“Lo que ha sido, será otra vez, lo que ha sido hecho, será hecho otra vez; no hay nada nuevo bajo el sol” – Eclesiastés 1:9.
Así da comienzo el discurso que Mark Carney, Gobernador del Banco de Inglaterra, emitió el pasado 25 de enero durante la conferencia del Banco Central de Alemania sobre “Digitalizando las finanzas, inclusión y capacidad financiera”, en el Palacio de Biebrich de la ciudad de Wiesbaden (Alemania).
Dicho discurso versa sobre el potencial de la tecnología financiera y sus posibles riesgos para la estabilidad del mercado, así como sobre las preguntas que deberían plantearse a la hora de crear un marco regulatorio adecuado para estos nuevos sistemas. En el documento, Carney comienza dibujando el brillante panorama que tecnologías como la blockchain están ofreciendo en distintas áreas.
Tecnologías emergentes, como la contabilidad distribuida, podrían en el futuro ofrecer significantes ganancias en precisión, eficiencia y seguridad en los procesos sobre pagos, verificación y liquidación, así como un mejor cumplimiento regulatorio. En el proceso, diez billones en capital pueden ser ahorrados y la resiliencia puede ser mejorada significativamente.
Mark Carney
Gobernador
Sin embargo, antes Carney no se olvida de mencionar que toda la historia de la innovación financiera está llena de ejemplos de altos ascensos y estrepitosas caídas, por lo que las fintech representan un desafío para los reguladores, que deben considerar sobre todo las leyes anti-lavado de dinero (AML) y la lucha contra la financiación del terrorismo (CFT). En esta línea, se plantean cuatro preguntas que deberían responder los reguladores para encontrar la forma más adecuada de sobrellevar estas iniciativas, entre las que se engloba dar una definición bancaria o no a las entidades que trabajan en fintech, establecer el nivel de seguridad que proveen y los riesgos que implican para el mercado.
Sobre estos, Carney destaca especialmente la volatilidad en los precios y la seguridad en las infraestructuras digitales, aunque menciona que la posibilidad de que estos sistemas reemplacen del todo a la banca tradicional podría ser positivo para la estabilidad financiera, si bien este sector debe prepararse desde ahora tanto en políticas internas como en terreno regulatorio para poder adaptarse al futuro. Varios expertos antes que él han compartido esta opinión: la banca debe adaptarse a las nuevas tecnologías, como la blockchain, para no desaparecer en los próximos años.
Seguramente lo harán, tal como piensa Carney: no hay nada realmente nuevo bajo el sol. Así como antes han surgido nuevas tecnologías que vinieron a revolucionar el mundo, el Internet la más destacada, ahora sólo hace falta encajar la fintech dentro de un marco regulatorio adecuado.
Nuestro punto de partida es que no hay nada nuevo bajo el sol. Tenemos que ser disciplinados sobre enfoques consistentes de actividades similares llevadas a cabo por diferentes instituciones que dan lugar a los mismos riesgos de estabilidad financiera. Simplemente porque algo es nuevo no significa necesariamente que debe ser tratado de manera diferente. Asimismo, sólo porque está fuera del perímetro regulador no significa necesariamente que necesita ser llevado dentro.
Mark Carney
Gobernador
Para ello ya se están llevando a cabo numerosos esfuerzos en todo el mundo, de los cuales Carney resalta las ‘cajas de arena’ regulatorias, como la llevada a cabo por la Financial Conduct Authority (FCA), donde la implementación de una tecnología emergente se prueba en un espacio seguro y libre de las regulaciones diseñadas para los productos concluidos; los procesos de autorización a organismos no bancarios y las pruebas de concepto colaborativas. De este modo, “Al habilitar las tecnologías y gestionar los riesgos, podemos ayudar a crear un nuevo sistema financiero para una nueva era… bajo el mismo sol”, tal cual concluye el gobernador.
Por otro lado, el presidente del Banco Central de Alemania, Jens Weidmann, parece tener un enfoque un tanto más oscuro que Carney. Según declaró el mismo día de la conferencia, estas tecnologías pueden amenazar la estabilidad del sistema financiero, por lo que deben ser estudiadas y reguladas lo más pronto posible. No obstante, hay que decir que aún se encuentran más que todo en la fase de estudio y desarrollo, así que, tal como opinó el ex rector del Instituto de Economía Internacional: la innovación primero y la regulación después.
Imagen Destacada: Huffington Post