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Las reservas de bitcoin en exchanges han disminuido significativamente.
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Se disparó el envío de USDT a las principales casas de cambio.
Actualmente, se están configurando movimientos que podrían impulsar el precio de bitcoin (BTC) a niveles más altos.
Dos factores clave están convergiendo y proyectan un posible incremento en la cotización de bitcoin, lo que también podría arrastrar a todo el mercado de criptomonedas hacia una tendencia alcista.
El primer factor está relacionado con las reservas de BTC en los exchanges. Estas reservas han estado disminuyendo de manera notable, una tendencia que históricamente ha precedido a los rallys de precios.
En el siguiente gráfico se puede apreciar la disminución de las reservas de la primera moneda digital en exchanges.
La razón es que una menor cantidad de BTC disponible en las plataformas de intercambio refleja una presión de venta reducida, ya que los inversionistas transfieren sus fondos a wallets, disminuyendo la oferta en circulación.
Según un análisis del trader Tarekonchain, compartido por el proveedor de datos on-chain CryptoQuant, este fenómeno es un indicador que podría señalar un próximo aumento en el precio de bitcoin.
Las stablecoins muestran un camino alcista para bitcoin
El segundo factor que está jugando un rol crucial es el aumento en las reservas de stablecoins, principalmente USDT, en los exchanges.
Este incremento sugiere que los inversionistas están preparándose para comprar activos como bitcoin, pues las stablecoins representan capital listo para desplegar. En el siguiente gráfico se puede apreciar el incremento de este tipo de criptoactivos en los exchanges.
Cuando su presencia crece en los exchanges, indica un interés de compra latente, lo que generalmente se traduce en un posible aumento en la demanda de bitcoin.
Además, las stablecoins, al estar vinculadas a una moneda fíat como el dólar estadounidense, funcionan como una herramienta para gestionar la volatilidad del mercado, permitiendo a los inversionistas proteger su capital durante periodos de incertidumbre y volver a comprar criptomonedas cuando las condiciones mejoran.
El trader sostiene que, en conjunto, la disminución de las reservas de BTC y el incremento de las stablecoins establecen un escenario para un posible “rompimiento alcista en los precios”.
Con una oferta de BTC cada vez más limitada y un creciente poder de compra, el mercado parece estar preparado para un movimiento ascendente significativo. A lo largo de la historia de bitcoin, este desequilibrio entre oferta y demanda ha sido un motor clave de subidas de precio.
Hay factores que pueden frenar el aumento de bitcoin
Sin embargo, es importante destacar que, como reportó CriptoNoticias, un aumento en las reservas de stablecoins de los exchanges, especialmente de USDT, no garantiza que bitcoin subirá de inmediato.
“Si el mercado global permanece incierto o la economía mundial atraviesa un periodo de riesgo elevado, los inversionistas podrían ser reacios a realizar compras importantes, lo que retrasaría el movimiento al alza”, señala Tarekonchain.
En este sentido, los datos macroeconómicos de una potencia como Estados Unidos juegan un papel fundamental en la volatilidad del mercado.
Por ejemplo, el índice de precios de consumo (IPC) de Estados Unidos se situó en el 2,5% interanual en el mes de agosto, lo que implica una desaceleración de cuatro décimas respecto al dato previo y su menor cifra desde febrero de 2021. Lo cual respalda la expectativa de recortes en las tasas de interés.
El analista colombiano Juan Rodríguez señaló que esta situación podría llevar a un recorte de 0,25 puntos básicos en lugar de los 0,50 puntos que se estaban anticipando, lo que sería un factor positivo para el mercado. No obstante, el desempleo sigue siendo un punto débil en esta ecuación económica, apunta.
En sintonía con Rodríguez, el analista Daniel Mudvi también destaca que la caída en la inflación es una señal alentadora, ya que demuestra que Estados Unidos está avanzando hacia los objetivos de la Reserva Federal.
Sin embargo, es preocupante que algunos sectores, como el de la vivienda, estén mostrando signos de fragilidad. El precio de las casas y los alquileres podrían ejercer presión en la economía general, lo que podría complicar las perspectivas a corto plazo.