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Piensan que las criptomonedas elegidas tienen características únicas en áreas clave.
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Aseguran que el maximalismo bitcoiner hace daño a la industria.
La decisión del gobierno de Donald Trump de establecer una Reserva Estratégica que, además de bitcoin (BTC), incluirá a otras 4 altcoins ha provocado intensos debates en el ecosistema de criptomonedas.
Son muchos los que cuestionan la selección de activos que dio a conocer el mandatario este 2 de marzo, pues esperaban que solo se incluyera a bitcoin.
Sin embargo, Trump ha dicho que también ahorrarán ether (ETH), XRP de Ripple, solana (SOL) y cardano (ADA). Hasta ahora no se ha revelado cómo se ponderarán estos activos dentro de la reserva.
La inclusión de múltiples criptomonedas ha generado inquietud. Los críticos argumentan que agregar altcoins complica la iniciativa y podría crear sesgos de mercado no deseados. Fueron varios los que preguntaron cuál sería el aporte de estas criptomonedas a la reserva.
Pero en medio del debate, también fueron muchos los que defendieron la iniciativa y expusieron razones por las que consideran positivo que la reserva de Estados Unidos incluya variedad de activos.
En ese sentido, los partidarios de las altcoins seleccionadas defendieron su inclusión, argumentando que era parte de una victoria más amplia para el sector de las criptomonedas.
Uno de ellos es el director ejecutivo de Ripple, Brad Garlinghouse, quien acogió con agrado el reconocimiento por parte del gobierno, reiterando sus críticas al llamado maximalismo de Bitcoin.
En un mensaje en X afirmó que la industria de las criptomonedas prospera gracias a la colaboración.
Aprecio la visión del presidente de las criptomonedas, Donald Trump, de una reserva gubernamental de activos digitales representativa de la industria. El maximalismo es el enemigo del progreso de la industria. Me alegra ver que el presidente reconoce que vivimos en un mundo de múltiples cadenas.
Brad Garlinghouse, CEO de Ripple.
De manera similar, el fundador de Cardano, Charles Hoskinson, destacó el compromiso a largo plazo de su plataforma con la seguridad y la descentralización y expresó su confianza en su capacidad para contribuir significativamente al panorama de las criptomonedas.
«Creo firmemente en Cardano porque hemos trabajado muy duro durante los últimos 10 años para intentar construir un sistema que preserve y proteja la integridad del espacio de las criptomonedas en su conjunto», expresó.
Considera además que hay un montón de gente buena en Bitcoin, Ethereum, Solana y XRP. «Es totalmente posible que muchos coexistan en armonía, con billones de dólares fluyendo en estos sistemas. Lo que más importa es la integridad».
Ante estas declaraciones, miembros de la comunidad hicieron comentarios en los que manifestaron su apoyo a la inclusión de las altcoins en las reservas, defendiendo la diversificación.
Uno de ellos es el investigador y analista Daniel Batten, quien hizo una analogía de la creación de bitcoin con la invención de la rueda:
Después de su invención, surgieron algunas otras variantes: la rueda cuadrada, la rueda ovalada, la rueda en forma de estrella (…) La creencia de que la rueda circular es superior a otras formas de rueda es el enemigo del progreso de la industria.
Daniel Batten, analista e investigador
Batten concluye que la industria alcanzará sus objetivos si se trabaja en conjunto. Y aunque muchos de los comentaristas rechazaron la idea, otros respaldaron la propuesta. Piensan que las criptomonedas elegidas tienen características únicas en áreas clave que favorecerán la reserva. Esto, más allá del potencial de revalorización que ofrece bitcoin por su capacidad como refugio de valor.
Las altcoins aportan diversificación
Tal como señala el equipo de la plataforma de investigación Chain Catcher, entre esas propiedades resaltan los contratos inteligentes, las cadenas de bloques de alto rendimiento y los puentes financieros.
Eso es algo que muchos ven como aporte para una cartera equilibrada de criptomonedas, por lo que creen que la elección de Trump no solo podría reconfigurar la posición de Estados Unidos en la economía digital global, sino que también podría establecer un punto de referencia de confianza para la industria.
De esta forma, se ve que Ethereum -como la piedra angular de los contratos inteligentes- aporta una gran comunidad de desarrolladores y un rico ecosistema.
De hecho, a principios de febrero de este año, el hijo de Trump, Eric Trump, ya había pedido comprar ETH, afirmando que era el mejor momento para aumentar las tenencias de esta criptomoneda.
Solana, por su parte, ha emergido en los últimos años por su alto rendimiento y bajos costos de transacción. Tiene capacidad para procesar decenas de miles de transacciones por segundo, superando a Bitcoin y Ethereum.
Por su lado, Ripple es la que tiene más avances en el área de los pagos transfronterizos, con velocidades de transacción rápidas y bajos costos, que ya han sido adoptados por cientos de instituciones financieras en todo el mundo. Un hecho que citó Trump y que compartió en Truth Social.
Mientras Cardano tiene avances en el área de la identidad digital y se cree que con ella Trump puede tener como objetivo demostrar el apoyo de Estados Unidos a las finanzas inclusivas globales.
Cabe agregar que todas las criptomonedas seleccionadas se encuentran en el top 10 de las que tienen mayor capitalización y también están vinculadas al mercado de los fondos cotizados al contado (ETF).
Tal como ha informado CriptoNoticias, BTC y ETH ya comercializan ETF desde el año pasado, al tiempo que ya se han introducido solicitudes ante las autoridades para ETF de SOL, Cardano y XRP.