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Ya han caído empresas medianas, y hay signos de deterioro en algunas de las grandes.
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Estamos entre la fase de euforia de la burbuja, en tránsito hacia el inicio de la caída.
Desde inicios de 2021, el analista financiero y asesor de inversión Alberto Cárdenas advirtió que las principales acciones de riesgo comenzarían a bajar, pues estaba en formación una burbuja, la cual atribuía a «la mayor creación de crédito y estímulo de la historia financiera», que se inició en 2020.
En una actualización de su hilo de Twitter del año pasado, Cárdenas señaló que el proceso de desapalancamiento o desinfle de la burbuja tiene una duración mínima de 20 meses, por lo cual los usuarios deben estar atentos al comportamiento de los activos hasta marzo del año que viene.
El especialista sostiene que de acuerdo al modelo propuesto por James Montier sobre la anatomía de una burbuja, caen primero los activos más riesgosos y apalancados como las denominadas SPAC, compañías que son creadas para recaudar fondos destinados a la adquisición o fusión con compañías existentes. También cita al fondo cotizado o ETF ARKK, conformado por acciones de empresas de riesgo, algunas de las cuales ya exhiben pérdidas este año, entre ellas Tesla.
Los principales índices comienzan a caer
Respecto al comportamiento de los índices bursátiles, se repite el lema de que primero caen los más riesgosos, dice Cárdenas. Señala entre estos el índice de mercados emergentes ($EEM), que comenzó su declive en febrero de 2021 y el índice Russell ($IWM), que incluye acciones de baja capitalización y desciende desde noviembre de 2021.
Entre los primeros índices de Wall Street, Nasdaq inició primero la caída, en noviembre de 2021, mientras que S&P 500 viene en declive desde enero de este año, puntualiza Cárdenas. El especialista destaca que el conflicto Rusia y Ucrania no es el causante de la caída de las principales acciones. «La invasión de Rusia a Ucrania solo ha sido un catalizador para acelerar un proceso que ya estaba en marcha desde el año pasado. La burbuja previa es la principal causa de lo que vemos», señala Cárdenas.
A la subida acelerada de 2020 y 2021 se llega a un tope antes de que los mercados comiencen a caer, pero se trata de un proceso que toma meses, expresa Cárdenas.
¿Cómo afecta esto a bitcoin?
«A nivel emocional, aun tenemos muchos elementos de euforia del año pasado, pero es menor. Hoy estamos mas cercanos a la complacencia que de la euforia», dice Cárdenas. Estos términos, euforia y complacencia, son los que identifican a las fases que están antes y después de llegar al máximo de la burbuja. «El desinfle está en proceso, es la única razón por la que hemos visto lo que hemos visto en otros mercados como Cripto incluso», señala Cárdenas.
En el gráfico siguiente, colocado en Twitter por @Negentropic, muestran los activos de riesgo que han caído desde inicios de año, entre ellos bitcoin, en contraste con las mercancías o commodities, que se han revalorizado.
En el caso de bitcoin, si bien ha retrocedido desde principios de año, el precio ha estado lateralizando en los últimos días y se ha consolidado por encima de los USD 39.000, tal como lo reportó CriptoNoticias. Sin embargo, bitcoin no termina de romper ese nivel de resistencia que le llevaría a intentar franquear la barrera psicológica de los USD 40.000.
En cuanto a otros activos de riesgo, el analista señala que S&P 500 es uno de los índices que tarda más en ajustar. Debido a ello, se encontraría entre las dos fases mencionadas, aunque más cerca de la complacencia. En esta última se mantienen las inversiones, aunque con un ritmo menor, antes de que se precipite la caída de los mercados.