A mediados de este mes, la fiscalía de la ciudad de Łódź en Polonia anunció que ha iniciado una investigación sobre el cierre de la casa de cambio Bitcurex establecida en 2012, una de las más antiguas en cambios de Bitcoin y otras criptomonedas en el país y el resto de Europa.
A inicios del mes pasado y después de algunos presuntos ataques, esta compañía cerró su página web e inmediatamente después de la clausura los dueños de Bitcurex desaparecieron sin dar explicaciones con alrededor de 2.300 bitcoins provenientes de las carteras de sus usuarios.
A pesar de que ante este evento las autoridades advirtieron que era muy poco probable que los usuarios recuperasen sus fondos, ahora se abre una nueva esperanza para ellos. Así lo declara el comunicado de la entidad polaca:
Las personas afectadas que no han presentado aviso de ofensa pueden enviar dichas notificaciones directamente a la Oficina Fiscal de Łódź. Los avisos escritos deben, en lo posible, estar acompañados por copias de los documentos disponibles o impresos que confirmen el monto de las pérdidas incurridas.
Oficina Fiscal del Distrito de Łódź, Polonia
Los documentos mencionados deberían corroborar, si existen, la suma del daño sufrido, es decir, saldo de en criptomonedas o confirmaciones de transferencias realizadas por medio de la plataforma de Bitcurex.
De tal manera, la fiscalía afirmó en dicho comunicado que está investigando el caso por sospecha de delitos contra la propiedad de terceros; debido al hecho de que no hubo explicación o anuncio alguno tras su repentino cierre, el cual privó a los usuarios del acceso a sus fondos. Bitcurex solía manejar también criptomonedas como Dash y Litecoin en toda Europa, por lo que la cantidad de dinero extraviada es bastante significativa.
Anteriormente, en octubre de 2016, la casa de cambio dijo a medios locales que su sistema de IT estaba «dañado por una interferencia externa» lo que dio como resultado la pérdida de una parte de sus activos totales, que se traduce en unos 1.5 millones de dólares. Sin embargo, tras su desaparición, estas afirmaciones se vuelven tan sólo la versión de sus administradores.
Cabe destacar que Bitcurex, para el momento de los presuntos fallos, había prometido una investigación a fondo y la restitución de las pérdidas de sus clientes en una semana, cosa que nunca cumplió. Entonces no hubo asesoría legal disponible, pues la compañía no era responsabilidad del estado; pero ahora, con la fiscalía de la ciudad tomando cartas en el asunto, nos queda por ver si se hará justicia para los usuarios afectados en este caso.
Imagen destacada por Junial Enterprises / stock.adobe.com