Hechos clave:
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La granja minera se mantuvo operativa por más de un año en el hospital donde fue instalada.
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Se estima que esta granja produjo ganancias de más de USD 16.000 en bitcoins.
Autoridades rusas descubrieron una granja de minería de Bitcoin clandestina en las instalaciones de un hospital que funcionaba como centro de atención para pacientes con COVID-19.
El jefe de seguridad informática del Hospital Republicano de Gorno-Altaisk, al sur de Rusia, instaló un conjunto de equipos mineros de Bitcoin en su sitio de trabajo, que mantuvo operativos por más de un año. El empleado hizo esto de forma ilegal, por lo que ahora se encuentra privado de libertad y enfrenta cargos que le podrían costar hasta dos años en prisión.
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De acuerdo con fuentes locales, el susodicho pudo recaudar más de 1 millón de rublos, equivalentes a unos USD 16.600, durante el tiempo que estuvo minando a expensas de la electricidad del hospital donde laboraba. La cifra que recaudó el minero da a entender que no se trataba de una granja grande, sino algo modesto que, además, le permitiera pasar desapercibido en su lugar de trabajo.
La relación del Gobierno de Rusia con Bitcoin no ha sido la más estable a lo largo del tiempo. En la actualidad hay dos perspectivas que conducen hacia direcciones distintas en lo que a adopción de Bitcoin se refiere. Por un lado, como reportó CriptoNoticias, el uso de Bitcoin para pagar bienes y servicios está prohibido en territorio ruso. A pesar de ello, la minería de Bitcoin se está abriendo paso, tanto a nivel industrial como doméstico.
