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La bรบsqueda de las criptomonedas del abuelo continรบa.
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Amelia decide volver a la cabaรฑa. ยฟPodrรก encontrarlas?
Ella pasaba todos los veranos en esa cabaรฑa, junto a sus padres y el abuelo. Pescaban en el lago cercano, acampaban, asaban malvaviscos y contaban historias de terror junto a la fogata. Durante algunos dรญas, algunos de sus tรญos y primos se les unรญan. La propiedad no tenรญa mucho de especial: era sรณlo una cabaรฑa de dos pisos. Cuatro habitaciones, dos baรฑos, sala, comedor, cocina, un minรบsculo รกtico. Bien equipada, con una lancha en el muelle de maderaโฆ no mucho mรกs.
Ninguno de sus tรญos apreciaba que estuviera tan alejada de la ciudad, ni tampoco a los mosquitos o los aullidos de los lobos en la noche. Pero a ella le encantaba. Siempre le encantรณ.
No fue hasta sus trece aรฑos que descubriรณ que, ademรกs de ella y su abuelo, quien le leรญa un cuento allรญ todas las noches, en realidad todos sabรญan de su โlugar secretoโ: el pequeรฑo รกtico donde se apilaban algunas cajas en desuso, una alfombra y un par de pufs. Del techo colgaba una sola bombilla que al encenderse iluminaba en un inusual color violeta, dรกndole un aire de misterio a ese rincรณn.
Una vez, quizรกs a sus nueve aรฑos, le preguntรณ a su abuelo porquรฉ esa bombilla tenรญa luz violeta. รl sonriรณ misterioso y dijo que algรบn dรญa se lo dirรญa. No hizo falta. A ella sรณlo le tomรณ unos aรฑos mรกs reconocer el nombre de la marca estampado en uno de los lados del objeto.
Siempre tuvo llaves de la cabaรฑa. Era su refugio. Para escapar un rato de la universidad. Y luego, de su jefe. A veces la encontraba sola, otras el abuelo ya estaba allรญ, escapando tambiรฉn de la ciudad, de la vida. Ambos se sonreรญan en silencio, sin decir nada. Leรญan libros. Armaban una que otra computadoraโฆ
Ninguno habรญa vuelto allรญ tras la muerte de sus padres. Demasiados recuerdos. Ahora, ella tampoco estaba segura de si volverรญa.
*
Buscaron por cada rincรณn de la mansiรณn y revolvieron todas las pertenencias personales de su abuelo, ignorando todas sus protestas indignadas. Querรญan encontrar con desesperaciรณn alguna cartera frรญa, alguna clave en una libreta, algรบn minero viejo empolvado en el sรณtano, algรบn disco duro que aรบn tuviera un remanente de esos primeros BTC del 2010. Lo que sea.
โ ยกSeguro tรบ sabes quรฉ hizo con las criptos! ยฟยกNo es cierto!? โla acusรณ Gregโ ยกNo nos dices nada porque planeas quedรกrtelas!
Le lanzรณ una mirada gรฉlida.
โ A diferencia de ti, yo cambiarรญa todos esos millones por tener a mi familia de vuelta.
No esperรณ rรฉplica. Girรณ sobre sus talones y se alejรณ pasillo abajo, directo a su habitaciรณn en la mansiรณn. Cuando acabaran de registrarla, lo mรกs probable es que la vendieran para repartir el valor entre los cinco. Tendrรญa que quedarse allรญ hasta que lo decidieran para firmar y librarse de ello de una vez por todas, en lugar de hacer todo el proceso mรกs lento y doloroso.
Solo querรญa regresar a su apartamento en la ciudad, a refugiarse con Dylan, su gato, y Sarah, su mejor amiga. No le quedaba mucho mรกs en el mundo. Quizรกs sรญ que tendrรญa que hacerle caso al abuelo y casarse, alguna vez.
La siguiente acusaciรณn fue mรกs bien una amenaza disimulada por parte de Catherine, cuando estaban en la cocina.
โ Amely, somos cinco herederos y papรก no dejรณ establecido quรฉ querรญa hacer con las criptomonedas. Seguramente esperaba que las encontrรกramos en una รฉpica bรบsqueda del tesoro, sabes cรณmo era โsuspirรณ artificial. Si tienes alguna pista, deberรญamos estar unidos para seguirla, Amely. Porque ya sabes, uno solo no puede reclamar todos los fondos cuando son cinco herederos. Los demรกs podrรญan reclamar su parte de forma legal, de todos modos.
Ella apenas se reprimiรณ de rodar los ojos y bebiรณ un poco de su tรฉ antes de contestar.
โ Si es que no los liquidรณ en fรญat, no tengo idea, tรญa โy en realidad estaba siendo honesta.
No estaba segura sobre porquรฉ el abuelo no lo habรญa hecho explรญcito en el testamento, pero, con toda probabilidad, era porque pretendรญa fastidiar desde la tumba a todos sus pretenciosos herederos. Ante el pensamiento, apenas pudo contener una sonrisa.
โ ยฟY quรฉ tal si buscamos en la cabaรฑa, Amely? Quizรกs allรญ sรญ hay pistas, yโฆ
โ Nadie va a tocar esa cabaรฑa โretrucรณ gรฉlidaโ. Siempre fue una cabaรฑa familiar. El abuelo nunca llevรณ ningรบn negocio allรญ y tampoco minaba porque sรณlo hubiera ocasionado pรฉrdidas en esas condiciones. Ya es mรกs que suficiente con que hayan arrastrado todas sus pertenencias aquรญ.
Sin otra palabra mรกs, abandonรณ la estancia.
*
Cuando a las dos semanas no se habรญan rendido, ella decidiรณ hacerlo. Empacรณ sus cosas y volviรณ a su departamento, indicรกndoles que la contactaran sรณlo cuando decidieran vender la mansiรณn.
Pasรณ tiempo con Dylan y con Sarah. Llorรณ el mar que no habรญa llorado, pensando que se habรญa quedado al fin sola, completamente sola en el mundo, con solo las llaves de una cabaรฑa en un bosque lejano que albergaba demasiadas memorias felices como para poder soportar pisarla.
Un mes mรกs tarde, aรบn no se habรญan decidido a vender la mansiรณn. Quizรกs estaban excavando en los terrenos a esas alturas. No le podรญa importar menos. Lo รบnico que le fastidiaba es que seguรญa recibiendo mensajes para โbuscar pistasโ en la cabaรฑa, a la que no querรญa regresar. Sabรญa que un guardabosque cercano cuidaba de ella, y su abuelo habรญa arreglado que continuara haciรฉndolo aun tras su muerte. No la tendrรญa en completo abandono, pero no se sentรญa lista para volver.
Sarah acabรณ ofreciรฉndose para acompaรฑarla, porque, segรบn sus palabras, โno era saludable huir de sus propios recuerdosโ.
Apenas pisรณ las tablas y vio las fotos de gente feliz enmarcadas sobre la chimenea pensรณ que era una pรฉsima idea. Pasรณ todo el dรญa muy silenciosa, recorriendo con ojos pesados los pasillos, habitaciones y escaleras. No durmiรณ muy bien es anoche, sintiรฉndose en casa y en el infierno al mismo tiempo.
No fue sino a los tres dรญas que se atreviรณ a pisar el รกtico, tras mรกs de siete aรฑos de ausencia. Le pareciรณ viajar en el tiempo. Todo estaba igual: las cajas inรบtiles, el tragaluz, la alfombra roja, los puffs verdes. El bombillo que aรบn encendรญa en violeta.
El bombillo, claro. Sonriรณ con tristeza, mirando la inusual luminosidad. Sus padres habรญan muerto, el abuelo habรญa muerto. Arrastrรณ hasta allรญ una escalera para alcanzarlo y desenroscarlo del casquillo. La luz violeta se apagรณ y ella lo sintiรณ como un homenaje, un silencio ante sus pรฉrdidas. Asรญ podrรญa guardarlo, quizรกs, aunque no fuera un bombillo comรบn.
Sabรญa que era un dispositivo curioso para minar unas cuantas fracciones de BTC mientras permanecรญa encendido. Al final, el abuelo nunca le habรญa contado cuรกnto habรญa logrado sacarle. No le cabรญa duda que lo habรญa comprado por pura diversiรณn.
Al fijarse de nuevo en la alfombra, notรณ algo que no estaba allรญ antes: una memoria USB. Era plana y muy pequeรฑa y, quizรกs, sรณlo quizรกs, se habรญa caรญdo de alguna parte cuando desenroscรณ el bombillo. Contuvo el aliento y cerrรณ los ojos unos segundos, sabiendo lo que podรญa implicar.
Cuando vio en la interfaz personal de su brazalete cรณmo le pedรญa el nombre de su primer CryptoKitty antes de mostrarle el contenido, supo con certeza lo que se venรญa. Y dudรณ, pero la abriรณ de todos modos.
Amelia. Te he heredado legalmente esta cabaรฑa y todos sus contenidos, incluyendo esto. Sรฉ que lo que dirรกs: bullshit. No soy yo, no son tus padres ni un hermano secreto y tampoco una cita adecuada, asรญ que, en realidad, lo sรฉ, mi regalo apesta. Piensas que te has quedado sola y no sabes cuรกnto lo lamento. Pero no lo estรกs, Amy. Siempre estaremos contigo. Siempre.
Asรญ que toma estos bitcoins de 2010 y demรกs y compra muchas pizzas mรกs cada mayo. Ve con tus amigos, ve con tus citas, ve con el maldito gato. No te deshagas de ellos, Amy, son mi relicario para ti. Son casi coleccionables, vamos, bitcoins de 2010. Quiero que sรณlo tรบ los tengas. Sรฉ que les darรกs un buen uso, quizรกs incluso mejor que el que yo hubiera podido darles.
No son gratis, son una responsabilidad. Me gustarรญa Amy, que tomaras la direcciรณn de DeskBlock en su etapa descentralizada. Sรฉ que no hay nadie mรกs capacitado que tรบ. Sรฉ que aรบn puedes hacer cosas enceguecedoras por el mundo. Las verรฉ, desde donde estรฉ.
Nunca olvides cuรกnto te quiero Amy, en este o en otro mundo. Y sรญ, lo escribirรฉ, porque quรฉ diablos: un gran poder conlleva una gran responsabilidad. Ja.
ยฟSabes cuรกnto logrรณ minar la bombilla al final, durante todos estos aรฑos? 4 BTC. No estรก tan mal. Aquรญ estรกn las llaves, junto a todas las demรกs carteras.
No necesitas suerte. Tienes la capacidad.
Sus tรญos iban a intentar estrangularla cuando se enterasen, pero no podrรญan hacer mucho mรกs. Sonriรณ entre lรกgrimas. Quizรกs podrรญa ordenar alguna pizza con drones de entrega para esa noche y compartirla con Dylan y con Sarah, que seguรญan abajo. Al dรญa siguiente deberรญa planear su llegada a DeskBlock.
Tenรญa trabajo que hacer. Despuรฉs de todo, la estaban observando.
Descargo de responsabilidad:ย Esta es una obra de ficciรณn. Los nombres, personajes, empresas, organizaciones, lugares, acontecimientos o hechos que aparecen en la misma son producto de la imaginaciรณn del autor o bien se usan en el marco de la ficciรณn. Cualquier parecido con personas (vivas o muertas) o hechos reales es pura coincidencia.