-
Algunos argentinos se convierten en revendedores de Worldcoin para obtener ingresos extra.
-
Coleros trabajan con revendedores para convertir tokens WLD a efectivo.
Ante los elevados costos de vida en Argentina, los ciudadanos buscan nuevas formas de obtener ingresos adicionales, y una de las opciones que surge hoy día, es convertirse en revendedores de Worldcoin (WLD). Estas personas se quedan con cuentas de criptomonedas (previamente registradas con escaneo de iris) y de los tokens contenidos en ellas, obteniendo ganancias de manera rápida y sin grandes esfuerzos.
Los revendedores trabajan en equipo con los coleros, quienes se encargan de hacer las filas o colas por otras personas en los puntos establecidos por Worldcoin en distintas zonas de Argentina. Estos revendedores guían a las personas para que escaneen sus iris utilizando un teléfono móvil que le han proporcionado.
Una vez completado el procedimiento, el revendedor entrega una suma de dinero a través de sus cuentas bancarias o pago en efectivo a la persona que ha escaneado su iris. Esto, a cambio del monedero con los tokens de Worldcoin.
Luego, el revendedor negocia un pago con el colero responsable de hacer la fila por quienes van a escanear sus iris. Todo esto como procedimiento final de un acuerdo que le permitirá al revendedor recibir los 3 tokens que Worldcoin transfiere a sus usuarios cada 15 días. Se trata de una renta básica que el proyecto de Sam Altman pretende entregar a todas las personas en el planeta.
De esta manera, ambos modelos, revendedores y coleros, sacan provecho de la vulnerabilidad de las personas que buscan ingresos extra a través de Worldcoin, generando un debate ético sobre la explotación de la necesidad en tiempos de crisis económica.
Sin embargo, operar de este modo no es ilegal en Argentina, aunque es de tener en cuenta que los revendedores están en la mira de organismos como la Comisión Nacional de Valores (CNV) y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Así lo afirma Sebastián Domínguez, director de SDC Asesores Tributarios, quien advierte que los revendedores de los tokens WLD pueden ser obligados a pagar impuestos. Esto sucede porque si se transfiere montos elevados y no se justifican, a través de sus cuentas bancarias, entonces pueden surgir problemas con la AFIP.
Se debe a la Resolución General 5512/2024, vigente desde el 1° de junio, la cual indica que el monto mínimo a partir del cual las entidades deben alertar al organismo es de 700.000 pesos (770 dólares estadounidenses).
Se aclara además que, las entidades cruzan información de forma automática, por lo que, si un revendedor de Worldcoin no está registrado como contribuyente, el banco puede retener o rechazar las transferencias y pedir que se justifique el origen de los fondos. También es posible que cierre la cuenta y cree un Reporte de Operación Sospechosa (ROS) ante la Unidad de Información Financiera (UIF).
Todos estos nuevos mecanismos forman parte de la normativa establecida por los reguladores y aprobada el pasado mes de marzo. Basado en ello, fue modificado el Código Penal para introducir la figura de un registro de proveedores de servicios de criptomonedas en el que deben estar inscritas todas las empresas y personas que se dediquen al comercio de activos virtuales.
Mientras tanto, Worldcoin continúa su avance en Argentina, pese a que el proyecto de criptomoneda sigue generando polémica. Como lo reportó anteriormente CriptoNoticias, hay quien califica de “ciberperonista” a la iniciativa liderada por Sam Altman y en Perú dicen que escanear el iris “es como vender tus órganos”.