La casa de cambio Coinbase se ha visto recientemente envuelta en una discusión legal en los Estados Unidos en la cual un organismo tributario de dicho país, el Internal Revenue Service (IRS), le exige entregar información concerniente a los ciudadanos estadounidenses registrados en su plataforma que serían contribuyentes al estado.
Luego de diversos alegatos presentados por ambas partes, una corte judicial del Distrito Norte de California ha fallado a favor del organismo tributario, obligando a que Coinbase deba entregar la base de datos de usuarios estadounidenses que el IRS exige para su revisión.
Esta petición siembra un precedente poco atractivo en la comunidad de las criptomonedas por su naturaleza invasiva en la privacidad de los datos de los usuarios que utilizan dicha plataforma para la compraventa de bitcoins. Esta solicitud presentada por el IRS se remite específicamente para actividades del sector tributario, puesto que este organismo busca hacer valer los intereses del estado norteamericano respecto a los impuestos que los usuarios estadounidenses de Coinbase deben declarar por sus operaciones con criptomonedas.
A medida que el uso de monedas virtuales ha crecido exponencialmente, algunos han planteado preguntas sobre el cumplimiento tributario. Herramientas como la convocatoria «John Doe» autorizada hoy, envían un claro mensaje a los contribuyentes estadounidenses de que cualquier forma de moneda que usen – bitcoin o dólares y centavos tradicionales – vamos a trabajar para asegurar que están informando plenamente sus ingresos y el pago de su parte justa de los impuestos.
Caroline D. Ciraolo
Jefa de la División de Impuestos del Departamento de Justicia
Las peticiones denominadas «John Doe» se refieren a solicitudes realizadas donde la identidad de las personas involucradas es mantenida en anonimato por razones de privacidad. En el presente caso, la petición fue realizada para exigir información concerniente a cierto grupo de personas que podría estar esquivando sus responsabilidades tributarias a través de la compra de criptomonedas en Coinbase, por lo cual el IRS desea investigar en la base de datos de usuarios de la casa de cambio.
Debido a las ventajas de privacidad y anonimato que las transacciones con Bitcoin y otras criptomonedas ofrecen, rastrear las identidades reales de las personas que realizan operaciones con estas monedas es bastante difícil de lograr; una desventaja que los organismos tributarios estatales actualmente sufren. Aun así, con la actual regulación de las criptomonedas en diversos países, Estados Unidos entre ellos, las casas de cambio son los principales focos de recolección de datos de usuarios a los que los organismos gubernamentales pueden acceder para conectar identidades reales a las transacciones realizadas en bitcoins y otras criptomonedas.
A pesar que de Coinbase había informado públicamente de su postura de oposición a la petición presentada por el gobierno estadounidense, por razones de privacidad ante sus usuarios, también dejó claro que colaboraría ante las autoridades competentes en todo momento. Ahora con la aprobación de dicha solicitud por parte de una corte judicial, no cabe duda que la casa de cambio tendrá que entregar la información solicitada por las autoridades estatales estadounidenses.
El precedente del caso IRS/Coinbase en la comunidad Bitcoin
La tecnología de Bitcoin y las criptomonedas es abanderada políticamente de ideales libertarios en los cuales la injerencia estatal de cualquier tipo no es bien recibida, este caso donde un organismo gubernamental exige datos de identidades reales es claramente un precedente bastante incómodo para el bitcoiner promedio que desea realizar transacciones en la mayor privacidad y anonimato posibles.
Sin embargo, es la naturaleza centralizada de las casas de cambio la que hace que sea posible la recolección de información concerniente a las identidades reales de los usuarios, permitiendo de esta manera que organismos como el IRS puedan acceder a estas bases de datos utilizando cualquier razón legal en protección del estado, la empresa y/o hasta los mismos usuarios.
Pero es la naturaleza peer-to-peer de la tecnología de Bitcoin la que se debe tener presente en todo momento, si lo que se quiere es ponderar la privacidad y el anonimato por encimas de las comodidades y ventajas que ofrece el uso de estas plataformas reguladas y sujetas a las normas legales de estados y naciones. Si bien las regulaciones han aportado una capa de legitimidad y confianza al uso de las criptomonedas, varios de los ideales y ventajas que traen estas tecnologías se han visto forzadas a ser sacrificadas por los usuarios a la hora de usar las casas de cambio.
Por otro lado, la figura legal que posee Bitcoin y las criptomonedas en los Estados Unidos como mercancías o commodities obliga a que las transacciones realizadas con estas monedas virtuales estén sujetas al cargo de impuestos. Por ende tanto usuarios como empresas están en la obligación legal de colaborar con los organismos competentes a la hora de declarar los impuestos relacionados con la compraventa de bitcoins y otras criptomonedas.
Este caso de Coinbase y el Internal Revenue Service (IRS) es hasta ahora el más relevante del ecosistema de las criptomonedas, puesto que este tipo de solicitudes son más frecuentes en las instituciones bancarias tradicionales que en ocasiones revelan casos de empresas offshore como las de los famosos Panama Papers. Aun sí, con las características de privacidad y anonimato de las criptomonedas, no podemos descartar que este tipo de solicitudes por parte de organismos gubernamentales hacia casas de cambio y otros servicios se vuelva más frecuente en el futuro.