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Las autoridades piensan quintuplicar impuesto aplicado a la electricidad que consumen los mineros.
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Hacen ajustes para que las startups de minería no se beneficiándose de las exenciones fiscales.
Los mineros de bitcoin continúan atravesando calamidades en Kazajistán donde las autoridades han anunciado nuevos planes de aumentar los impuestos y aplicar un esquema de cobro que consiste en vincular la tasa impositiva con el precio de la criptomoneda.
El ministro de economía de Kazajstán, Alibek Kuantyrov, informó sobre sus planes para imponer un impuesto a la minería de bitcoin, que aumentará los ingresos del fisco. Esto mientras los mineros de criptomonedas operan en el país con un recargo adicional por la electricidad que consumen.
«Estamos buscando aumentar los impuestos para los mineros. Actualmente, también buscamos vincular la tasa de impuestos de los mineros con el valor de la criptomoneda. Si el precio de la criptomoneda sube, será bueno para el presupuesto de la nación», dijo el ministro.
Por su parte, el titular de la Asociación Nacional de Blockchain y la Industria de Centros de Datos de Kazajstán, Alan Dorjiev, explicó que están estudiando vincular el impuesto con el precio de bitcoin por cada kilovatio hora consumido para extraer la criptomoneda.
Dorjiev agregó que el modelo que se piensa aplicar es fijar una tasa impositiva para un precio de bitcoin en el mercado de hasta USD 40.000, y otra tasa si el valor de la criptomoneda supera ese rango. «Y así sucesivamente. Pero todo esto es algo que todavía se está considerando», explicó el funcionario según lo reportado por medios locales.
Durante una reunión previa, el presidente de Kazajistán, Kassym-Jomart Tokayev, había encargado a los funcionarios que aumentaran los impuestos a los mineros de criptomonedas. También ordenó al organismo de control financiero de la nación que identifique todas las instalaciones mineras del país y examine sus documentos fiscales y aduaneros.
Mientras todo esto sucede, Kazajistán continúa perdiendo el atractivo que tenía para la práctica de la minería digital, después que el país se había convertido en un imán para los mineros de bitcoin.
El año pasado, el territorio kazajo recibió a cientos de granjas que buscaban refugio tras salir de China, cuando el gobierno de este país prohibió toda actividad relacionada con las criptomonedas y condenó la práctica de la minería de bitcoin y otras criptomonedas.
Posteriormente, el creciente déficit energético que sufre Kazajistán ha llevado a su gobierno a tomar medidas drásticas contra el sector. De hecho, la escasez de electricidad ya ha obligado a algunas empresas a abandonar al país.
Los medios locales también han informado que las autoridades de la nación de Asia Central están considerando quintuplicar el impuesto a la electricidad que se espera que paguen los mineros. Esto, pese a que recientemente Kazajstán introdujo un recargo de 1 tenge (aproximadamente 0,0023 dólares) por kilovatio hora utilizado para minar criptomonedas.
Culpan a la minería digital de aprovecharse de la exención de impuestos
En este momento, la minería de bitcoin y otras criptomonedas está bajo la lupa de las autoridades de Kazajistán. No solo por la deficiencia energética por la que atraviesa el país en la actualidad, sino también porque se acusa a la industria de aprovecharse de las ventajas que ofrece el país para el desarrollo tecnológico.
Bajo el nombre de Astana Hub, el parque tecnológico de Kazajistán ofrece un régimen fiscal especial, infraestructura, soporte de visa y otros beneficios para el desarrollo de proyectos innovadores. Una ventaja que aprovecharon algunas startups enfocadas en la minería digital para instalarse en el país.
Sin embargo, los representantes del Astana Hub han señalado está semana que las empresas mineras de bitcoin u otras criptomonedas no deberían beneficiarse de las bondades que ofrece el país para el desarrollo tecnológico, advirtiendo que el hub no fue creado con ese propósito.
Ahora, incluso se está pensando en cambiar la ley para excluir a las empresas mineras del parque tecnológico de TI Astana HUB, como lo anunció el presidente de su junta Arman Abdrasilov.
Mientras tanto, los grandes mineros de bitcoin, desde enero están buscando salir de Kazajistán, como lo informó CriptoNoticias. Muchos temen que la inestabilidad política que se instaló en el país desde el inicio de 2022, y la amenaza de normas más estrictas, los deje en bancarrota. Es por ello que están evaluando migrar, al menos una parte de su operación, a destinos como EE. UU.