Oleg Safonov, jefe de la Agencia Federal de Turismo (AFT) de Rusia, no tiene dudas de que la tecnología blockchain producirá un fuerte impacto en el mercado turístico en los próximos 5 o 10 años. Así lo hizo saber recientemente, durante el segundo día del Foro Kazán de Turismo, evento que se realiza cada dos años en la ciudad homónima y que reúne a expertos mundiales en ese campo.
De acuerdo con un reporte del portal ruso Tass, para Safonov, la industria turística se encuentra al borde de grandes cambios junto con el surgimiento de las nuevas tecnologías digitales, en especial, la blockchain, que puede ser usada para “mejorar la calidad del servicio a los turistas”.
En palabras del jefe de la AFT:
Las tecnologías que se están creando actualmente permiten a los turistas y consumidores trabajar directamente con los proveedores (de servicios) eliminando todos los intermediarios. Esto hace que el producto sea de mejor calidad, menos costoso y también aumenta la responsabilidad del proveedor sobre el producto.
Oleg Safonov
Jefe
En octubre pasado, el vice primer ministro ruso de industria y energía, Arkady Dvorkovich, ya había mencionado que Rusia estaba estudiando de cerca la experiencia de Japón en el campo de la tecnología blockchain y que los llamados contratos inteligentes servirían para bajar los costos de las transacciones. En ese mismo mes, el gobierno ruso lanzó un programa piloto para probar esta tecnología en el registro de tierras e incluso adelantó los primeros lineamientos para implementar el manejo de criptodivisas e ICO en el sector financiero del país.
Usar la blockchain en la industria de turismo de la nación potenciaría sectores como Tartaristán, que Safonov destacó como una de las regiones económicamente más desarrolladas de la Federación Rusa, con alta popularidad entre los turistas rusos y extranjeros.
Mientras se producen los avances tecnológicos, Rusia ve buenos números en su afluencia de turistas. El jefe de la AFT recordó que la república es de particular interés puesto que será sede de la Copa Mundial de la FIFA 2018 y tuvo un excelente verano al ser anfitriona de la Copa Confederaciones, lo que generó un flujo abundante de turistas en Kazán.
Asimismo, no descartó el potencial de esta ciudad como ámbito de interés para el turismo religioso, sobre todo para los practicantes del Islam, debido a que en el territorio de Tartaristán poseen numerosos monumentos dedicados a la cultura islámica.