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Las instituciones se están reorganizando y reduciendo el riesgo.
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2025 comenzó fuerte para los ETF de bitcoin, pero luego hubo una reversión.
Un torbellino de movimientos financieros sacude a los fondos de inversión basados en bitcoin.
Más de un año después de que los ETF al contado fueran aprobados en Estados Unidos, en enero de 2024, la empresa proveedora de datos on-chain CryptoQuant advierte que estos instrumentos atraviesan un punto crítico.
Las cifras revelan una historia de ascensos meteóricos y caídas abruptas, mientras las instituciones ajustan sus estrategias en un entorno económico cada vez más incierto.
El año comenzó con fuerza para los ETF de bitcoin. Las entradas de capital reflejaban un apetito voraz por estos productos financieros, impulsando la acumulación de bitcoin por parte de las gestoras.
Sin embargo, la tendencia dio un giro drástico. CryptoQuant reporta una reversión significativa: desde el máximo histórico de este año, las entradas han caído en casi 5.000 millones de dólares, lo que equivale a una reducción del 12%, como se aprecia a continuación:
Este retroceso arrastra consigo el precio de bitcoin, que actualmente ronda los 87.000 dólares. El desempeño de los ETF tiene un vínculo directo con la cotización de la moneda.
Las empresas que gestionan estos fondos deben adquirir y mantener bitcoin en sus tesorerías para respaldar las acciones emitidas. Cuando la demanda crece, las firmas salen al mercado a comprar más BTC, lo que eleva su precio por la simple dinámica de oferta y demanda.
Pero el proceso también funciona a la inversa: si los inversionistas retiran su capital, las gestoras venden parte de sus tenencias para cubrir las redenciones, aumentando la oferta y presionando el valor del activo a la baja.
De la euforia a la estabilización
Para entender la magnitud del cambio, basta con mirar las cifras históricas. En 2024, las entradas acumuladas de los ETF superaron los 30.000 millones de dólares, un crecimiento constante que alimentó el optimismo en el mercado.
En contraste, 2025 arrancó con el mismo ímpetu, pero pronto perdió fuerza, como se aprecia en el siguiente gráfico.
CryptoQuant señala que, tras semanas de salidas, el flujo neto diario de estos fondos parece estabilizarse, «después de varias semanas de salidas, sin una demanda ni una oferta fuertes».
Aun así, los tenedores de ETF no están en terreno negativo. Con un precio realizado —el costo promedio de adquisición— de 72.546 dólares, los inversionistas mantienen una ganancia no realizada promedio del 17%. Esto sugiere que, pese a la turbulencia, el mercado aún no ha tocado fondo, señala la empresa.
Las instituciones se repliegan
Detrás de esta montaña rusa de flujos se encuentra un factor clave. «Las instituciones se están reorganizando y reduciendo riesgos», asegura la firma de investigación.
La incertidumbre macroeconómica, intensificada por decisiones políticas recientes, juega un papel determinante.
La administración del presidente Donald Trump arreció su política arancelaria a las importaciones desde México, Canadá y China, una medida que sacude la estabilidad económica global, como lo reportó CriptoNoticias.
Estos aranceles elevan los costos de los bienes importados, avivan la inflación y obligan a bancos centrales, como la Reserva Federal, a recalibrar sus políticas monetarias.
Aunque bitcoin suele ser percibido como un refugio en tiempos de crisis, su comportamiento no escapa a estas dinámicas. En contextos de alta volatilidad, los inversionistas tienden a refugiarse en activos más tradicionales, como los bonos del Tesoro, dejando de lado opciones de mayor riesgo.
Además, el fortalecimiento del dólar, impulsado por las tensiones comerciales, añade presión bajista sobre bitcoin y otras criptomonedas.
Un futuro en la balanza
Los ETF de bitcoin, que alguna vez prometieron ser el puente entre las finanzas tradicionales y el mundo de las criptomonedas, enfrentan ahora un momento definitorio.
La estabilización de los flujos sugiere una pausa en la tormenta, pero el panorama sigue siendo frágil. Mientras las instituciones ajustan sus velas y el mercado global lidia con las ondas expansivas de las políticas comerciales, el destino de estos fondos —y del bitcoin que los sustenta— permanece en un delicado equilibrio.