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Zócaro cree que las promesas de Trump impulsan la adopción global de bitcoin.
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Dubove y Ferrari son críticos de la idea de crear reservas estatales de bitcoin.
El 20 de enero, Donald Trump regresa a la Casa Blanca como el 47.º presidente de EE.UU., prometiendo convertir al país en un bastión de Bitcoin (BTC). Esta declaración ha capturado la atención de los bitcoiners de todo el mundo. Muchos esperan que, al asumir el mando, impulse una versión digital del Sueño Americano para el mundo de las criptomonedas. Es por ello que CriptoNoticias recogió las opiniones de bitcoiners argentinos, habitantes de un país que ha vivido tanto sueños como pesadillas económicas.
Durante su campaña, Trump hizo un total de 10 promesas relacionadas con el sector de los activos digitales. Entre ellas, prometió convertir a la moneda digital en parte de la reserva nacional de Estados Unidos, así como una regulación favorable que permita el crecimiento de la industria. Son temas que discuten bitcoiners y otras comunidades en varias partes del planeta.
En Argentina, la comunidad que gira en torno a las criptomonedas se debate entre la esperanza y la incertidumbre ante la llegada de un presidente en Estados Unidos que se muestra amigable con los activos digitales. La pregunta en el aire es si esto se convertirá en un sueño o en una pesadilla financiera.
Marcos Zócaro, profesor universitario y miembro de la ONG Bitcoin Argentina, comenta: «Claramente, este cambio de tendencia favorece la adopción de bitcoin, no solo en Estados Unidos, sino a nivel global». Según él, estas promesas no solo incentivan a otros países a pensar en reservas estratégicas de la moneda digital pionera, sino que también desatan una «carrera por bitcoin» donde nadie quiere quedarse rezagado.
Adam Dubove, emprendedor, columnista y activista libertario, es optimista sobre el impacto de una reserva de bitcoin en EE.UU., afirmando que: «La creación de una reserva de bitcoin por parte de Estados Unidos impulsaría la demanda y empujaría el precio del activo para arriba».
Sin embargo, Dubove se muestra crítico respecto a cómo se financiaría esta iniciativa: «Nunca promovería que el gobierno compre bitcoin con dinero que es expoliado a sus ciudadanos». Su visión ideal sería una disminución del gasto público y los impuestos, agregando que una regulación amigable podría ser beneficiosa.
Sobre el potencial impacto en América Latina, Dubove es claro: «Si Trump cumple sus promesas, podría influir a mucha gente a adoptar bitcoin como estrategia de ahorro», anticipando un efecto de «comportamiento de manada», especialmente entre los jóvenes seguidores de Trump en el continente.
Por su lado, Zócaro señaló que la influencia que podría tener Trump en Latinoamérica en cuanto a políticas de Bitcoin dependerá de las medidas regulatorias concretas que se implementen. «Si se adoptan medidas más favorables hacia la minería, el comercio y la tenencia de bitcoin en EE.UU., se podría generar una presión para que los países de América Latina aceleren su adopción», explicó, subrayando el impacto que esto podría tener en la economía global.
El caso de Argentina bajo Javier Milei
Las políticas de Trump podrían tener un eco particular en Argentina, donde Javier Milei, un presidente conocido por su ideología libertaria y sus inclinaciones pro-bitcoin, lidera el país. Sin embargo, la implementación de una reserva de bitcoin en Argentina bajo Milei enfrenta escepticismo:
Dubove explica:
«No creo que en el corto plazo haya alguna propuesta de ese estilo. Básicamente, todo el ahorro que logra el gobierno argentino a través del superávit fiscal está orientado al pago de la deuda de corto plazo, por lo que no veo factible que se almacene ese dinero en bitcoin, mientras que las deudas están denominadas en dólares. Normalizada esta situación, espero que el superávit fiscal se traduzca en una baja impositiva y no sea asignado para comprar bitcoin. En el caso de Argentina, creo que sería muy desfavorable que el presidente impulse una reserva de bitcoin; estaría contradiciendo su filosofía e ideas políticas y podría poner en riesgo su credibilidad».
Adam Dubove, columnista y activista libertario argentino.
Zócaro tampoco cree que el presidente Javier Milei impulse una reserva de bitcoin. Y aunque reconoce el perfil liberal y pro-innovación del gobernante argentino, cuestiona su conocimiento profundo sobre Bitcoin: «No sé cuánto conocimiento profundo tenga de Bitcoin.» Añadió que, aunque la relación cercana con Trump podría influir, la posibilidad de que Argentina proponga un tesoro nacional en BTC en el corto plazo es baja, especialmente considerando el contexto electoral y la necesidad de mayor educación sobre el tema entre los sectores políticos y la población.
«Quizá no sea bien vista por diversos sectores políticos», concluyó Zócaro, indicando que aún hay un largo camino por recorrer en términos de educación y aceptación de Bitcoin en Argentina.
El otro lado de la moneda de las reservas en bitcoin
El también argentino Manuel Ferrari, conocido por su defensa de Bitcoin, ofreció una visión matizada sobre las promesas de Donald Trump de acumulación de la moneda digital para las reservas de Estados Unidos, destacando las implicaciones tanto positivas como problemáticas de tal política.
Ferrari manifestó «sentimientos encontrados» sobre la idea de que los Estados soberanos acumulen reservas en bitcoin. Desde una perspectiva especulativa, ve un beneficio claro: «Si más Estados comienzan a utilizar Bitcoin como reserva de valor, esto incrementaría su demanda, dada la oferta limitada de la moneda digital. «El activo se apreciaría», lo cual es atractivo para aquellos que poseen bitcoin. Sin embargo, su visión liberal y libertaria le lleva a oponerse a esta idea.
Según Ferrari, la compra de bitcoin por parte del Estado solo puede financiarse de dos maneras perjudiciales: «cobrando impuestos, lo cual considero un robo a los ciudadanos, o emitiendo dinero fiduciario sin respaldo». En ambos casos, el resultado es la centralización de un activo que debería ser descentralizado, poniendo el control de bitcoin en manos del Estado.
Si los Estados realmente tuvieran excedentes, lo lógico sería reducir los impuestos y permitir que la economía se autorregule. La idea de que el dinero fíat necesita reservas es una falacia: ni el dólar en Estados Unidos ni el peso argentino tienen respaldo alguno. Las reservas no son más que un instrumento para manipular tasas y políticas monetarias, algo que solo beneficia a la burocracia estatal y no al mercado ni a los individuos».
Manuel Ferrari, bitcoiner argentino y cofundador de Money On Chain.
En su conclusión, Ferrari subraya que «la intervención del Estado en la gestión de bitcoin no tiene sentido». Enfatiza la superioridad de una economía libre y descentralizada sobre cualquier forma de control centralizado, ya sea por la Reserva Federal de Estados Unidos o cualquier otro banco central.
Las promesas de Trump han encendido un debate en Argentina, con puntos de vista que varían desde el optimismo hasta la crítica severa. Bajo el liderazgo de Milei, la posibilidad de seguir el ejemplo de EE.UU. parece remota, pero no imposible.
En este nuevo contexto político, los argentinos se muestran convencidos de que navegar las promesas de Trump solo añadiría más complejidad a su panorama económico.