Japón ha dado un paso importante en la regulación de las transacciones con criptoactivos al anunciar que la Agencia de Servicios Financieros del gobierno pasará a ejercer un rol de supervisión sobre las casas de cambio que funcionan en la nación nipona, a partir del próximo mes de octubre.
Entre otros aspectos, esta dependencia, identificada con las siglas FSA por sus iniciales en inglés (Financial Services Administration), revisará si los sitios de compra-venta de criptomonedas cuentan con sistemas internos lo suficientemente robustos, al tiempo que confirmará la disponibilidad de mecanismos para proteger al usuario. Un vocero de esta entidad declaró que está buscando generar impulso para el mercado y fortalecer la regulación, para un mejor desarrollo en líneas generales.
Se calcula que alrededor de 20% de todos los mercados virtuales para la adquisición de criptomonedas funcionan en Japón, una plaza que ha permitido contrarrestar hasta cierto punto la pérdida de demanda luego de los recientes anuncios regulatorios de China y la paralización de algunas de las casas de cambio que funcionan en su territorio.
FSA to monitor virtual currency exchanges – The Japan News https://t.co/oGAddHUt4X
— Gekko the second (@gekkosecond) 25 de septiembre de 2017
En un requerimiento legal exigido previamente este mismo año, se notificó a las casas de cambio que debían poner en efecto mecanismos contra el lavado de dinero y protocolos de conocimiento del cliente. Los mercados electrónicos japoneses, que cada vez adoptan más criptomonedas entre los activos que son permitidos en los intercambios comerciales, también tienen un límite que se vence este mes de septiembre para registrarse formalmente, según disposiciones establecidas el pasado mes de abril.
La FSA estableció recientemente un equipo con 30 profesionales dedicados a la supervisión de las casas de cambio japonesas, que ya superan la veintena. Las estadísticas indican que el mercado japonés ha recibido un impacto equivalente a unos 500 mil dólares en pérdidas asociadas a presuntos fraudes y esquemas engañosos.
Entre estos casos destacan ejemplos de supuestas ICO u Ofertas Iniciales de Monedas que resultaron ser fachadas para el lavado de capital empleando como excusa un proyecto relacionado con el ecosistema blockchain.
Hasta los momentos, el equipo responsable de la legitimidad de los operadores del mercado en territorio japonés ha venido monitoreando particularmente la disponibilidad de activos subyacentes que sustenten las operaciones, además de la existencia de suficientes mecanismos de seguridad, como la disponibilidad de medidas para responder ante posibles ciberataques.