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La fundadora de BMB fue incluida en la Alianza Blockchain Iberoamérica.
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Admitió que abrir una cuenta bancaria en Bolivia aún resulta complicado.
Aún cuando el gobierno de Bolivia mantiene la medida de prohibición sobre el uso de las criptomonedas, entusiastas como Gabriela Melendrez Alaro, fundadora del colectivo Bolivian Mind Blockchain (BMB), opinan que dicha acción no debe servir como excusa para quedarse estancados, más bien, la evalúan como una oportunidad para encarar la promoción de este tipo de activos como una forma efectiva de diversificación de la economía nacional.
Melendrez Alaro dice que desde hace un año se ha enfocado, a través de BMB, en promover charlas para reducir la falta de conocimiento sobre el ecosistema de las criptomonedas.
De igual forma, en materia de regulación, ha impulsado el debate de un texto denominado “Alerta sobre la actividad financiera ilegal”, en la que la Autoridad del Sistema de Supervisión Financiera de Bolivia especifica los distintos fraudes y apremia las distintas actividades ilícitas que se están originando con las criptomonedas, según el punto de vista de la entidad. A su juicio, esa medida restrictiva, lejos de espantar a los usuarios, más bien ha logrado captar el interés colectivo sobre las ventajas de dicho ecosistema.
En efecto, CriptoNoticias la abordó para que comentara cómo fue su inicio en el mundo de las criptomonedas. Al respecto, explicó que en el 2014 realizó un proyecto de grado para la obtención de su licenciatura, en el que hizo un estudio del uso de bitcoin para los pequeños microempresarios en Bolivia.
(…) fue cuando precisamente se emitió la resolución gubernamental, la cual me limitó a analizar casos reales. Por ejemplo, mi familia trabaja la cerámica decorativa de arcilla, que tiene buena aceptación fuera de Bolivia, allí pudiera comercializarse en criptomonedas. Y es ahí donde va el planteamiento primario de mi proyecto, es decir, es válido que puedan transarse bienes y servicios en criptomonedas.
Gabriela Melendrez Alaro, fundadora del colectivo BMB.
A criterio de Melendrez Alaro, abrir una cuenta bancaria en Bolivia es muy complicado por los mismos pre-requisitos, sin contar que las tasas de interés son elevadas en las comisiones que se pagan por transferencias entre bancos de diferentes países. “Por esta razón, el uso de bitcoin u otras criptomonedas impulsaría con rapidez y seguridad a la microeconomía boliviana”, enfatizó.
Aclaró que ella no se inició en este mundo de las criptomonedas con el fin de hacer trading. No obstante, sí admitió que lo que más le atrajo fue el tema de la descentralización como divisa y la posibilidad de poder vender y comprar sin intermediarios.
Si bien las criptomonedas en el ámbito mundial no están reguladas por ningún organismo del Estado, su uso sí beneficiaría a los pequeños emprendimientos, ya que evitaría intermediarios lo que ahorraría tiempo y costes de la transacción, gracias al sistema de peer-to-peer.
Gabriela Melendrez Alaro, fundadora del colectivo BMB.
Las iniciativas enfocadas en el uso de Bitcoin, Ethereum o Nem que se están promoviendo actualmente en Bolivia, se deben a que “se conocen procesos irregulares en determinados ‘papeleos’, donde se privilegia a quien más tiene, lo cual repercute en la poca transparencia en los procesos. Es ahí donde promovemos la tecnología asociada a las cadenas de bloques, para que sean eficientes y transparentes ante la ciudadanía boliviana”, acotó Melendrez.
A una década del Bitcoin
Ya bitcoin tiene diez años y Melendrez Alaro descarta que exista cierta resistencia o escepticismo en la región respecto al uso de las criptomonedas. “Creo que a una cierta susceptibilidad por la norma, al menos en Bolivia, que limita el uso de divisas no reguladas por el Banco Central de Bolivia (BCB)”, sugiere.
Además cree que bitcoin y las otras criptomonedas se están convirtiendo en una opción frente al sistema bancario. “Hoy en día estas opciones se han convertido en una manera de poder realizar envíos de dinero con criptomonedas y luego quizá se logre monetizar por la divisa de la región”, manifestó.
De acuerdo con su experiencia, el uso de bitcoin ofrecería a los bolivianos la capacidad de manejar su propio capital, y a las empresas y comercios hacer operaciones mucho más seguras y flexibles, que aporten liquidez, porque no tendrían que pagar comisiones especiales, que es lo que usualmente exigen las entidades bancarias para ejecutar las transferencias.
«Por lo que, con estas divisas digitales, no necesitaríamos ningún tipo de intermediario, lo que facilitaría la realización de cualquier movimiento financiero debido a que utiliza un sistema descentralizado, a diferencia del dinero fiduciario, el valor de las criptomonedas no podría ser manipulado al capricho de unos cuantos», indicó.
Mayor educación
Melendrez Alaro piensa que la sociedad boliviana requiere mayor educación financiera. «Los bolivianos deben estar al tanto que las divisas digitales están adquiriendo mayor popularidad, pues se hallan dentro de un sistema descentralizado cuya actividad no está regulada por ningún organismo público», apuntó.
Actualmente, en todo el mundo se maneja un número considerable de diversas criptomonedas y cada una de ellas tiene una particular forma de operar, lo que permitiría al boliviano adaptarse mejor, de acuerdo a su requerimiento.
Ahora se sabe que el uso de las criptomonedas en Bolivia es ilegal, sin embargo para Melendrez Alaro eso ha servido para prestar especial atención a la dinámica del mercado de las criptomonedas en el país. En detalle, cree que el enfoque ha sido observar los usos de bitcoin con fines educativos y de pruebas de concepto.
“Lo que me ha seducido de bitcoin es la tecnología que tiene por detrás Y desde entonces vengo viendo los escenarios en los que se están aplicando”, comentó.
En torno a la conveniencia de que se regule el manejo de las criptomonedas en la región latinoamericana, Melendrez Alaro sostuvo que si se analiza la presencia de las criptomonedas como sistema, las cuales no responden a los gobiernos, y si se toman en cuenta la utilidad que le da el usuario que necesita exportar algún producto, sí ve necesario una regulación, “además con que la norma sea modificada a favor de poder usar estos criptoactivos, la misma región puede ir haciendo sus pruebas de concepto para no queda al margen de la economía digital”.
Por otro lado, la fundadora de BMB no cree que las criptomonedas sean una simple moda ni tampoco que sean la panacea en la economía digital y los sistemas de gobernanzas.
A su criterio, el ecosistema blockchain no resuelve todos los problemas pero sí sirve de ayuda como aliado para ofrecer servicios públicos más eficientes.
Esta tecnología puede recuperar la confianza del inversionista y del usuario en aquellos procesos donde existe vulnerabilidad de información albergada en la nube. Es por ello que también se considera a la tecnología blockchain como la Internet del valor.
Gabriela Melendrez Alaro, fundadora del colectivo BMB.
Balance de BMB desde su creación
Bajo la óptica de Melendrez , el balance del trabajo de Bolivian Mind Blockchain desde que se fundó en octubre de 2018 hasta el presente ha sido positivo, pues los encuentros inicialmente tenían el objetivo de informar a la población que bitcoin no es “blockchain”, así como dar a conocer las propiedades de estas tecnologías.
En lo que va del presente año, y gracias al respaldo del Centro Cultural de España, destacó que cada vez más crece el número de personas interesadas en saber sobre la economía digital.
Creemos que Bolivia puede ser parte de esta gran movida mundial y creemos que compartir la información no debe ser limitada y más al contrario debemos abrir puertas para que más personas puedan tener idea y que sea este el inicio de una gran aventura el desarrollo de aplicaciones con tecnologías emergentes.
Gabriela Melendrez Alaro, fundadora del colectivo BMB.
De cara al futuro, expresó que la expansión de Bolivian Mind Blockchain apunta a la concreción de objetivos específicos, como educar sobre el uso de las criptomonedas, de modo se fortalezca la adopción en la industria local, “queremos que los procesos sean transparentes y eficientes, que nos ayuden al desarrollo concreto y mundial. Creemos que las tecnologías emergentes, en este caso blockchain, nos ayudara a lograr ese objetivo”, dijo.
Las expectativas aumentan y ahora más que la fundadora de BMB, Gabriela Melendrez Alaro, fue incluida como coordinadora para el nodo Bolivia en la Alianza Blockchain Iberoamérica, una organización en la que participan actores de diferentes países que se enfocan en compartir información relacionada acerca de estas tecnologías emergentes.
“Estamos contentos de formar parte de la Alianza Blockchain y desde ya se deben comenzar a afinar distintas actividades que permitan apuntalar el conocimiento y uso eficaz de la economía digital”, sentenció.