Biomasa, madera sólida e incluso pasta celulosa podrían quedar registradas en una blockchain que estará al servicio de la industria maderera española. El equipo del proyecto ChainWood, iniciativa transnacional de las agencias gubernamentales españolas y de empresas privadas, está trabajando en la constitución de un software que funcionará con tecnología de criptoactivos en la cadena de suministro de productos forestales de España.
Según datos de la prensa española, ChainWood es un proyecto liderado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 80% del proyecto ha sido financiado con dinero del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER), auspiciado por la Dirección General de Desarrollo rural y Política Forestal de España, y un 20% por parte de la Administración General del Estado, logrando ofrecer unos 93.530 euros para el desarrollo del proyecto.
La iniciativa conglomera ocho socios de la industria maderera de Galicia, Madrid, Castilla y León, Andalucía y Asturias, destacando entre ellas asociaciones forestales, centros tecnológicos especializados en recursos forestales, empresas TIC e industrias transformadoras; contando incluso con el apoyo de representantes internacionales como la empresa finlandesa Risutec especializada en maquinaria para la explotación forestal.
En este sentido, ChainWood es una iniciativa pensada en la industria de la madera, la cual busca aplicar tanto las tecnologías de criptoactivos como otras herramientas tecnológicas innovadoras —tales como Big Data y learning machine—con miras a reducir los cotes de productos, mejorar la eficiencia de las redes de información y brindar mayor transparencia a la cadena de suministro española.
Para ello, el proyecto ya ha liderado dos reuniones de trabajo en Santiago de Compostela y Madrid, así como se encuentra trabajando en el diseño y redacción de una propuesta concisa de la herramienta.
Asimismo, se planea que en una segunda fase de ChainWood que los participantes empiecen a ejecutar el proyecto y desarrollar el software, el cual será probado en versión piloto en tres oportunidades en las ciudades de Castilla y León, Asturias y Galicia, con materiales como el chopo, el castaño y el roble respectivamente.
Todo por la transparencia
El punto focal de ChainWood es solucionar las limitaciones que tiene la cadena de suministro nacional para el acceso de información, rapidez de entrega de productos y transparencia en los precios e información que fluye en el mercado. De esta manera, según datos nacionales, de aplicarse esta tecnología los productores podrían recibir mejores ofertas de mercado e información en tiempo real.
Asimismo, las empresas de explotación podrán gozar de productos mucho más baratos —ya que se ahorrarían costes de traslado y logística—, así como mejoras en el trasporte de los materiales, como aspira la compañía y sus asociados. En cuanto a las empresas de logística, las mismas dispondrán de información para monitorear el transporte de los productos en tiempo real desde una plataforma, permitiendo así optimizar el transporte de los mismos.
Por último pero no menos importante, las agencias gubernamentales también se verían beneficiadas de la aplicación del software de criptoactivos, ya que podrían disponer de información mucho más precisa y transparente acerca de la proveniencia de la materia prima, su transformación y la posterior venta de los productos; agilizando así los procesos de control.
Sin embargo, por más que las empresas nacionales y el gobierno español están tras la búsqueda de una mayor confiabilidad y trasparencia en las cadenas de suministro, no se ha especificado que tipo de blockchain será aplicada en el sistema interno de la industria maderera española, una información vital para constatar cuan transparente podría ser este sistema.
Las blockchain que poseen nodos federados siguen siendo muy populares entre las empresas privadas y las autoridades gubernamentales, llevando la tecnología de criptoactivos al modelo de negocios tradicional. No obstante, este tipo de adaptación, aunque resulta beneficiosa por las facilidades que ofrecen los sistemas a sus clientes, no brindan el nivel de seguridad y transparencia que sí pueden otorgar Bitcoin, como sistema de registro contable, por ejemplo.
Dependiendo de cuántos individuos y entidades participen en la blockchain activamente validando la información que se registra en la misma, se puede constatar que los datos son o no fidedignos. Si los registros quedan en mano de una sola entidad o grupo —ya sea empresa o Estado— es mucho más difícil comprobar si toda la información es certera y que no haya faltas en las mismas. Las blockchain que poseen nodos privados no son especialmente confiables aunque la información que validen en la cadena de bloques sea de acceso público.
En caso de los registros estén en las manos del productor, las empresas de mediano y gran tamaño, las agencias forestales y las entidades gubernamentales, entonces se podría constatar que la información se encuentra distribuida, compartida y verificada de forma colectiva, así como aprobada por consenso. Una característica que genera mayor confiabilidad en los datos que se suministran por su validación en tiempo real y de forma distribuida.
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