En línea con el último plan legislativo de la Comisión Europea, que busca regular grandes pagos en efectivo y criptomonedas, así como toda forma de pago que se preste al anonimato, el gobierno de la República Checa planea crear medidas más estrictas en cuanto a lo que compete al anonimato de las criptomonedas y de la cantidad que se transfiere con las mismas.
De acuerdo con declaraciones de la fuente regional Právni rádce, las autoridades checas están preocupadas por el lavado de dinero y el financiamiento terrorista que se pueda realizar a través de las monedas digitales.
El plan de legislación relacionado con las criptomonedas inició en República Checa con el fin de que todos los operadores de casas de cambio y de servicios asociados se sometan pronto a regulaciones de “conoce-tu-cliente”, el mejor conocido KYC, que es un proceso de identificación comercial y verificación de la identidad de los clientes realizado generalmente por instituciones bancarias. De esta manera, los comerciantes deberán exigir a los usuarios que quieran gastar más de 1000 euros en criptomonedas la tarjeta de identidad, el género, la nacionalidad y dirección de residencia.
Vale mencionar que en República Checa el uso de Bitcoin y otro tipo de monedas virtuales está largamente extendido y es de uso popular en toda la región, especialmente en Praga. Una proporción considerable de comerciantes aceptan bitcoins y otro tipo de criptomonedas populares para la compra y venta de sus productos. Es decir que estas medidas limitativas para monedas virtuales podría traducirse en cierto impacto a la economía de la nación.
Sin embargo, movidos por del panorama que se está dibujando a nivel global, luego de la publicación del plan legislativo de la Comisión Europea, la reunión realizada en Qatar por agencias de seguridad, así como la constante amenaza y preocupación por las posibles actividades terroristas que pueden ocurrir en Europa, el Ministerio de Finanzas de la República Checa puede que muy pronto comience a exigir las medidas ya mencionadas a las casas de cambio y otros comercios que trabajen con moneda digital.
Las monedas virtuales representan un elemento en donde cada usuario puede realmente interrumpir el rastro del dinero. Son, por lo tanto, una provisión de remuneración en forma de moneda virtual lo que plantea un gran riego por el abuso potencial de cometer fraudes fiscales.
Ministerio de Finanzas de la República Checa
A su vez, también se espera que las autoridades gubernamentales adhieran impuestos al valor agregado a las monedas virtuales en un futuro. Pero las nuevas medidas no vienen sin quejas, pues ya al menos el Instituto de Criptoanarquismo Paralelní Polis, una organización que trabaja estrechamente con hackers para difundir el ideal Bitcoin, se ha negado a aceptar estas regulaciones pues atentan contra sus principios de descentralización.
Por otro lado, aunque Bitcoin y otras criptomonedas están siendo adoptadas y asimiladas por bancos y autoridades gubernamentales, precisamente es debido a su popularización y extensión global que las entidades de regulación y agencias de seguridad de orden mundial se sienten en la necesidad de realizar controles sobre estas nuevas tecnologías, en vista de una preocupación de que las mismas se puedan prestar para llevar a cabo actividades criminales.