-
.
-
.
El tan esperado lanzamiento de la nueva criptomoneda Zcash, tras algunos atrasos para realizar auditorías, finalmente se llevó a cabo el 28 de octubre. El patrocinio que ha tenido sumado a las destacadas personalidades involucradas en su realización, más su promesa de privacidad absoluta para todos sus usuarios, la han convertido en todo un fenómeno.
Y continúa siéndolo, pues el día de su lanzamiento se registraron durante su compraventa en la popular casa de cambio Poloniex transacciones por hasta 3.299,99 BTC por ZEC, es decir, más de 2,3 millones de dólares, con el precio actual de bitcoin a $715 por unidad.
El valor del ZEC pasó en cuestión de minutos de cero hasta su récord, para luego bajar hasta alrededor de 33 BTC y de ahí a su precio actual, 5,6 BTC con tendencia descendente.
Una volatilidad bastante llamativa, sin lugar a dudas, que no se apreció con la misma magnitud en casas de cambio como Kraken, donde su precio máximo fue cercano a los 200 BTC por ZEC, o Bitfinex, donde apenas y hubo algunas compras de la criptomoneda.
La principal oferta de esta criptomoneda es utilizar el protocolo de conocimiento cero para verificar, durante las transacciones, únicamente su validez. De este modo, se oculta de forma automática el emisor, el receptor y la cantidad transferida, funcionalidad que parece haberla convertido, incluso antes de su lanzamiento, en una fuerte competidora de otras criptomonedas privadas, como Monero y Komodo.
Pero tras ella se ocultan fuertes conexiones e intereses, así que esto parece marcar una fuerte diferencia con sus competidoras. Como si, desde el principio, estuviera especialmente diseñada para acompañar a Bitcoin y Ethereum en su liderazgo en el mercado de las monedas digitales. Gavin Andresen, Vitalik Buterin, Erik Voorhees, Barry Silbert, Fred Ehrsam e incluso Amazon, el Ministerio Israelí de Ciencia y Tecnología y la DARPA están, de un modo u otro, involucrados con Zcash.
De hecho, según su fundador, Zooko Wilcox, lo que pretende este proyecto es unir a miles de millones de personas.
La razón por la que Zcash Company ha vertido años de nuestras vidas en este proyecto, y la razón por la que muchas personas en todo el planeta han dado un paso adelante para unirse a nosotros, es que creemos que esta tecnología tiene el potencial de empoderar y elevar a miles de millones de personas. Creemos que Zcash y otras tecnologías similares pueden, con más años de evolución y trabajo duro, permitir a cualquier persona, en cualquier lugar, cooperar y compartir recursos, así como construir las organizaciones sociales más eficientes y más humanas. Esto puede liberar el potencial casi ilimitado de las personas a ayudarse a sí mismas y a ayudarse mutuamente. Esta tecnología puede hacer por la cooperación lo que hizo el Internet por la comunicación hace dos décadas.
Zooko Wilcox
CEO y Fundador
Durante su lanzamiento, los desarrolladores grabaron un vídeo en vivo para mostrar el nacimiento del bloque génesis, y aunque, según indican sus redes sociales, Zcash 1.0.0 adquirió un bug que provocaba que las transacciones nunca se confirmaran, este problema ya fue resuelto. Asimismo, el propio Wilcox explica durante el post de inicio que en primer lugar los usuarios deben informarse muy bien sobre esta criptomoneda y tener en cuenta que “esta tecnología es todavía un experimento y aún no está demostrado que es segura y estable”.
En cuanto a este tema, Nathan Wilcox ya había anunciado que Zcash sería más bien volátil durante sus inicios. En lo próximo estarán implementando diversas actualizaciones e incluso pueden producirse cambios drásticos, como un cambio de Proof-of-Work a Proof-of-Stake, el desarrollo de la detección de posibles monedas falsas y la eliminación de la deuda técnica con Bitcoin Core.
Por otra parte, como moneda consensual, los grandes cambios serán libres de adoptarse o no por sus usuarios, aunque aún no está claro cuál será el método de decisión y cómo se realizarán las propuestas. De momento, también parece recomendable para los potenciales usuarios esperar a que el Zcash termine de estabilizarse en el mercado.