Sin duda, 2016 ha sido el año del despegue de los hackathons sobre tecnología Blockchain. De alguna manera, la celebración de este tipo de eventos subraya el interés de algunas importantes industrias y compañías por la cadena de bloques que sostiene a la red Bitcoin.
La palabra hackathon es el resultado de la unión de hacker y maratón. De ahí que estos eventos concentren a varios programadores durante, al menos, 48 horas seguidas. La finalidad de estos encuentros suele ser la de buscar soluciones sencillas a problemas complejos. Es decir, hacer fácil lo difícil, que es lo que saben hacer los buenos hackers.
Desde mediados de año, la celebración de este tipo de eventos se ha extendido por todo el planeta: Inglaterra, Rusia, Holanda, Irlanda, Estados Unidos, Japón, Sudáfrica… Y ahora, España. Tendrá lugar en Madrid durante los días 25 y 26 de noviembre de la mano de UST Global, la consultora estadounidense de tecnologías de la información que se instaló en España hace poco más de tres años. La convocatoria también cuenta con la colaboración de IBM y de la Escuela Superior de Ingeniería y Tecnología de la Universidad Internacional de la Rioja (UNIR).
Según UST Global, el motivo del hackathon responde al desafío de poder crear soluciones enfocadas en el uso de Blockchain en ámbitos tan dispares como identidad digital, voto electrónico, propiedad digital o historial médico.
En el primer supuesto, el de la identidad digital, se tratará de enlazar la identidad de una persona física con una cuenta de la plataforma, asegurando que todas las transacciones ejecutadas con dicha cuenta pertenecen a la persona asociada.
En el desafío del voto electrónico, la propuesta tiene que ver con la realización de una prueba de concepto del voto electrónico, asegurando la identidad del votante, con la finalidad de evitar dobles votos. También habrá que garantizar el anonimato del voto.
En el reto de la propiedad digital, se tratará de asegurar que el contenido almacenado es único y creado únicamente por el dueño de la cuenta. También habrá que diseñar una estrategia de tarificación o definir unos criterios para que el acceso a los datos sea únicamente por las cuentas habilitadas.
En el desafío relacionado con el historial médico, los participantes deberán de almacenar en la cadena de bloques el historial médico de una persona, con la finalidad de poder consultar todo el histórico. Asimismo, tendrán que habilitar la lectura y modificación del historial únicamente por las entidades o médicos autorizados.
Han tenido que pasar siete años para que la tecnología Blockchain se cuele en la cotidianidad de unos chavales un viernes por la tarde. Antes lo hizo en el Foro de Davos. Este mercado global de ideas y tendencias, que todos los eneros reúne a los principales líderes mundiales en la localidad suiza de tal nombre, dedicó buena parte de la edición de este año a esta tecnología.
Desde ese momento, el Foro Económico Mundial se ha convertido en uno de los principales promotores y altavoces de esta tecnología. En el mes de agosto, hizo público un informe en el que, entre otras cuestiones, apuntaba que la tecnología Blockchain terminará por convertirse en el corazón del sistema financiero internacional. Recientemente, anunció la creación de un grupo de trabajo sobre esta tecnología, que dirigirá el expresidente de la República de Estonia.
De ahí que 2016 se haya convertido en un hackathon de Blockchain planetario. Muchas veces, la celebración de estos encuentros responde a la necesidad de las grandes empresas de buscar fuera de su hábitat soluciones innovadoras que les permitan seguir siendo competitivas. Porque, como muy bien apunta Paul Graham, fundador de Hacker News, Yahoo podría haber sido Google, pero no pudo ser porque no supo mantener la cultura hacker, que no es otra cosa que la innovación desde la base.