-
Cuatro de los 11 acusados son los fundadores y su ubicación es desconocida.
-
Forsage ha sido acusado en el pasado por otras SEC, precisamente de ser un esquema Ponzi.
Al menos 11 personas fueron acusadas formalmente por la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC) de haber participado en un esquema Ponzi basado en criptomonedas como ether (ETH), con el que se hicieron con unos 300 millones de dólares tomados de los inversionistas que cayeron en la supuesta estafa.
De acuerdo con la acusación, disponible en la página web de la SEC, el presunto esquema Ponzi tiene el nombre de Forsage. Se presenta como una plataforma que opera sobre un contrato inteligente (smart contract), permitiendo a millones de personas ejecutar transacciones sobre Ethereum, Tron y BNB Chain. De este servicio ya hemos hablado en CriptoNoticias.
Según aclaran, «estas transacciones han sumado más de 300 millones de dólares», tomando en cuenta que quienes crearon la estafa «perpetuaron Forsage y sus contratos inteligentes a través de agresivas promociones en internet».
La SEC estadounidense determinó que los miembros del proyecto recaudaron fondos de inversionistas minoristas en los Estados Unidos y en todo el mundo, a través de la oferta no registrada y la venta de valores.
Agrega que «se involucraron en un esquema para defraudar a los inversionistas y además se involucraron en prácticas que operaron como un fraude o engaño para ellos».
La SEC recrimina que Forsage nunca vendió ni pretendió vender algún producto consumible real a clientes minoristas «durante un período de tiempo relevante». Además, «(Forsage) no tenía una fuente aparente de ingresos distinta de los fondos recibidos de los inversionistas».
El regulador explicó que la forma en que los inversionistas ganan dinero con Forsage es reclutando a otros para participar en dicho esquema. Tienen que crear un monedero y con él, comprar «ranuras» o espacios dentro de los contratos inteligentes. Estos espacios les da recompensas, tanto de quienes fueron referidos, como de otros inversionistas más grandes en la plataforma. Esto, «como una forma de participar en los beneficios de los pagos», dice la SEC.
Utilizan las cadenas de bloques para mover los fondos
Algo que destaca la SEC es que, a través de las cadenas de bloques arriba mencionadas, los operadores dirigían los fondos del inversionista en la medida que se iban sumando más.
Los fundadores idearon y controlaron todas las operaciones esenciales de Forsage, incluida la creación de contratos inteligentes, plan de compensación, desarrollo del sitio web de Forsage, la infraestructura de ‘back office’, promoción de la empresa, cobro y distribución de pagos a inversores, diseño y lanzamiento de nuevas plataformas de inversión, y creación y mantenimiento de herramientas de capacitación y soporte.
Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos.
No conforme, prosigue la SEC, los creadores codificaron uno de los contratos inteligentes de Forsage en la cadena de bloques de Ethereum «para desviar una parte de los fondos de los inversionistas a un monedero de criptomonedas no asociado a ninguno de los participantes».
Según la SEC, desde Forsage se defendieron cuando se les señaló de operar como un esquema piramidal. Tanto los fundadores, como los promotores y los financistas negaron las acusaciones y aseguraron que se trataba de una operación legítima.
Al menos cuatro de los 11 acusados por la SEC, que son los fundadores del esquema, están en un destino desconocido. Se presume que viven en Rusia, la República de Georgia o en Indonesia, recoge la prensa estadounidense.
Forsage tiene su origen en 2020, el año de la pandemia de la COVID-19, y desde entonces, varios reguladores han intentado frenarlo. De hecho, tal como lo reportó CriptoNoticias, la que se conoce como la mayor dApp de Ethereum fue señalada por la SEC de Filipinas como un posible esquema ponzi.
CriptoNoticias intentó comunicarse con los portavoces de Forsage, pero hasta el cierre de este reporte no fue posible. Tampoco han publicado nada al respecto en su página web, ni en su cuenta de Twitter. No obstante y pese a las acusaciones, el servicio sigue activo y operativo.