Hechos clave:
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El organismo acogió con satisfacción la iniciativa de la criptomoneda Libra, de Facebook.
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Mark Carney cree que nuevas tecnologías permitirán que una moneda digital global desafíe al dólar.
El gobernador del Banco de Inglaterra (BoE), Mark Carney, desafió la posición del dólar como la principal moneda de reserva del mundo, argumentando que podría ser reemplazado por una alternativa digital global que terminaría con la sobreabundancia de ahorros que resultó en 10 años de baja inflación y tasas de interés.
Al igual que hace 100 años, al final del mandato de la libra esterlina en los mercados monetarios internacionales, Carney dijo que el dólar había alcanzado un nivel de dominio que significaba que se ha convertido en una barrera para una recuperación sostenible.
En consecuencia, cree que una nueva criptomoneda, respaldada por un gran grupo de naciones, podría desbloquear los fondos en dólares que los gobiernos acumulan como póliza de seguros en tiempos inciertos. Los gobiernos almacenan estos dólares para protegerse de las oscilaciones de la economía de Estados Unidos, que en tiempos recientes se han intensificado. Esto ha dado lugar a un aumento significativo del costo de los préstamos.
De esta forma, una moneda digital «podría amortiguar la influencia dominante del dólar estadounidense en el comercio mundial», dijo Carney, en un discurso pronunciado en la reunión de banqueros centrales de todo el mundo realizada en Jackson Hole, Wyoming. «Si aumentara la proporción del comercio facturado en una criptomoneda, las perturbaciones en los Estados Unidos tendrían menos efectos indirectos a través de los tipos de cambio, y el comercio se volvería menos sincronizado entre los países».
La influencia del dólar en las condiciones financieras mundiales también podría disminuir si se desarrollara una arquitectura financiera en torno a la nueva moneda digital y así se desplazaría el dominio del dólar en los mercados de crédito. Al reducir la influencia de EE.UU. en el ciclo financiero mundial, esto ayudaría a reducir la volatilidad de los flujos de capital hacia las economías de mercado emergentes.
Mark Carney, gobernador, Banco de Inglaterra
La moneda china, el renminbi, ha sido citada como una alternativa al dólar, junto con algunas criptomonedas, como Libra de Facebook. Sobre ello, Carney dijo que ninguna de las dos estaba actualmente en posición de tomar el relevo del dólar, pero que las nuevas tecnologías podrían permitir que una moneda digital global desafiara a la moneda estadounidense.
Las criptomonedas han atraído la atención de los bancos centrales en el ultimo año, a medida que la perspectiva de los negocios móviles y las transacciones de consumo se han vuelto más populares.
A principios de este año, el Banco de Inglaterra acogió con satisfacción la iniciativa de la criptomoneda Libra, de Facebook, que se ha considerado como un reto para Bitcoin y otros criptoactivos. Los funcionarios del BoE dijeron que la iniciativa, que fue respaldada por varios bancos, podría ser una adición útil al comercio de bienes y servicios.
Sin embargo, una sucesión de bancos centrales ha criticado a Libra, diciendo que carece de las normas y reglamentos necesarios para ser una moneda fiable. La Comisión Europea abrió una investigación antimonopolio sobre Libra a principios de esta semana, diciendo que temía que la criptomoneda privada pudiera perjudicar injustamente a sus rivales y estar abierta a abusos.
En lo que pareció ser una respuesta más abierta a Libra, Carney comentó que «las transacciones al por menor se realizan cada vez más en línea, en lugar de en la calle principal; y cada vez más a través de pagos electrónicos, en vez de efectivo».
La más destacada de estas monedas ha sido Libra, una nueva infraestructura de pagos basada en una stablecoin (criptomoneda anclada) internacional, totalmente respaldada por activos de reserva en una cesta de divisas que incluye al dólar estadounidense, el euro y la libra esterlina. Podrá intercambiarse entre los usuarios en plataformas de mensajería y con los comercios principales.
Mark Carney, gobernador, Banco de Inglaterra
Agrega que hay una serie de cuestiones fundamentales que Libra debe abordar, que van desde la privacidad hasta la resistencia operativa. Además, «dependiendo de su diseño, podría tener implicaciones sustanciales para la estabilidad monetaria y financiera».
Carney también dijo que la economía del Reino Unido estaba sufriendo desde hace varios años de falta de inversión, principalmente en respuesta a la incertidumbre que rodea al Brexit. Añade que un mayor deterior en el crecimiento del producto interno bruto (GDP, por sus siglas en inglés) podría forzar al comité de política monetaria del Banco a recortar las tasas de interés, informó. Asegura además que estaría dispuesto a recortarlas, en caso de una recesión provocada por una salida, sin acuerdo, de la Unión Europea.
Versión traducida del artículo de Phillip Inman, publicado en The Guardian.