A medida que el uso y adopción de bitcoin aumenta en el mundo, esta criptomoneda va tomando participación en los eventos de impacto global, por los que se está viendo afectado directa o indirectamente. Debido a la integración a la economía y las finanzas, los movimientos de precios de otros activos como el oro, el petróleo, o el valor monetario de diversas divisas, el precio del bitcoin y demás criptoactivos fluctúan en consecuencia.
La guerra es otro de los grandes flujos de dinero del mundo. Los eventos bélicos sin duda son un factor determinante en el futuro económico de las regiones y los países que participan de ella, no solo por los daños en la infraestructura y sus efectos bélicos, como el desplazamiento de refugiados o el aislamiento geográfico de población civil y vulnerable; sino por el sostenimiento de una cadena de negocios que van desde la extracción de materia prima y minerales para la fabricación de armas, pasando por el tan necesario petróleo para el transporte, hasta el impulso del desarrollo e investigación de tecnología, e incluso las estrategias monetarias y financieras, incluyendo los bloqueos económicos y la ruptura de relaciones; alcanzando también los flancos culturales y mediáticos.
La relación de Bitcoin con estos eventos pudo atestiguarse durante la mañana de hoy, pues si bien lo sucedido no resultó en una catástrofe bélica, sí ha tenido bastante relevancia en la geopolítica internacional. El día de ayer, Corea del Norte lanzó un misil que cruzó el espacio terrestre de Japón y se estrelló en el mar a 1.180 kilómetros al este de la isla de Hokkaido.
La distancia alcanzada por este misil parece sugerir que Corea del Norte desea atacar el territorio estadounidense de Guam, probando el alcance del armamento para llegar a la isla ubicada en el pacífico, y que es un territorio no incorporado de Estados Unidos. De concretarse un ataque de este tipo, en el que un misil alcance y estalle podría complicar la situación definitivamente en la región.
Las tensiones se han incrementado durante los últimos meses ante las constantes pruebas que Corea del Norte realiza con misiles, a sabiendas que este país es uno de los mayores arsenales de armas nucleares del mundo y parece no prestar atención a las presiones internacionales, las advertencias de Estados Unidos, Corea y Japón y la mediación de China y Rusia.
Este martes en la mañana se sintieron los efectos de esta nueva provocación militar. Las bolsas de Estados Unidos sufrieron pérdidas. El índice Dow Jones descendió en 50 puntos en media hora, luego de haber caído 100 puntos al abrir. Otro índice, el Standard & Poor 500 descendió 0,3%, mientras que los índices de Nasdaq descendieron en 0,4%.
A su vez, el dólar descendió con respecto a otras monedas fuertes como el euro, que por primera vez desde enero de 2015 alcanzó una tasa de $1.20 dólares. Sin embargo, se ve más próximo que la jornada se basara sobretodo en la tormenta tropical Harvey, que impactó directamente al estado de Texas, donde se concentra gran parte de la industria petrolera estadounidense. El petróleo estadounidense descendió 14 centavos de dólar ubicándose en $46,43 dólares por barril de crudo, mientras que el Brent cayó 20 centavos hasta valer $51,22 dólares. Mientras, el precio mundial del oro incrementó su valor 1,1%, cotizando en $1.329 dólares la onza.
Los índices financieros de Japón, reflejados en el Nikkei 225 cerraron a la baja con 0.5% menos. El yen japonés se mantuvo estable, capitalizando 0,7% más de valor con respecto al dólar (108,49 yen). En Corea del Sur, el índice Kospi se ubicó en 2364.74, descendiendo 0,2%.
Mientras, en Europa, el CAC 40 francés descendió 1.3%, el DAX alemán descendió casi 2%, a la par que el FTSE 100 británico descendió 1.1%
Por su parte, bitcoin alcanzó su máximo histórico de precio en la misma jornada, superando los $4600 dólares, al tiempo que la valorización de mercado de todas las criptomonedas alcanzó los $164.224,16 mil millones de dólares.
Como bien ha destacado durante el último trimestre del año, Japón ha aceptado a bitcoin como un método de pago, y miles de tiendas ahora lo utilizan para vender sus productos. La infraestructura tecnológica e informática de la nación parece permitirlo así, por lo que se han impulsado fuertes movimientos de comercio de la criptomoneda. Igualmente, en Corea del Sur, que posee grandes casas de cambio y comercio de criptomonedas, últimamente han destacado rompiendo sus volúmenes de comercialización.