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La oferta y la demanda son lo único que impulsa el precio de las criptomonedas.
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Se trata de un mercado arriesgado, que no está exento de actores malintencionados.
En un reciente tuit, el trader que se identifica como SantinoCripto manifestó su entusiasmo por el mercado de criptomonedas, al que califica como «la máxima expresión del liberalismo económico». El comentario surge después de que una memecoin llamada PEPE experimentara un aumento de más del 300% en su valor en tan solo una semana.
El liberalismo económico es una teoría económica y política que defiende la libertad de los individuos y empresas para realizar intercambios voluntarios, con mínima intervención del gobierno. Se basa en la creencia de que la economía funciona mejor cuando se permite a los actores del mercado actuar libremente, guiados por sus propios intereses.
Las memecoins, como lo es el token PEPE, no cuentan con fundamentos sólidos y su valor se basa únicamente en la especulación. Esto las convierte en inversiones (o, quizás sea mejor llamarlas «apuestas») arriesgadas.
El trader destacó que, a pesar de los riesgos, el mercado de criptomonedas ofrece oportunidades para ganar (y perder) grandes sumas de dinero en un corto periodo de tiempo. Según él, para tener éxito, es necesario contar con «paciencia, constancia, perseverancia y resiliencia».
Los riesgos de PEPE y las shitcoins
A pesar de las posibles ganancias que algunas personas han logrado con las memecoins como PEPE, hay riesgos significativos asociados con la inversión en este tipo de tokens.
Ayer, 1 de mayo, CriptoNoticias reportó algunas señales de alerta sobre esta moneda. Entre ellas, se encuentra el hecho de que hay una gran cantidad de su circulante distribuido en muy pocas wallets. Tal situación hace que se incremente el riesgo de manipulación del mercado y la posibilidad de que los creadores (que fueron también los primeros compradores) se beneficien a expensas de otros inversionistas.
Bitcoin, el refugio más seguro
SantinoCripto termina su tuit con una referencia a bitcoin (BTC): «Por cierto, Bitcoin no te ofrece la posibilidad de convertirte en millonario en un lapso pequeño de tiempo (1-2 años)».
Es importante aclarar que esta afirmación no es necesariamente cierta, ya que dependerá de la cantidad de dinero invertido y del rendimiento del mercado en ese período específico.
Además, resulta fundamental recordar que bitcoin no fue concebido como una inversión. Su creador, Satoshi Nakamoto, tenía como objetivo que bitcoin fuera «dinero en efectivo electrónico entre pares», es decir, una forma de intercambiar valor sin la necesidad de intermediarios. No obstante, con el tiempo, la percepción de bitcoin ha evolucionado y muchos lo consideran ahora como un activo financiero.
Dentro del mundo de las criptomonedas, bitcoin tiene varias características que la hacen notoriamente superior a las que fueron creadas posteriormente (o «altcoins»). Por ejemplo, es la que posee mayor descentralización. Los nodos distribuidos en todo el mundo hacen que sea extremadamente difícil que una sola entidad tome el control de la red.
El hashrate que respalda a bitcoin la convierte en la moneda digital más segura entre todas las existentes. El hashrate es la cantidad de poder de cómputo dedicado a mantener y proteger la red de Bitcoin, lo que garantiza su seguridad y resistencia frente a posibles ataques.
Y, por último, con relación a su precio (medido en una moneda fíat como es el dólar), a pesar de su volatilidad en el corto plazo, BTC ha demostrado ser una buena reserva de valor en el mediano y largo plazo. Esto ha llevado a que cada vez más personas e instituciones lo consideren como un refugio seguro frente a la inflación y la devaluación del dinero emitido por los Estados.
En resumen, aunque es posible que invertir en bitcoin no garantice ganancias rápidas y exorbitantes en un corto período, sí ofrece características que lo posicionan como un refugio seguro y una buena reserva de valor a lo largo del tiempo. Esto, junto con su naturaleza descentralizada y segura, hacen de bitcoin un activo único en el mundo.