A pesar de su juventud, la tecnología de la cadena de bloques (blockchain) que fue ideada para sostener a la primera criptomoneda, el bitcoin, ha traspasado por mucho su función original. Y tanto potencial, por supuesto, necesita de una adecuada guía. Esta es la conclusión a la que llegaron 14 de los más importantes ejecutivos relacionados a la blockchain, quienes se reunieron entre el 24 y el 26 de agosto en una plataforma abierta para «la colaboración, educación e innovación» de esta tecnología.
El llamado Grupo Muskoka, entre cuyos participantes figuran los más altos líderes de La Cámara Digital de Comercio, The Hyperledger Project, YouBase Inc., Bloq, The BitFury Group, New America y Linux Foundation, tuvo su primer taller este mes en Muskoka, Canadá, gracias al emprendimiento de Don Tapscott, CEO de The Tapscott Group, y su hijo Alex, CEO de Nortwest Passage Venture.
Ahora, tras las deliberaciones de este encuentro, el grupo ha publicado su primer informe sobre las acciones que planean tomar y las recomendaciones que elevan al gobierno, la industria y la sociedad en general con respecto a la utilización de la tecnología blockchain. En primer lugar, resalta la frase de uno de los participantes, pues parece el lema de esta iniciativa: «Descentralización no es lo mismo que desorganización».
A continuación, en general, el Grupo Muskoka admite el potencial aún oculto de la Blockchain y la necesidad de una investigación mucho más profunda al respecto. Y como plan de acción se propone difundir una campaña para ayudar a superar ideas erróneas sobre esta tecnología, apoyando para ello a la Blockchain Trust Accelerator, una organización creada por New America, el Instituto Nacional Democrático y The BitFury Group. Del mismo modo, planean lanzar un Blockchain Hub a través del Global Solutions Network Program (GSN), el cual permitirá conducir una investigación para «inventariar, clasificar y analizar el sistema blockchain actual», con el fin de identificar las estrategias más adecuadas para su desarrollo.
Más allá del sólo conocimiento, también tienen la intención de diseñar un plan de trabajo para los líderes de distintos gobiernos, introducir cursos y proyectos Blockchain en las universidades por medio de la Fundación Linux, apoyar a la Cámara Digital de Comercio en su labor de moldear una reglamentación relacionada, y explorar el lanzamiento de una investigación profunda sobre el blockchain en cadenas de suministro, seguimiento de activos y comercialización.
Finalmente, la última conclusión del Grupo Muskoka es mantener su colaboración para lograr, durante los años venideros, extraer el máximo provecho a la Blockchain sin caer en la inestabilidad que ciertamente ha acompañado en sus inicios a la idea de la descentralización.