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Lightning y las soluciones de capa 2 podrían ser "abusadas por delincuentes", según el estudio.
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Consideran que generan "problemas para las autoridades" y apoyan leyes para limitar su uso.
Como parte de las investigaciones que se adelantan en la Unión Europea (UE) sobre temas relacionados con criptomonedas, privacidad y ciberdelincuencia, un estudio señala a la red Lightning Network de Bitcoin y otras soluciones de capa 2 como tecnologías de «ofuscación de datos» de las que los delincuentes podrían «abusar».
Los argumentos son expuestos en el primer informe sobre el tema elaborado por el Centro de Innovación de la UE, una «red colaborativa de laboratorios de innovación» en la que participan todos los estados miembros de la eurozona.
El eje del estudio gira en torno a la necesidad de implementar normas contra el lavado de dinero en la región. De ahí que se hagan explícitas preocupaciones sobre las complicaciones que se presentan a las autoridades para el rastreo de fondos, si las herramientas que utilizan facilitan a los usuarios ocultar su identidad en aras de conservar la privacidad.
Es por eso que los investigadores cuestionan algunos avances implementados dentro de las cadenas de bloques, señalando incluso a Lightning de Bitcoin como una herramienta que «puede interferir las investigaciones policiales».
Se refieren a la red descentralizada para micropagos instantáneos con BTC. Tal como ha explicado CriptoNoticias, Lightning funciona a través de canales de pago mediante los cuales las personas se transfieren fondos en una dirección, fuera de la blockchain. Aunque a los investigadores de la UE les inquieta que algunos canales «no transmitan todos los datos de las transacciones a la cadena de bloques, sino solo la apertura y el cierre del canal».
Además de esta red, el informe cita a otras soluciones usadas para preservar la privacidad, como Mimblewimble, pruebas de conocimiento cero (zk), mezcladores de criptomonedas como Tornado Cash y las llamados criptoactivos de privacidad como Monero, Zcash, Grin y Dash.
Las observaciones también apuntan a las wallets de autocustodia. Por ello apoyan y recomiendan el uso de monederos custodiados en los que el usuario no posee su propia clave privada. Esto, porque consideran que así se crean oportunidades de «cooperación con las autoridades, facilitando a los exchanges y los proveedores de servicios la incautación de criptoactivos que se califiquen como de carácter delictivo».
Sin embargo, la custodia de las criptomonedas por terceros es una práctica a la que se opone la mayoría de los miembros del ecosistema por considerarla contraria a la filosofía de bitcoin y contraria a la meta de lograr soberanía financiera.
Para los investigadores de la UE este deseo de preservar datos de las transacciones es motivo de preocupación y por ello aconsejan a los reguladores implementar leyes que de alguna forma limiten la privacidad entre los usuarios de criptomonedas. Esto, a fin de facilitar la labor de las autoridades. Critican principalmente a los mezcladores de criptomonedas, ya puestos en tela de juicio en países como Estados Unidos y Países Bajos donde ya hay desarrolladores en prisión.
Las restricciones también están contempladas en el Reglamento para el Mercado de Criptoactivos (MiCA) que entrará en vigor en diciembre próximo y en el cual se establecen normas que limitan la inclusión de criptomonedas de privacidad en los exchanges. Son medidas que apoya la UE bajo el argumento de un supuesto aumento de delitos con criptomonedas.
La presencia de datos cifrados en las investigaciones penales no deja de aumentar y se espera que crezca aún más en los próximos años. Muchos Estados miembros han reaccionado ante esta tendencia con disposiciones jurídicas generales nuevas o actualizadas para ayudar a las fuerzas de seguridad a eludir el cifrado utilizado por los delincuentes para ocultar sus actividades ayudar a las fuerzas y cuerpos de seguridad a eludir el cifrado utilizado por los delincuentes para ocultar sus actividades.
Centro de Innovación de la UE.
Cabe resaltar que los señalamientos del informe también hicieron mención a la minería de Bitcoin, actividad que dicen que se ha infiltrado en el lavado de dinero. «Por ejemplo, se han utilizado plataformas o granjas mineras para blanquear fondos, comprando equipos de minería con ingresos procedentes de actividades delictivas para simular que los fondos se han obtenido legalmente y ocultar su origen delictivo», según indica la publicación.