-
El protocolo utiliza firmas Taproot para hacer más flexible y económicas las transacciones.
-
Frostnap podría reducir los puntos de riesgos de administrar fondos con firmas múltiples.
La conferencia Bitcoin Honeybadger 2023, celebrada en la ciudad de Riga, Letonia, dejó una amplia muestra de la actualidad del ecosistema. Opiniones de expertos, debates y la presentación de numerosas novedades protagonizaron el encuentro. Una de estas es el desarrollo de un nuevo protocolo de multifirma denominado Frostnap.
Como indicó Nick Farrow, director de prácticas de Frostnap, durante la conferencia, este desarrollo utiliza firmas FROST (Flexible Round-Optimized Schnorr Threshold Signatures), un protocolo propuesto por los investigadores Chelsea Komlo, Ian Goldberg y Douglas Stebila en 2020.
FROST es un protocolo que funciona “fuera de la cadena”, cuya naturaleza proporciona un umbral de firma múltiple que se ejecuta a través de matemáticas y rondas de comunicación entre los participantes. Para entender esto, es necesario comprender que cuando una persona utiliza firmas digitales, el remitente puede cifrar cualquier mensaje usando la llave pública del destinatario. Una vez que ese mensaje esté cifrado con esa llave o clave pública, sólo la llave o clave privada de ese receptor puede descifrarlo.
Por su parte, Frostnap es una implementación experimental de FROST de código abierto, bajo licencia del instituto MIT, que permite gestionar llaves privadas (o claves secretas) compartidas, que controlan una única llave pública, a través de una serie de dispositivos conectados entre sí. Como en otros métodos multifirma, se pueden establecer un número indefinido de firmantes, con cualquier condición para validar un gasto: por ejemplo, 2 de 2, 2 de 3, 5 de 10.
El objetivo de Frostnap es mitigar algunos de los puntos débiles del script multifirma que se utiliza actualmente en Bitcoin. Es decir, disminuye los costos, la complejidad y facilita la gestión.
¿Cómo funciona Frostnap?
“FROST tiene dos componentes principales: generación de claves [llaves] y firmas de claves”, explicó Farrow. La generación de claves funciona a través de los distintos dispositivos que interactúen entre sí para generar una clave pública con un umbral. En programación, un umbral es un valor que se utiliza para determinar si una condición se cumple o no. En este caso, el umbral determina si un número determinado de firmas pueden validar una operación.
Con Frostnap, cada dispositivo controla un recurso o un fragmento de la clave conjunto generada con FROST. “Pueden pensar en esto como una llave fragmentada en pequeños pedazos, pero en realidad con FROST todas estas piezas son intercambiables entre sí”, precisa Farow.
En comparación, el script de multifirma convencional utiliza distintas firmas (2 de 3, 4 de 5, etc.) para validar una operación, lo que representa un riesgo si alguna está comprometida o se pierde. Como reportó CriptoNoticias, ya el educador y bitcoiner Andreas Antonopoulos advirtió sobre los riesgos de asegurar fondos con firmas múltiples.
Cuando se utiliza FROST para firmar transacciones, cada dispositivo firma con su secreto compartido, creando varias firmas parciales (dependiendo de cuántas firmas se hallan establecido para crear el umbral) que se combinan entre sí para crear una única firma para una clave pública.
Cabe destacar que este método para generar firmas múltiples guarda similitudes con el método utilizado por el protocolo Musig2, que también utiliza firmas Schnorr, como informó a través de este medio. dio.
Beneficios de FROST
Las firmas FROST ofrecen varios beneficios. Por ejemplo, las multifirmas generadas con este protocolo lucen como cualquier transacción Taproot (bc1p), por lo que si se usa un explorador de bloques como Mempool.space no se puede determinar que se trata de un multifirma. El script multifirma convencional deja una huella que es trazable, FROST podría proporcionar mayor privacidad.
FROST también ahorra uso de espacio en los bloques, porque utiliza una única firma para una clave pública. Esto ahorra costos por comisión de transacción, debido a que la multifirma convencional requiere más espacio, dependiendo de la cantidad de firmas participantes.
Además, el protocolo permite realizar copias de seguridad más sencillas, precisamente porque solo utiliza una llave pública. Es decir, no hay que generar una semilla por cada clave o participante, lo que representa un punto de riesgo en muchos casos. Como indica Farrow: “podemos hacer una copia de seguridad de nuestros recursos compartidos secretos individuales”.
Farrow también expresó su optimismo respecto a un desarrollo que según sus palabras ha despertado escepticismo, debido a que se ve como un proyecto que podría tardar años en implementarse.
A propósito, el equipo de Frostnap tiene el objetivo de que los dispositivos que conformen la cadena multifirma no se circunscriban a un único fabricante. En el futuro, podríamos ver dispositivos como ColdCard, Blockstream Jade, Trezor o Ledger configurados para usar Frostnap.
Además, este desarrollo podría tener más alcance si se implementa para crear wallets que impliquen llaves o claves de Nostr o de la red Lightning.