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Los 200 bancos más grandes tendrán una caída anual crediticia del 36% este año, según previsiones.
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Se espera que sus ingresos sean de USD 8.300 millones, su nivel más bajo de los últimos 10 años.
A dos meses de que finalice el 2022, se prevé que los mayores bancos del mundo cierren su peor año crediticio de la última década. Así lo comunicó el proveedor global de análisis financiero Coalition Greenwich.
Según sus estudios, los 200 bancos de inversión más grandes tendrán un total de ingresos por comercio de crédito de USD 8.300 millones este año fiscal. Informan que tal cifra representa una caída anual del 36% y la mínima en los últimos 10 años. Como muestran en el gráfico, el nivel más alto de esta década fue en 2020 por USD 18.400 millones.
Con «comercio de crédito» se refieren a la compra y venta de instrumentos como bonos gubernamentales y corporativos en los mercados mundiales de deuda. Esta técnica, que resulta una gran fuente de ingresos para los prestamistas globales, permite que las empresas obtengan financiamiento cuando aumentan las deudas.
Mercados bajistas afectan a los bancos en 2022
La caída de los ingresos crediticios de los bancos se debe a la falta de emisiones de bonos y la incertidumbre macro, dijo Mollie Devine, la directora de investigación de Coalition Greenwich. Según los registros, la emisión anual global de bonos corporativos no financieros bajó casi un 35% a USD 1.500 millones, el nivel más bajo desde 2012.
A su vez, esta situación tiene que ver con el ciclo bajista que atraviesan los mercados en 2022 incentivada por la incertidumbre macro. «La enorme volatilidad y la correspondiente baja liquidez reducen los volúmenes», explicó Max Castle, el gerente de cartera de renta fija de Mediolanum.
La tendencia bajista de los mercados en 2022 no solo ha afectado a las finanzas bancarias, como muestra el informe. Tal como reportó CriptoNoticias, también ha perjudicado a los inversionistas de bolsa y criptomonedas como bitcoin (BTC) con las caídas generalizadas ante el contexto macro.
Castle agregó que es probable que muchos inversionistas adquieran derivados de activos para contrarrestar el riesgo en este mercado bajista. Así mismo, indicó que quizás también mantengan sus posiciones de bonos en efectivo en lugar de hacer grandes cambios. Esto debido a que sus rendimientos están en máximos desde la crisis de 2009.