Tres operadores de cambio de criptomonedas fueron arrestados en Estados Unidos, en las ciudades de en New York, Missouri y Arizona. La similitud entre los casos se revuelve alrededor del empleo de servicios relacionados con moneda digitales bajo circunstancias ilícitas.
El abogado y comerciante, Thomas Constanzo, que opera un sitio de intercambio de criptomonedas, está bajo custodia de los cuerpos de seguridad del estado de Arizona luego de que su casa fuese allanada por funcionarios federales la semana pasada.
El abogado se hallaba en libertad condicional para el momento de su arresto. A pesar de que Constanzo operara con criptomonedas como Dash, Bitcoin y otros productos asociados al ecosistema, el sujeto fue encarcelado porque fueron halladas municiones en el lugar, lo que violaba su acuerdo judicial.
Anteriormente, los funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional obtuvieron una orden de registro para poder confiscar los activos de Constanzo, incluyendo las criptomonedas, y todo software relacionado con las monedas digitales. Sin embargo, Constanzo solo ha sido acusado de posesión ilegal de municiones.
En New York, un comerciante de bitcoins llamado Richard Petix se declaró culpable de la transferencia de fondos sin licencia, además de haber hecho declaraciones falsas a funcionarios federales.
Este último delito lo cometió hacia el final de 2015. En ese entonces, Petix aseguró a los funcionarios que no estaba usando ninguna computadora, como se le había exigido luego de una condena de 2009 por un cargo relacionado a propiedad y comercio de pornografía infantil.
Sin embargo, Petix mintió. De acuerdo a las investigaciones realizadas por las autoridades, el ex-convicto administraba un negocio de intercambio de bitcoins. Incluso el 3 de agosto de 2015 vendió 37 Bitcoins, con un valor de casi 13.000 dólares a un agente encubierto. De acuerdo a los acusadores, el sujeto habría tranzado cerca de 200.00 dólares desde agosto de 2014 hasta diciembre de 2015.
Usando su computadora portátil y su teléfono inteligente, el acusado transfirió aproximadamente $ 13,000, a través de 37 bitcoins, a una dirección especificada por el agente. Sin embargo, frente a los agentes federales de libertad condicional presentes en el lugar, Petix afirmó que la laptop y el teléfono no eran suyos y que no podía acceder a ellos.
Oficina del Fiscal Federal
En Missouri, Jason Klein se declaró culpable tras ser acusado de vender criptomonedas sin la permisología correspondiente a dos agentes encubiertos. Klein realizó hasta cinco transacciones entre febrero de 2015 y julio de 2016. La Fiscalía argumentó que el sujeto no obtuvo la aprobación de la la Red de Aplicación de Crímenes Financieros (FinCEN por sus siglas en inglés) ni del gobierno de Missouri para operar un negocio de transmisión de fondos.
Klein vendió casi 98 bitcoins a los agentes durante el tiempo de la operación, recaudando cerca 30.000 dólares durante ese período y cobrando una comisión por encima de lo estipulado para esas ventas. Además, habría un segundo individuo dentro de dos de estas transacciones, aunque el sujeto no ha sido identificado.
Tres hechos aislados que, tras conocer algunos detalles, no implican la complicidad o facilidades del ecosistema, sino un aprovechamiento individual de la estructura y el funcionamiento de las criptomonedas, sin que los delitos por los que se investiga a los sujetos tengan relación directa con este poderoso instrumento financiero.
Imagen destacada por jinga80 / stock.adobe.com