El Banco Central de Nigeria (BCN), organismo regulador financiero del país, advierte a los ciudadanos interesados en las criptomonedas que las inversiones en activos digitales no están reguladas por la entidad bancaria, razón por la cual los participantes no están protegidos por la ley.
La circular publicada por la entidad bancaria asegura que ningún tipo de comercio relativo a las criptomonedas -mencionando como ejemplo a “Bitcoin, Ripple, Monero, Litecoin, Dogecoin, Onecoin”- poseen respaldo; ni las casas de cambio digitales como la nigeriana NairaEx cuentan con licencia de operación.
La aclaratoria del BCN, que asevera que las criptomonedas carecen de regulación «en todo el mundo», tiene lugar para establecer de forma expresa que las pérdidas ligadas a inversiones con activos digitales son responsabilidad del participante.
Es importante tener en cuenta que esta advertencia viene alineada a la solicitud realizada por el congreso del país africano, quienes solicitaron formalmente se establecieran medidas educativas para advertir a los ciudadanos sobre “los peligros” de invertir en bitcoin. Además de investigar el auge de las monedas digitales en Nigeria.
Además, de la prohibición de uso de criptomonedas a todos los bancos e instituciones financieras nacionales por el BCN, en asociación con la Comisión de Garantía de Depósitos (NDIC).
La advertencia del Banco Central, al igual que la del Congreso, están vinculadas a la proliferación de estafas que ocurrieron en el país durante el año 2016. Nigeria se ha visto sumergido en esquemas ponzi, como el Mavrodi Mondial Moneybox (MMM), que concluyeron en investigaciones de la Comisión del Mercado de Valores de Nigeria. Investigación paralela a la advertencia emitida por la Comisión para alertar sobre “los esquemas fraudulentos” OneCoin y SwissCoin.
Las autoridades nigerianas han estado investigando cómo regular el comercio de criptomonedas desde septiembre de 2017, año en el que las criptomonedas se apuntalaron como una alternativa para afrontar el complejo panorama económico de Nigeria; país que enfrenta altos índices inflacionarios y sufrió fuertes golpes tras el desplome del precio del barril de petróleo.