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Hasta finales de 2022, desarrolladores y usuarios pueden migrar a Goerli y Sepolia.
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Estas dos redes de prueba sí seguirán disponibles luego de la fusión con la nueva cadena.
La Fundación Ethereum, organización que incluye a los principales desarrolladores de esta red, confirmó qué va a pasar con varias redes de prueba tras la fusión con Ethereum 2.0. Las redes Ropsten, Rinkeby y Kiln dejarán de existir en distintos puntos de este y el próximo año.
Hasta su cierre definitivo, estas redes de prueba serán discontinuadas, según expresa el comunicado de la Fundación Ethereum. Esto quiere decir que no se harán más pruebas en ellas, pero sí estarán disponibles para que usuarios y desarrolladores comiencen su migración a otras redes de prueba.
Ropsten será la primera en cerrarse, en el cuarto trimestre de 2022. Se trata de la red de pruebas de Ethereum que más tiempo ha estado activa usando la prueba de trabajo (Proof of Work o PoW) para validar nuevos bloques. Como reportó CriptoNoticias, esta red de pruebas ya ha conseguido con éxito su paso a la validación de bloques mediante prueba de participación (Proof of Stake o PoS).
La siguiente que será cerrada será Rinkeby, en el segundo o tercer trimestre de 2023. A diferencia de Ropsten, esta no funciona con el método PoW, sino con otro denominado Proof of Authority o prueba de autoridad que se basa en la selección arbitraria de validadores, de quienes se conoce su identidad real. Además, tampoco tendrá una fusión para comenzar a usar la prueba de participación.
Kiln, por su parte, será clausurada «poco después» de la fusión de Ethereum con la Beacon Chain, el fragmento original de la nueva blockchain. Esta red de pruebas ofrece un espacio en el que convivían los métodos PoW y PoS, como informó CriptoNoticias. De este modo, cumple con su principal finalidad, que es proveer un entorno de pruebas para el comportamiento de la red luego de concretarse la fusión.
Ethereum 2.0, en camino
¿Y cuándo se dará la tan esperada transición a Ethereum 2.0? Según los desarrolladores de esta red, será en algún momento de la segunda mitad de 2022. Por ahora, continúan las pruebas y la determinación de fechas para los eventos más importantes.
En este sentido, la actualización Glaciar Gray está programada para el bloque 15.050.000 en Ethereum, proyectado para minarse aproximadamente el 29 de junio. Esta actualización posterga la activación de la bomba de dificultad que pondrá fin a la minería, para mediados de septiembre, como se ha informado en CriptoNoticias.
Goerli y Sepolia, los ensayos que restan para la fusión en Ethereum
Además del ya concretado paso de la red de pruebas Ropsten al uso de la prueba de participación, también resta probar este mecanismo en Goerli y Sepolia. En esta última, Sepolia, se creó recientemente la Beacon Chain, el primer fragmento de la nueva blockchain con prueba de participación. Goerli, en tanto, se combinará en la fusión con la Beacon Chain Prater.
Para avanzar con estas pruebas, desde la Fundación Ethereum alientan a usuarios y desarrolladores a migrar a estas redes «lo antes posible», describe el comunicado.
Luego de sus respectivas fusiones, ambas redes permanecerán abiertas. Goerli estará disponible para los usuarios que quieran probar validadores y actualizaciones del protocolo en una red de prueba. Asimismo, al ser la red de prueba con un estado más similar a la red principal, puede usarse incluso para probar interacciones con contratos inteligentes.
Por su parte, Sepolia «funcionará con un set de validadores permisionados, como lo hacen varias redes de prueba en la actualidad», informó la Fundación Ethereum.
Redes de prueba son como un campo de entrenamiento para Ethereum
En las redes de prueba de Ethereum no se utiliza dinero real, sino que se usan tokens que emulan a la criptomoneda nativa de la red Ethereum, ether (ETH). Con estos tokens, es posible trabajar en desarrollos para productos y aplicaciones antes de emplearlos en la red principal.
Con el paso del tiempo, las redes de prueba acumulan cada vez más información. Esto puede hacer que se vuelvan difíciles de ejecutar para los nodos y que su mantenimiento y uso demande más recursos. Por lo tanto, su durabilidad es limitada y llega un momento en el que se decide cerrarlas, como pasará próximamente con estas tres redes de prueba de Ethereum que ya cumplieron con su cometido.