Las criptomonedas continúan en un limbo legal de Nigeria. El efectivo digital mantiene su posición como un valor al que los ciudadanos pueden recurrir como alternativa a la moneda nacional, el Naira. No obstante, su uso libre tiene doble filo: el aumento de negocios fraudulentos.
La Comisión del Mercado de Valores de Nigeria emitió un comunicado en el cual advierten a la comunidad sobre la inversión en criptomonedas, haciendo énfasis en el uso de publicidades radiales para la inversión en monedas digitales como Bitcoin y con mal llamadas criptomonedas como OneCoin y Swisscoin. «El público es por tanto advertido de ejercer extrema precaución en cuanto el uso de monedas digitales como medios de inversión«, recalca la institución.
Asimismo, la entidad hace referencia a la falta de seguridad que encierra el empleo de las criptomonedas, ya que ninguna autoridad reguladora aprueba servicios con monedas digitales, aunado a la falta de un marco legal para su uso, el cual constituye una intención pendiente desde 2015 y renovada en 2016 por parte del Banco Central de Nigeria.
La moda del fraude
La economía en actual recesión de Nigeria es caldo de cultivo para esquemas ponzi. La nación africana es el sujeto perfecto para fraudes con promesas de enriquecimiento fácil, y en 2016 tres de los mayores fraudes llevados a cabo en toda la extensión del país fueron llevados a cabo con Bitcoin.
La Comisión desea alertar al público que ninguna persona, compañía o entidad que promueva criptomonedas ha sido reconocida o autorizada por la institución o por otra agencia reguladora en Nigeria para recibir depósitos del público o proveer ninguna inversión u otros servicios financieros en o desde Nigeria. El público también debería estar al tanto de que cualquier oportunidad de inversión promovida por estas personas, compañías o entidades tienden a ser de naturaleza riesgosa con un gran riesgo de pérdida de dinero, mientras otras pueden ser definitivamente esquemas piramidales fraudulentos.
Comisión de Mercado de Valores
La Comisión recalca que ante la falta de regulaciones para valores digitales, el público queda expuesto a posibles fraudes en caso de aliarse con compañías o instituciones que requieran inversiones con criptomonedas. «No existe protección disponible contra pérdidas financieras para usuarios o inversores de estas monedas digitales si éstas fallan o las compañías que las promueven cierran el negocio», advierte el órgano regulador.
No obstante, de acuerdo al portal Bitcoin Nigeria, la preferencia por el riesgo financiero en una economía difícil se basa en el valor de la inversión. «Bitcoin es mucho más estable con un mercado de valor sólido, así que inversores a largo plazo son menos propensos a ver su precio caer mientras que usuarios del Naira son particularmente susceptibles al entorno político y cambios de precios en productos básicos», explica la página a sus usuarios.
Mientras la economía nigeriana queda pendiente de su arreglo, las instituciones reguladoras -más pronto que tarde- se verán en la necesidad de imponerse ante los casos de fraude que proliferan en uno de los países más poblados del mundo, así como entidades responsables a nivel mundial deberán finalmente sacar a las criptomonedas de su zona gris y sacar provecho de sus beneficios.