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El cliente ligero de Bitcoin opera con independencia, sin habilitar aplicaciones de terceros.
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Se integra en dispositivos móviles y se sincroniza con la cadena completa.
La infraestructura que apuntala a Bitcoin avanza por una ruta que le permita ser más fácil para que cualquiera pueda operar. Esta es la vía por la que transita el desarrollador Alexis Sellier quien ha sacado a la luz el proyecto en el que trabaja. Se trata de un nodo ligero de Bitcoin capaz de correr en dispositivos móviles con la misma seguridad y privacidad que ofrecen los nodos completos.
Los nodos completos de Bitcoin actúan como sistemas de seguridad financiera, validando las transacciones de la cadena de bloques de la primera de las criptomonedas y protegiendo a los usuarios de ser engañados por alguien que les haga creer que han recibido dinero, cuando en realidad no es así. Pero ocupan mucho espacio informático y su tamaño está creciendo rápidamente ya que el registro de su cadena de bloques pesa más de 300 gigabytes, tras haber marcado un crecimiento de casi 25% durante el 2020.
Dado que estos nodos son la forma más «fiable» de utilizar Bitcoin, los desarrolladores llevan mucho tiempo intentando facilitar su uso. Esto fue lo que llevó a Sellier a trabajar en un proyecto que ofrezca la facilidad de ejecutarse en cualquier plataforma, ya sea móvil o de escritorio sin sacrificar la privacidad o la seguridad del usuario.
El boletín del Grupo de Tecnología de Operaciones de Bitcoin (Bitcoin Optech) publicado esta semana, informa sobre el lanzamiento de Nakamoto, el cliente ligero desarrollado por Sellier de fácil integración con aplicaciones móviles. Esto es porque está escrito en Rust, pero cuenta con una interfaz de función externa que facilita su vinculación con programas basados en otros lenguajes de programación como Python, Java o Swift.
El proyecto apenas está en su primera etapa de desarrollo, por lo que todavía tiene un largo camino que recorrer antes de que los usuarios puedan empezar a utilizarlo con la idea de fijar su bandera de auto-soberanía financiera. Pero, aparenta ser el primer embrión de una nueva generación de nodos ligeros. Por ahora, está disponible en su primera versión apenas con funcionalidades básicas, tal como apunta Sellier en su descripción técnica.
Un nodo de Bitcoin ligero y privado
Los nodos ligeros son capaces de reducir el tamaño del historial de transacciones de la cadena de Bitcoin a tan solo 2 gigabytes, aproximadamente el tamaño necesario para almacenar una película. Operan bajo el procedimiento de Verificación de Pago Simplificada (SPV) que no requiere tanto espacio de almacenamiento informático como un nodo completo.
Sin embargo, los nodos SPV no preservan tan bien la privacidad del usuario y son más susceptibles a los ataques que los nodos completos. Aquí es precisamente donde el proyecto Nakamoto se presenta como una iniciativa que puede marcar la diferencia con otras opciones disponibles en la actualidad. Su propuesta se basa en el protocolo BIP157 que supera muchos de los problemas que presentan los clientes ligeros actuales.
Lo que convierte a un nodo de Bitcoin en una versión ligera es que minimizan la cantidad de ancho de banda, espacio de almacenamiento y computación requerida para operar. Para lograrlo, solo descargan una fracción de la blockchain de Bitcoin y funcionan sin comprobar la validez de todos los bloques en la cadena más larga. Para resolverlo, Nakamoto habilita bloques compactos que le permiten sincronizar de forma segura la cadena de bloques completa sin requerir más espacio de almacenamiento, ni depender de una fuente de confianza.
De esta manera corre bajo el procedimiento SPV, pero con la capacidad de detectar eficazmente a los pares maliciosos o defectuosos que sirven filtros no válidos, como lo hacen los nodos completos. Además, permite que la privacidad mejore porque los bloques pueden descargarse de cualquier fuente, de modo que ningún par obtiene información completa sobre los datos requeridos por un cliente.
Ligero, pero seguro
La seguridad es el otro elemento en el que se basa Nakamoto. Sobre esto, Sellier comenta que una de sus preocupaciones es que los ataques dirigidos a las aplicaciones que suelen integrarse con los nodos, son uno de los vectores más evidentes. Por ello, su proyecto se basa en dos principios sencillos: limita la intervención de terceros y es fácil de auditar.
Menos código equivale a menos errores y menos que auditar. Menos dependencias equivale a menos partes móviles y riesgos potenciales de seguridad. El segundo punto es especialmente importante porque las dependencias son mucho más difíciles de rastrear que el código interno de la biblioteca. El código de terceros a menudo acaba cambiando de manos, y aunque uno puede confiar en el mantenedor original, puede no confiar en quien viene después.
Alexis Sellier, desarrollador de Nakamoto, nuevo cliente ligero de Bitcoin.
En la ruta de las alternativas que se están desarrollando para mejorar la usabilidad de la criptomoneda más popular del mercado, también se encuentra Umbrel, una aplicación que permite ejecutar un nodo de Bitcoin y a su vez integrar otras funcionalidades.
Como lo informó CriptoNoticias recientemente, la nueva versión de Umbrel trae consigo la posibilidad de instalar el servidor Samourai, desarrollado de forma exclusiva por la reconocida aplicación de carteras de Bitcoin enfocada en la privacidad.