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La emisiรณn inorgรกnica de dinero es una de las herramientas favoritas de los bancos centrales.
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Toda acciรณn tiene consecuencias y estas no son siempre fรกciles de solucionar.
El sistema financiero actual, basado en el dinero fรญat (es decir, el dinero de curso forzoso y sin respaldo emitido por los Estados), se asemeja a una partida de Tetris jugada con piezas impredecibles. Cada movimiento parece resolver un problema inmediato, pero a costa de crear otro mรกs adelante.
Todos sabemos cรณmo es este juego: en algรบn punto, la acumulaciรณn de piezas sin encajar ocupa el espacio disponible y pierdes la partida, por mรกs que lo hayas llevado bien durante algรบn tiempo.
El Tetris del sistema financiero, construido sobre el dinero fรญat, se sostiene a fuerza de distintas maniobras, tales como la emisiรณn inorgรกnica de dinero y decisiones econรณmicas que buscan atar con alambres un sendero econรณmico ยซprรณsperoยป.
Cuando los bancos centrales imprimen dinero, estรกn alterando la oferta monetaria de forma artificial. Esta prรกctica, presentada muchas veces como necesaria para estimular la economรญa o enfrentar crisis, tiene un costo evidente: la inflaciรณn.
El resultado es que cada unidad monetaria pierde poder adquisitivo, erosionando los ingresos y ahorros de millones de personas. Pero, la maquinita de hacer dinero mantiene enamorados no solo a gobernantes, sino tambiรฉn a economistas que son aquellos que deberรญan advertir de sus riesgos.
En los รบltimos aรฑos, esta tendencia se ha intensificado. Tras la crisis financiera de 2008, y mรกs aรบn con la pandemia de 2020, la emisiรณn monetaria en varios paรญses, por ejemplo, en Estados Unidos, se disparรณ. Esta expansiรณn, sin un freno estructural, presiona los precios al alza y crea burbujas en activos financieros.
Incluso el dรณlar estadounidense (USD), la moneda que acumula mรกs adopciรณn del mundo, estรก sujeto a la devaluaciรณn por su creciente impresiรณn. Por lo tanto, es crucial tener en cuenta que pierde poder adquisitivo, aunque se mantiene mรกs fuerte que otras monedas debido a su mayor demanda.
Puede verse a continuaciรณn la pรฉrdida de valor adquisitivo del dรณlar desde la creaciรณn de la Reserva Federal (Fed), banco central estadounidense, en 1913:
A la par de la creciente impresiรณn de dinero, los bancos centrales operan con herramientas que parecen darle control, pero que tambiรฉn pueden agravar el problema. Subir o bajar las tasas de interรฉs se ha convertido en su forma preferida de moldear la economรญa.
Cuando hay inflaciรณn, suben las tasas de interรฉs; cuando la economรญa se frena, las bajan. Pero esta lรณgica crea distorsiones: las subidas pueden enfriar la economรญa mรกs de lo necesario, mientras que bajadas excesivas estimulan la deuda y el gasto irresponsable.
A ello se suma las medidas econรณmicas de cada gobierno que tambiรฉn pueden distorsionar los precios de la economรญa, como restricciones financieras o la reciente guerra de impuestos a las importaciones, reportada por CriptoNoticias.
El problema, al final, es que no es un sistema que responde solo a cรกlculos tรฉcnicos, sino a las consideraciones del gobernante de turno. Ademรกs, las decisiones econรณmicas de los paรญses muchas veces estรกn motivadas por intereses polรญticos de corto plazo.
Entonces, hoy un gobierno impone una polรญtica y maรฑana otro la revierte estableciendo la suya, un ciclo sin fin que se desconoce a dรณnde puede llegar. Este vaivรฉn introduce mรกs volatilidad en un sistema que ya tiene bastante.
No hay quiรฉn se salve de este Tetris, pero sรญ quienes pueden jugar mejor
Como es clรกsico del ser humano buscando salir a flote siempre, los traders e inversionistas aprovechan estos vaivenes para operar en los mercados de acuerdo a las cambiantes expectativas econรณmicas. Aunque, aรบn asรญ, no dejan de estar atados al incierto panorama de este Tetris interminable.
ยฟPero quรฉ queda para el resto? ยฟQuรฉ queda para el ciudadano comรบn que no es consciente de cรณmo se devalรบa su dinero fรญat? Mientras los bancos centrales y los gobiernos ยซjueganยป con las reglas del sistema econรณmico, las consecuencias las vivimos todos.
La inflaciรณn no es solo una estadรญstica: significa que con el mismo ingreso/salario se compra menos. Significa que los ahorros pierden valor continuamente, sin necesidad de una catรกstrofe financiera visible.
Ademรกs, en paรญses con monedas mรกs dรฉbiles, las decisiones de potencias econรณmicas tienen un efecto amplificado. Subidas de tasas en Estados Unidos, por ejemplo, pueden hacer que los capitales salgan de economรญas emergentes, afectando el tipo de cambio y aumentando aรบn mรกs la inflaciรณn local.
Frente a este panorama, estรก claro que el sistema financiero fรญat enfrenta problemas estructurales que no se resuelven solo con parches de corto plazo. ยฟQuรฉ se hace entonces?
Una posible soluciรณn es exigir mayor responsabilidad fiscal y reglas claras a los gobiernos y bancos centrales, limitando la emisiรณn inorgรกnica de dinero y reduciendo el uso polรญtico de la polรญtica monetaria. Un ejemplo podrรญa ser prohibir la financiaciรณn del gasto pรบblico con emisiรณn de dinero, como quiere el presidente argentino Javier Milei.
A nivel personal, mantener una diversidad de activos con posible apreciaciรณn o menor pรฉrdida de valor es necesario para surfear este Tetris. De lo contrario, los ahorros pueden devaluarse de forma estrepitosa.
Por ejemplo, quien se quedรณ con 50.000 pesos (ARS) en Argentina en 2001 cuando eran equivalentes a 50.000 dรณlares (USD) y alcanzaban para comprar una propiedad, hoy tendrรญa 45 dรณlares que apenas alcanzan para pagar una cena para tres personas en un restaurante.
Bitcoin como vรญa de escape
Esta crisis del sistema financiero tradicional hace que cobre relevancia bitcoin (BTC), un activo que naciรณ en 2009 como una alternativa distinta del dinero fรญat. Considerado como ยซoro digitalยป por sus defensores, esta moneda ha tenido desde su origen una creciente adopciรณn por sus atributos รบnicos.
A diferencia del dinero fรญat, bitcoin tiene una emisiรณn limitada por diseรฑo. Nadie puede decidir arbitrariamente imprimir mรกs. Su polรญtica monetaria es transparente, predecible y no responde a los intereses de un banco central, ni a los ciclos electorales.
Con su oferta fija, su demanda creciente ha hecho que su precio suba en torno a cada halving, evento que reduce a la mitad la emisiรณn de BTC cada cuatro aรฑos, como se ve a continuaciรณn.
Esto no significa que bitcoin no tenga riesgos. Su volatilidad de precio en base a sus cambios fuertes de oferta y demanda son obstรกculos reales. Pero tambiรฉn es cierto que, frente a sistemas cada vez mรกs arbitrarios y manipulables, tener acceso a una forma de dinero descentralizada ofrece una salida.
No es una utopรญa: es una red diseรฑada para resistir la censura, la inflaciรณn y el control polรญtico. Es ademรกs un activo que puede autocustodiarse y transferirse directamente de forma instantรกnea sin necesidad de intermediarios, autorizaciones o costos altos.
En definitiva, mientras los bancos tradicionales insisten en jugar al Tetris con dinamita, los individuos tienen la posibilidad de mirar hacia otras opciones. Bitcoin no arregla todo, pero invita a dejar de jugar con explosivos y construir, tal vez, una estructura mรกs sรณlida desde el principio.
En este sentido, no serรญa de extraรฑar que la inversiรณn en bitcoin siga ascendiendo con el tiempo, mientras mรกs personas descubren la importancia de tener su dinero fuera del sistema fรญat. Por ello, todo ahorrista deberรญa tener aunque sea una pequeรฑa fracciรณn en BTC para no perderse su potencial.
Descargo de responsabilidad: Los puntos de vista y opiniones expresadas en este artรญculo pertenecen a su autor y no necesariamente reflejan aquellas de CriptoNoticias. La opiniรณn del autor es a tรญtulo informativo y en ninguna circunstancia constituye una recomendaciรณn de inversiรณn ni asesorรญa financiera.