lucía, en Villarrica.
Caso con varias etapas
La abogada comentó que el caso ha tenido varias etapas, siendo que en mayo se denunció la situación ante la Municipalidad de Villarica, entidad que intervino, tomando nota en un libro de actas de los decibeles de las operaciones mineras.
“Pero después hubo un silencio total de parte de la administración en torno a las intervenciones”, dijo la abogada, quien criticó que la granja opera en una zona residencial, con vecinos viviendo a más de dos kilómetros del centro de datos manifestando también su malestar.
Ante la poca intervención, los vecinos empezaron un proceso de intermediación, hablando directamente con Bitfarms. Dice la abogada que llegaron a conversar con la compañía, la cual se comprometió a regular la intensidad.
“Pero los vecinos manifiestan que se regularon dos o tres días, luego empezaron a elevar la intensidad y se dieron cuenta que no se respetó el acuerdo y ya no había respuesta de la empresa”, criticó.
Contó que, en octubre, cuatro meses después de la primera denuncia a nivel administrativo, los vecinos, tras experimentar problemas de estrés, de salud y daños en las infraestructuras de sus casas, denunciaron la situación ante la comisaría del barrio Santa Lucía, donde está ubicada la granja. La policía intervino y elevó el caso ante la Fiscalía de Paraguay, que finamente emitió la imputación contra Bitfarms.
“Nosotros no tenemos problemas con este rubro, si lo solucionan, cada uno a lo suyo. Pero bajo este precio, no”, señaló la abogada Arrúa, y dijo que se trata de al menos 500 familias afectadas a 2 kilómetros de la granja de minería de Bitcoin.
“Somos muchísimos los afectados y eso es innegociable. Estamos hablando de posibles violaciones a los derechos humanos”, sentenció Arrúa.
CriptoNoticias intentó comunicarse con Bitfarms para obtener comentarios acerca de la imputación penal en Paraguay, pero al cierre de este reporte, no se obtuvo respuesta.
Bitfarms, que es una de las mineras de Bitcoin más grandes del mercado, con 1,6 GW de potencia instalada para operar en distintas granjas alrededor del mundo, está en Paraguay desde hace varios años. Esta fue una de las primeras compañías del nicho en aprovechar las bondades del país guaraní para esta importante actividad digital.
Como ha sido reportado por CriptoNoticias, la compañía minera anunció planes de expandirse por esa nación. En julio del año pasado, Bitfarms dijo que abriría dos granjas mineras tras firmar un acuerdo de compra por hasta 150 MW de energía hidroeléctrica. Una negociación alcanzada con la Administración Nacional de Energía Eléctrica (ANDE).
En ese momento, se informó que una de las granjas habilitadas sería la de Villarica, que comenzó a construirse desde el tercer trimestre del año pasado y que entró en operaciones poco después.