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Desde su puesta en marcha, a fines de 2023 hasta fines de septiembre de 2024, procesó 71 bloques.
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El aumento de la tasa de hashrate de OCEAN coincidió con la implementación de su protocolo DATUM.
Desde que comenzó el 2025, el pool de minería de Bitcoin (BTC) OCEAN procesó exitosamente 51 bloques.
El 18 de marzo, ese pool, que emplea el protocolo de minería DATUM (en castellano significa “Plantillas Alternativas Descentralizadas para Minería Universal”) encontró sus últimos bloques en la red creada por Nakamoto, a la altura 888418 y 888283, consumando un total de 8 bloques en los últimos 7 días. Esta información se extrae del sitio mempool:
Ese 18 de marzo, Munich International Mining, un minero que participa en OCEAN y encontró el bloque 888283, publicó en X destacando la autonomía que ofrece el protocolo ese pool y DATUM:
“¡Encontramos el bloque 888283 de Bitcoin! ¿Y adivinen qué? ¡Nosotros mismos construimos la plantilla del bloque! Esto solo es posible con DATUM de ocean_mining. Si estás minando, deberías hacer lo mismo. ¡No lo dejes en manos de otros, toma el control!”.
Munich International Mining, minero de OCEAN en X.
Asimismo, el 14 de marzo, otro usuario de X, MrMasternode, también minero de Bitcoin en OCEAN, subrayó las ventajas de este enfoque: «esta es una mejor forma de minar en solitario Bitcoin y asegurar la descentralización como Satoshi Nakamoto la imaginó. Los pools centralizados y sus plantillas son un punto débil actualmente. Afortunadamente, OCEAN creó DATUM para resolver este problema».
Ambos testimonios apuntan a un cambio en la manera de entender la minería, priorizando el control individual y la resistencia a la censura que pueden ejercer los pools tradicionales al priorizar las transacciones que ellos deseen.
OCEAN emplea su propio protocolo, DATUM
El pool OCEAN, lanzado a finales de 2023, utilizaba el protocolo Stratum V2 (SV2), como lo reportó CriptoNoticias. Desde ese momento hasta el 29 de septiembre de 2024, OCEAN encontró 71 bloques a lo largo de ese período.
Sin embargo, desde aquel 29 de septiembre, cuando este pool implementó su propio protocolo, DATUM, OCEAN logró procesar 120 bloques hasta la actualidad, evidenciando un incremento notable en su actividad.
¿Por qué la tasa de bloques minados por OCEAN aumentó con DATUM?
Una respuesta rápida a esa pregunta es la evolución positiva del hashrate de OCEAN desde la implementación de su protocolo DATUM a fines de septiembre pasado. Actualmente, la tasa de hash de este pool es de 3,98 Eh/s (exahashes por segundo), aportando el 0,5% del hashrate total de los pools a la red Bitcoin, de acuerdo con el sitio mempool. Si bien la minería de Bitcoin es un proceso aleatorio, un mayor hashrate aumenta las probabilidades de efectuar esa práctica con éxito.
DATUM favoreció la adopción de mineros en el pool OCEAN
El aumento del hashrate de OCEAN coincidió con la puesta en marcha de DATUM, lo que podría explicar que más mineros adoptaron al pool y a su protocolo en ese momento, o que los mineros que allí operaban aumentaron el poder aportado, lo que en definitiva incrementó la tasa de hash del pool.
Por otro lado, pese a que un pool que implemente SV2, como Demand Pool, también puede fomentar la minería descentralizada al aprovechar funciones como la «Negociación de Trabajo», que permite a los mineros seleccionar las transacciones que integran sus plantillas de bloques, DATUM ofrecería una ventaja clave a esos mineros individuales. Y es que, con este protocolo, esos mineros transmiten sus bloques directamente a la red desde sus propios nodos de Bitcoin, sin intervención del pool, según señala el sitio especializado The Mining Pod.
Gracias a ello, DATUM otorgaría menores niveles de latencia a la hora de transmitir bloques, al eliminar intermediarios. También ofrecería a los usuarios una mayor descentralización y mayor control sobre su privacidad. Esta privacidad aumentada se debe a que los mineros solo comparten la rama Merkle de sus transacciones con el pool y no las transacciones completas. La rama Merkle es una estructura de datos que permite verificar la integridad de un conjunto de datos sin revelar su contenido.
Al eliminar la dependencia de un pool central para transmitir los bloques, se reduce el riesgo de centralización y se fortalece la descentralización de la red. Adicionalmente, debido a que DATUM no comparte transacciones completas con un pool, los mineros pueden proteger mejor su privacidad, pues la rama de Merkle no revela información específica sobre las transacciones.
Al ofrecer una herramienta como DATUM, OCEAN favorece la descentralización porque traslada esa responsabilidad a los mineros individuales, reduciendo el riesgo de censura o manipulación por parte de un ente central. Estas condiciones pudieron haber fomentado una mayor adopción de usuarios al pool.
El impacto de este enfoque ha sido resaltado por Luke Dashjr, CTO de OCEAN, quien el 26 de enero pasado sentenció sin pruebas concretas, a modo de metáfora o como forma de hacer llamativa la propuesta de su pool, lo siguiente:
“Braiins y ViaBTC son solo Bitmain disfrazado. F2Pool elige no minar transacciones hacia o desde una lista negra no revelada. Solo OCEAN te permite minar en solitario y aún obtener los beneficios completos de las recompensas de un pool”.
Luke Dashjr, programador y CTO de OCEAN.
OCEAN apuesta por una minería de Bitcoin sin concentración de poder
Una plantilla de minería, en el contexto de Bitcoin, es el plano que los mineros usan para armar un bloque candidato, seleccionando transacciones del mempool, junto con datos como el hash previo y un nonce para resolver el problema criptográfico. Su función es definir qué transacciones integran el bloque y en qué orden, permitiendo competir por la recompensa, que combina 3,125 BTC tras el halving, más las tarifas por transacción.
Sin embargo, esta selección se cruza con el Máximo Valor Extraíble (MEV), un concepto que, según explicó CriptoNoticias, refleja cómo los mineros pueden manipular plantillas para maximizar ganancias, priorizando transacciones de altas tarifas, como las de Ordinals, o reorganizando bloques pasados si las tarifas lo justifican.
Esto plantea un problema para la descentralización y seguridad de Bitcoin. En pools tradicionales con Stratum V1 o FPPS («Full Pay-Per-Share»), los operadores centralizan las plantillas, decidiendo qué incluir y pudiendo censurar transacciones o explotar el MEV, dejando a los mineros sin control.
Por su parte, Stratum V2 mejora esto al permitir negociar plantillas, pero el pool sigue mediando. DATUM, adoptado por OCEAN, da autonomía total: los mineros crean y transmiten plantillas desde sus nodos, reduciendo el poder del pool y el riesgo de censura. Sin embargo, el MEV persiste como amenaza: si los mineros individuales buscan más valor, podrían favorecer transacciones rentables, afectando la equidad y estabilidad de la red.
Así, las plantillas son esenciales, pero su manejo expone tensiones. La centralización de pools facilita prácticas como el MEV, mientras que opciones como DATUM buscan contrarrestarlas. Aun así, el incentivo económico podría desviar a Bitcoin de su espíritu descentralizado, un desafío que sigue en debate.