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La policía asegura que es la mayor incautación de equipos de minería hecha en el país.
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Las máquinas estaban en una fábrica abandonada en Teherán.
Las autoridades iraníes confiscaron 7.000 equipos de minería de Bitcoin, que se encontraban operando, de manera ilegal, en una fábrica abandonada al oeste de la capital, Teherán.
Hasta los momentos, la policía iraní considera que esta es la mayor incautación de este tipo realizada hasta ahora, según la agencia informativa Reuters.
La acción de las fuerzas de seguridad va en concordancia con la prohibición temporal de la actividad minera de Bitcoin, anunciada por el presidente iraní Hassan Rouhani, el pasado 26 de mayo y reportada por CriptoNoticias.
La medida corresponde a que la industria minera está interfiriendo con el sistema eléctrico nacional, de acuerdo a lo explicado por el mandatario.
Aunque las autoridades culpan a la minería de Bitcoin por los constantes cortes de electricidad, también se podría deber a la prolongada sequía que vive el país y al aumento en la demanda de energía debido al verano.
De acuerdo a un estudio de la Universidad de Cambridge, en el 2020 la nación persa se encontraba en el sexto puesto del ranking de la tasa de hash a nivel global.
Más regulaciones a bitcoin y al trading con criptomonedas
Otras acciones tomadas por parte del Gobierno de Irán, apuntaron hacia regular el uso de bitcoin y el trading de criptomonedas, tal como informó CriptoNoticias.
A principios de junio, Rouhani aseguró que era necesario preservar y proteger los intereses nacionales de su país ante la expansión que experimentan los activos digitales.
«Para legalizar la actividad de las criptomonedas y proteger el capital de la gente en este campo, debemos pensar en una solución lo antes posible y establecer y comunicar las leyes e instrucciones necesarias», expresó el mandatario.