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La actual vicepresidenta evitó desmarcarse de la estrategia sobre bitcoin trazada por Biden.
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Los dos candidatos mostraron visiones completamente distintas del país.
Finalmente, se produjo el esperado encuentro. Los dos principales aspirantes a la presidencia de Estados Unidos, Kamala Harris y Donald Trump escenificaron este 10 de septiembre un debate para confrontar sus ideas, en un encuentro en el que bitcoin (BTC) volvió a quedar fuera de la discusión, provocando reacciones de la comunidad que gira en torno a los activos digitales.
A pesar de que las expectativas, bitcoin y las criptomonedas no fueron mencionados durante las dos horas que duró el encuentro en el que ambos candidatos abordaron temas relacionados con economía, inmigración, aborto y política exterior, entre otros.
Vale destacar que, aunque el encuentro no se centró en las criptomonedas, permitió vislumbrar la visión que ambos políticos tienen del país, marcada por claros contrastes. Harris se esforzó por demostrar que puede presentar los argumentos demócratas contra Trump mejor de lo que lo hizo Biden.
De esta forma, mientras el enfoque de Harris se pone en una economía de oportunidades, con énfasis en la propiedad de la vivienda y el control de precios para manejar la inflación el plan de Trump apunta a «volver a hacer rico a Estados Unidos».
Asegura que lo hizo la primera vez que estuvo en la Casa Blanca y promete que lo volverá a hacer. También culpa a Harris y a Biden de un aumento de la inflación bajo su gobierno y de «destrozar la economía».
Con el fin enfrentar la crisis económica Trump subraya su intención de imponer nuevos impuestos a los productos importados —de todos los países con los que comercia Estados Unidos— en un intento de obligar a más empresas a fabricar sus productos en el país. La crisis de la deuda sería enfrentada usando a bitcoin como reserva estratégica.
Harris, por su parte, busca grandes subidas de impuestos a las empresas y a quienes obtienen ingresos altos, para financiar la ayuda a trabajadores de ingresos bajos y de clase media.
Ofrece grandes exenciones fiscales a las empresas que se dedican a lo que considera «un gran beneficio económico», como la fabricación de tecnologías necesarias para luchar contra el calentamiento global o la construcción de viviendas. Se compromete a entregar ayudas para la compra de inmuebles.
Este el único encuentro programado entre los dos candidatos y llega en un momento crítico, ya que las encuestas muestran una carrera muy reñida a solo ocho semanas de las elecciones.
La pregunta fundamental que queda en el aire es si alguno de ellos puede transmitir un mensaje convincente a los votantes indecisos y reforzar la confianza de sus bases. Esto, en un escenario en el que se considera que el rol de bitcoin es decisivo en estas elecciones.
El mensaje de los candidatos obliga a pensar en Bitcoin
Miembros de la comunidad se trasladaron a las redes sociales para reaccionar frente al debate de los candidatos a la presidencia de Estados Unidos. Algunos de ellos, no se mostraron convencidos sobre el discurso que manejaron, aunque si creen que el precio de BTC subirá bien sea por la mala política monetaria que aplique Harris en caso de que triunfe en las elecciones, o por las políticas procriptomonedas que puedan surgir de un gobierno liderado por Trump.
Otros creen que no hay políticos capaces de arreglar la economía de Estados Unidos y por lo tanto creen que es mejor momento para refugiarse en bitcoin. De igual manera, desde la cuenta Valid_signa de X, un usuario dice que gane Trump o Harris, lo que sucederá es que ambos imprimirán más dinero y por ello, cree que es momento de comprar bitcoin.
También los apostadores con criptomonedas han emitido un mensaje, ya que tras su primer debate sin mención de los activos digitales, las probabilidades de Trump de ganar las elecciones cayeron un 3% en Polymarket.
Tras un nuevo debate de Trump sin mención de los activos digitales, sus probabilidades de ganar las elecciones cayeron un 3% en Polymarket.
Justo antes del debate Trump lideraba las probabilidades de ganar las elecciones a la presidencia de Estados Unidos con un 52%, frente al 46% de Harris, pero luego del duelo entre ambos, los números cambiaron para reflejar un empate con el 49%.
Este artículo fue redactado con la colaboración de Marianella Vanci (Editora)