-
Las CBDC y mejoras en sistemas de pago “continúan siendo un área de enfoque exploratorio” del BIS.
-
El BIS busca “desarrollar nuevos bienes públicos tecnológicos para bancos centrales”.
El Banco Internacional de Pagos (BiS, por sus siglas en inglés), tiene como meta para este 2022 avanzar en los proyectos de tecnología regulatoria y de supervisión de las transacciones que se realicen con activos digitales, como bitcoin (BTC) y el resto de las criptomonedas.
El Banco, con sede en Suiza, comunicó en una nota de prensa que, para este año, el Grupo de Innovación (o Innovation Hub), que busca desde «identificar tendencias en las tecnologías financieras que sean relevantes a los bancos centrales», lanzará, además, nuevos proyectos de monedas digitales de banco central (CBDC, por sus siglas en inglés). Asimismo, planean establecer sistemas de pago de próxima generación y finanzas descentralizadas (DeFi).
Según la institución, buscan «desarrollar nuevos bienes públicos tecnológicos para bancos centrales», al tiempo en que apuntan a proyectos de finanzas verdes y seguridad cibernética.
Este año marca una nueva fase en la expansión del Innovation Hub, con los primeros proyectos en los centros London y Nordic Hub; la esperada apertura de los centros del Eurosistema y de Toronto; y el avance de la asociación estratégica con el Sistema de la Reserva Federal.
Banco Internacional de Pagos.
Según el director del Banco, Agustín Carstens, con la red ampliada de centros y los proyectos por ponerse en marcha este año, proveen una «posición más sólida para innovar de manera sólida y sostenible, aprovechando los beneficios de la tecnología digital, sirviendo al interés público y trabajando en cooperación con el banco central, la comunidad, la academia y el sector privado».
El banco destaca que las CBDC y las mejoras en los sistemas de pago «continúan siendo un área de enfoque exploratorio», representando, según dicen, 13 de los 17 proyectos actualmente activos o que están por ser desplegados durante el 2022.
El Banco Internacional de Pagos, también, prevé llevar adelante varias iniciativas del Grupo de los 20 (G20) para «mejorar los pagos transfronterizos globales», a través de la evaluación de las «complejidades prácticas y tecnológicas involucradas en la implementación de diferentes acuerdos de múltiples CBDC».
Los proyectos
El BIS detalló los proyectos que próximamente se llevarán adelante. Uno de ellos es el Rio, que explorará cómo los bancos centrales pueden usar la transmisión de datos para vigilar los mercados electrónicos.
La primera fase construye un prototipo que recopila y procesa grandes cantidades de datos de divisas en tiempo real. En la siguiente, el equipo diseñará un tablero de usuario «listo para producción».
Otro proyecto, de Suiza, se une al Banco Central de ese país, «también compilando las lecciones aprendidas de dos CBDC, Helvetia II y Jura». Luego, analizarán proyectos relacionados con CBDC que podrían usar Arena, una blockchain privada que se está construyendo como un campo de pruebas para los bancos centrales de ese país.
El proyecto Ellipse construye una plataforma que ayudará a los reguladores financieros a extraer, consultar y analizar digitalmente los datos de varias fuentes, «incorporando inteligencia artificial y aprendizaje automático».
En Singapur, por su parte, se mantiene la investigación de plataformas de liquidación compartida de varias CBDC, a través del proyecto Dunbar. En una segunda fase, prevén interconectar los sistemas de pago activos en ese país, además de Malasia e Italia.
En Hong Kong, un proyecto que abarca a las DeFi buscará saber si pueden mejorar el financiamiento para las pequeñas y medianas empresas, «un segmento de mercado históricamente desatendido», en palabras del Banco Internacional de Pagos.
En Londres, Reino Unido, evaluarán cómo las personas y las compañías se pueden beneficiar de las CBDC. Esto, mediante un proyecto que permitirá el desarrollo de soluciones de pago actualizadas, «que se pueden liquidar de forma rápida y económica con dinero del banco central».
Y un segundo proyecto, precisan, desarrollará una plataforma que admita aplicaciones que las personas y las empresas puedan usar para almacenar, transferir y pagar con CBDC a comerciantes minoristas.
Por último, en el Centro Nórdico habrá proyectos que buscarán demostrar cómo se puede utilizar una visión holística de los datos de pago para «detectar actividades ilegales», como el lavado de dinero, la evasión de impuestos y el financiamiento al terrorismo.
Otro de ellos, precisa, investigará las demandas de seguridad y resiliencia «y las soluciones que permiten que las CBDC se utilicen sin conexión».
BIS ya ha llamado a la regulación este año
El Banco Internacional de Pagos ya ha pedido la regulación de bitcoin y el resto del ecosistema este mismo año. Hace unos días, CriptoNoticias reportó las declaraciones de Agustín Carstens, el presidente de la organización, quien explicó que el dinero digital «no debe basarse en el anonimato sino en la identificación y la confianza».
Durante su participación en un foro, el banquero destacó que «dondequiera que se emitan monedas estables privadas, deben estar adecuadamente reguladas para hacer frente a los riesgos que plantean, como corridas, riesgo del sistema de pago y concentración del poder económico».
Así, el BIS confirma que este año avanzará en su intención de promover una regulación al mercado descentralizado, al tiempo en que buscan incentivar el desarrollo del dinero digital soportado en la confianza que, se supone, debe emanar de los Bancos Centrales.